Un “termómetro” por excelencia para medir cuán apreciada o depreciada está la moneda de un país es analizar el flujo de personas que cruza la frontera para hacer turismo en el exterior. 

En el caso de la Argentina, al observar las salidas correspondientes a este 2016 que está concluyendo y también las reservas de cara a la temporada alta de verano 2017, una primera conclusión es que hay “olor” a atraso cambiario. 

Es decir que la devaluación que tuvo lugar hace un año, tras el desarme del cepo, estuvo lejos de afectar el ánimo de los turistas, especialmente con una inflación –cercana al 40% anual- que neutralizó gran parte de esa depreciación. 

Según se desprende de los registros del Banco Central, hasta noviembre, la “factura” a pagar por viajes al exterior –concepto que engloba los giros de compañías aéreas y de agencias de turismo, así como los gastos con tarjeta realizados fuera del país- sumó cerca de u$s9.200 millones

La expectativa, según empresarios del sector, es que, una vez sumados los datos correspondientes a diciembre, se vuelva a superar el techo de los u$s10.000 millones, algo que no ocurre desde 2013. 

Para ponerlo en perspectiva, se prevé que la “factura” final supere en casi u$s700 millones el registro de 2015 –cuando el nivel de atraso cambiario estaba al “rojo vivo”- y sea cerca de un 50% más elevada que la de 2014. 

Como muestra de que la cuenta turismo podrá perforar con tranquilidad el techo de los u$s10.000 millones, basta mencionar que en lo que va de diciembre, los saldos por compras con tarjetas de argentinos en el exterior se mantienen en niveles elevados. 

De acuerdo con el registro de la entidad que conduce Federico Sturzenegger, al 13 de diciembre dicho saldo por gastos con plásticos en moneda extranjera sumaba u$s471 millones, un 13% más que el registro del año pasado y muy por encima de los niveles de los períodos anteriores, tal como se observa en el siguiente cuadro: 

Un verano "caliente" 

La salida de divisas prevista por turismo, del orden de los u$s10.000 millones –que equivale a la deuda que necesitará tomar la Argentina en 2017, según el Ministerio de Hacienda- coincide con la fuerte demanda de paquetes y pasajes para viajar al exterior este verano. 

Si bien en el último año una moneda clave como el real brasileño lleva acumulada una apreciación frente al billete verde del orden del 21% -un movimiento que desfavorece a los argentinos que viajan a ese país- la realidad es que, a la hora de decidir cruzar la frontera, la sensación de que el dólar está “barato” siempre ha sido un imán difícil de resistir para los argentinos. 

Esto explica por qué agencias y aerolíneas vienen comercializando tickets y paquetes para enero y febrero como pan caliente. 

Desde las propias líneas aéreas, como LATAM o Aerolíneas, confirmaron que la demanda de pasajes está superando cómodamente los registros de las vacaciones de 2016. 

“Para el verano 2017 prevemos un crecimiento del 15% para lo que es venta internacional”, señalaron a iProfesional fuentes de LATAM. 

Como contrapartida, desde la compañía aseguran que la demanda de tickets para volar a destinos dentro del país viene creciendo a una tasa 10 puntos más baja. 

Paralelamente, desde Aerolíneas Argentinas –que está en pleno conflicto con la federación que nuclea a las agencias de viajes, tras decidir anular una comisión del 1% sobre las ventas-, también confirmaron que la demanda de tickets aéreos para volar al exterior entre enero y febrero –en términos de volúmenes- ya está por encima del registro que tenían a esta misma altura del año pasado. 

“Para el verano prevemos un 7% más de pasajeros que en 2016 para lo que es destinos internacionales”, aseguró a este medio una fuente de la firma, ahora bajo el comando del ex Techint Mario Dell´Acqua. 

En tanto que el nivel de ocupación de las plazas disponibles de Aerolíneas para volar en el verano al exterior ya ronda el 86%, cifra que se ubica unos 5 puntos por encima de la temporada pasada. 

En el caso de Despegar también se observa un fuerte repunte de la demanda de servicios turísticos fuera del país. 

Las reservas de hoteles en el exterior, por ejemplo, hoy representan el 71% del total, 14 puntos arriba del registro del año anterior. 

Como contrapartida, el share de las reservas hoteleras dentro de la Argentina cayó del 43% al 29%. 

La compra de paquetes para vacacionar en destinos internacionales también ganó participación: pasó del 49% al 61% en el total de ventas. 

En cambio, la contratación de paquetes pero para el mercado doméstico bajó al 38%, casi 12 puntos menos que para el verano 2016. 

En lo que respecta a vuelos, el 60% de los pasajes vendidos por la agencia son para viajar fuera del país y un 40% para hacerlo dentro de la Argentina. Para la temporada pasada la relación era del 55%-45%, respectivamente. 

