El Gobierno eliminó los derechos de exportación para otro sector primario de la economía: las ventas al exterior de productos de la industria petrolera dejarán de tributar el 1% de impuesto que regía desde 2014.

Las exportaciones de este rubro representaron el año pasado apenas el 3% de las ventas totales, con 1.752 millones de dólares hasta noviembre de 2016. La industria petrolera estima que la región más beneficiada será la cuenca San Jorge, en Chubut, donde se extrae un tipo de petróleo más pesado que en un 35% se destina a la exportación.

Si bien oficialmente el Ministerio de Energía no se expidió sobre el fin de la alícuota para las exportaciones, desde el sector petrolero confirmaron que era una promesa que Juan José Aranguren ya les había hecho a fines del año pasado.

El impuesto del 1% que se eliminó era para la venta al exterior de todos los productos del rubro, incluidos el petróleo crudo, el gas de petróleo y carburantes, los tres productos de ese sector que más pesaron el año pasado entre las exportaciones.

Ese porcentaje se implementó con un decreto de 2002 de Roberto Lavagna y se fue renovando cada cinco años, hasta este fin de semana. En tanto, el gravamen se actualizó en 2014, cuando el entonces ministro de Economía Axel Kicillof determinó que las exportaciones que se realicen en un contexto en que el petróleo Brent cotice por debajo de los 71 dólares el barril paguen ese impuesto.

En términos de gasto tributario, el costo no será significativo: hasta noviembre de 2016 la recaudación por este concepto no habría superado los 300 millones de pesos.

En los últimos años las ventas al exterior de productos petroleros bajaron considerablemente, contrariamente al aumento de las importaciones.

La región que más se verá beneficiada del fin de los derechos de exportación será la cuenca del Golfo San Jorge, en Chubut. En promedio, el 35% de la producción, que se destina a la exportación, unos 12 millones de barriles anuales.

El crudo que se extrae de esa cuenca (denominado Escalante) tiene como particularidad que es más pesado que el que se produce, por ejemplo, en Neuquén (Medanito), que es el más demandado en las refinerías locales.

Por lo tanto, todo el petróleo pesado que no puede colocarse en el mercado interno tiene destino de exportación. Incluso algunas compañías como Tecpetrol, de Techint, destinan casi la totalidad de su producción en el Golfo San Jorge al exterior.