Gran expectativa de empresas internacionales por el mercado argentino.

En octubre, el Ministerio de Energía y Minería adjudicó obras para la construcción de parques eólicos, de energía solar, biogás, biomasa y de mini-hidroeléctricas.

Lo hizo en el marco de una licitación que se lanzó a principios de año, con el claro objetivo de seducir inversiones de grandes firmas, tanto locales como multinacionales.

Como era de esperar, dado el gran potencial de recursos naturales que presenta la geografía nacional, la subasta resultó exitosa.

Argentina cosechó los precios más bajos en toda su historia y, cabe destacar, en un período muy corto de tiempo.

Entre todas las fuentes limpias, se recibieron seis veces más propuestas económicas de los 1.000 MW de potencia eléctrica que puso en juego el Gobierno Nacional. En concreto, 6.366 MW, acaparados en su inmensa mayoría por energía eólica y solar.

Este proceso técnico y comercial que comenzó en mayo, de a poco está empezando a mostrar resultados económicos.

Manos a la obra

El primer anuncio de inicio de construcción lo hizo IES Biogás, a través de su Country Manager para South América de la empresa, Luis Antonio Cerchiaro.

La compañía, líder en Italia con la instalación de más de 200 plantas, formó una asociación estratégica con Adecoagro para participar de la licitación.

Así, este consorcio hizo una apuesta que resultó más competitiva que la de sus adversarios, ofreciendo un precio de 158 dólares por MWh. El proyecto fue presentado bajo el nombre de "C.T. San Pedro Verde".

De esta manera, Adeco Agrop S.A., consiguió el contrato para la puesta en marcha de una planta con 1.415 MW de potencia.

Será radicada en la pequeña localidad de Christophersen, ubicada en el Departamento General López de la Provincia de Santa Fe, sobre la Ruta Provincial 14.

Instalada en la cercanía a dos tambos, aprovechará las excretas de los animales y otras matrices orgánicas (residuos de alimentos balanceados).

La energía eléctrica será generada con un grupo de cogeneración, compuesto por un motor endotérmico de avanzada.

Sin dudas, fue pensada en una zona estratégica, ganadera por excelencia, al sur de la bota santafesina.

En contacto con iProfesional, Cerchiaro adelantó que "durante el mes de enero" se instalarán los obradores para iniciar el proceso.

Lo dice con orgullo: "Es el primer proyecto que estará operativo de la licitación de renovables".

Si todo avanza tal cual fue planificado, en agosto de 2017 se estima que estará inyectando energía limpia al Sistema Interconectado Nacional (SIN).

"Estamos trabajando en la ingeniería de detalle constructiva", precisó. Ya está definido el cronograma, paso por paso.

Paliativo a la recesión

Esta inversión es para el Gobierno una buena señal, dado que moverá el mercado laboral regional, en un contexto adverso.

Según datos oficiales, a nivel país en los primeros nueve meses de 2016 se perdieron más de 127.000 empleos. Contra esta problemática, las renovables podrán hacer un gran aporte.

De acuerdo con las proyecciones de la Subsecretaría de Energías Renovables de la Nación que dirige Sebastián Kind, por los proyectos adjudicados en la subasta, se crearán entre 5.000 y 8.000 puestos de trabajo.

Según la Cámara Argentina de Energías Renovables (CADER) el aporte es aun mayor, siempre y cuando se cumplan los objetivos de la Ley 27.191.

Es decir, si en el año 2017 un 8% de la matriz eléctrica se compone por fuentes no contaminantes, 60.000 personas se sumarían a la actividad.

En carrera

Hasta ahora, el camino empezó a ser transitado por IES Biogás. "Hemos encargado a una consultora la evaluación para la contratación de personal", cuenta Cerchiaro.

Mientras tanto, por la necesidad de contar con expertos en el manejo de la tecnología que se va a utilizar, aterrizaron en el país cuatro técnicos de Italia.

Exclusivamente, están encargados de la supervisión de la obra. Pero, de cara al futuro, la"idea es crear un team de especialistas creado por nosotros", explica el hombre de negocios.

Además, aclaró que "la obra civil se hace con empresas argentinas".

El grueso de los insumos vinculados a la construcción será aportado por proveedores de la región, instalados en Santa Fe y otras provincias vecinas.

"Hay componentes nacionales que serán incorporados a la planta y esperamos en el futuro se pueda aumentar esta cuota", se comprometió. Será a medida que la industria local avance en la curva de aprendizaje.

Aún falta capacitar personal y conocer los equipos que se utilizan en el primer mundo.

En lo que respecta a biogás, según un relevamiento del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) en el país hay en funcionamiento más de 100 biodigestores.

Son más modestas, con tecnología menos desarrollada, previstas para instalaciones más pequeñas.