El siguiente cuadro permite observar cómo los destinos internacionales ganaron participación de cara a 2017. 

“La brecha que existe entre el año pasado y este en materia de reservas al exterior se debe a que en los últimos meses de 2015, cuando empezó la compra de productos turísticos para el verano 2016, hubo mayores restricciones por parte del Banco Central”, selañaló a iProfesional Guido Glikin, gerente general de Despegar. 

En cambio, en la actualidad, “el beneficio de pagar con tarjeta de crédito, en muchas cuotas sin interés y en pesos, es una de las razones del crecimiento de los destinos extranjeros para viajar en el verano de 2017”. 

De todos modos, consideró que aún no había comenzado la venta fuerte correspondiente a la segunda quincena de enero y febrero para destinos en la Argentina, demanda que debería volver a activarse tras el cobre del medio aguinaldo y las fiestas. 

¿A dónde van a viajar los turistas? Al trazar una mirada en detalle sobre los destinos internacionales más buscados por los argentinos para la temporada 2017 se observa que, en general, Brasil lidera cómodamente el podio. 

En el caso de Despegar, Río de Janeiro es el destino número uno, tanto para enero como para febrero. 

En segundo lugar, la agencia consigna a Santiago de Chile para el arranque del año, mientras esta ciudad cae dos posiciones en febrero (ver cuadro). 

“Los factores dólar e inflación, más otros relacionados con los regímenes impositivos, explican el crecimiento sostenido de Santiago de Chile, ciudad muy requerida por los argentinos para el verano que se avecina”, afirmó el gerente general de Despegar a este medio. 

“Algunos, de hecho, posicionan a Santiago como la `nueva Miami de América del Sur` dado que, por proximidad y precios, existen turistas que la comenzaron a reemplazar por la ciudad estadounidense”, agregó. 

El top 5 de la agencia se completa con Miami, Orlando y Cancún. 

En el caso de LATAM, el Top 5 (por países) está conformado por Brasil, Estados Unidos, Chile, México (básicamente por Cancún) y Perú. 

En paralelo, el ranking actualizado de Aerolíneas Argentinas para los vuelos internacionales de la temporada 2017 (dividido por ciudades y regiones) tiene a Miami en primer lugar, seguido por Rio de Janeiro, Norte de Brasil, Santiago de Chile y Florianópolis 

Como contrapartida, desde Despegar también mencionan los destinos exóticos que se han convertido en grandes “revelaciones" para este verano. 

En cuanto a pasajes aéreos, las ciudades no tradicionales que han registrado las mayores tasas de crecimiento son: 

1. Bangkok (Tailandia)

2. Sidney (Australia)

3. Nueva Delhi (India)

4. Tokio (Japón)

5. Dubái (Emiratos Árabes Unidos)

Respecto de las reservas hoteleras, las plazas que escapan de lo común y cuyo nivel de demanda ha captado la atención de la agencia, figuran: 

1. Bangkok (Tailandia)

2. Ko Phi Phi (Tailandia)

3. Bayahibe (República Dominicana)

4. Chiang Mai (Tailandia)

5. Tel Aviv (Israel)

"Frío" en la Costa Atlántica

La contracara de esta euforia “internacionalista” está en el clima que se respira en la Costa Atlántica, con ciudades clave como Mar del Plata o Pinamar en las que los empresarios del sector inmobiliario y hotelero hablan de un nivel de ocupación del orden del 60% para el arranque de la temporada. 

Esto, a pesar de que los precios de los alquileres son, en promedio, apenas 25% más elevados que los del verano pasado. Es decir, una tasa de variación 15 puntos más baja que la inflación acumulada. 

Miguel Ángel Donsini, presidente del Colegio de Martilleros de Corredores Públicos afirmó que se están preparando en La Feliz para un verano de “6 o 7 puntos”, similar al del 2016, en el que hubo una demanda moderada, una amplia oferta y una mayor afluencia de turistas sólo durante los fines de semana. 

A contramano de estos pronósticos “tibios” para el mercado doméstico, en el exterior celebran con entusiasmo la inminente “invasión” albiceleste. 

Según la oficina oficial de turismo de Brasil (Embratur), para esta temporada que se avecina prevén más de 1,8 millones de visitantes argentinos, un 25% más que en 2016. 

En paralelo, desde la División de Estudios de la Subsecretaría de Turismo de Chile adelantaron que estiman el desembarco de 1,7 millones de turistas argentinos, 30% más que el verano anterior. 

También en Uruguay están entusiasmados con las perspectivas para enero y febrero: el Centro de Investigaciones Económicas (Cinve) emitió un reporte en el que proyecta un incremento del 28% en el número de argentinos visitando sus playas, casi 20 puntos más que en el caso de los brasileños.

A prueba de devaluaciones: pese a la suba del dólar, los turistas argentinos vuelven a viajar en masa al exterior