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Para el tramo corto, a cinco años había fijado la tasa entre el 5,625% y el 5,75%, en tanto que para el de diez años el máximo era el 7%
19/01/2017 - 17:54hs

Finalmente el Gobierno argentino concretó la colocación de nuevos bonos en el mercado internacional de capitales para hacer frente al cronograma financiero del corriente año.

Si bien hubo una demanda muy alta, en torno a los u$s22.000 millones, el equipo liderado por Toto Caputo decidió tomar u$s7.000 millones

En el desagregado, aceptaron u$s3.250 millones a 5 años de plazo y otros u$s3.750 millones a 10 años

“Estamos muy contentos con el resultado de la emisión, ya que logramos bajar significativamente nuestro costo de financiamiento, aún enfrentando un escenario de tasas mucho más adverso que el año pasado y confirma la confianza de los inversores en la capacidad de este gobierno de controlar la inflación e incentivar el crecimiento económico”, afirmó el ministro de Finanzas.

En cuanto al rendimiento que terminó convalidando Caputo se observa que no pudieron bajar las tasas. Para el título a 5 años quedó en 5,625% (igual que el rango inferior que habían comunicado) mientras que a 10 años pagaron 7% clavado (buscaban 6,875%).

Para el Gobierno, de todas formas, fue una buena colocación ya que reduce el monto que tendrá que emitir en el exterior durante el año y acerca nuevo financiamiento.

En el Plan Financiero de 2017, Caputo estimaba que en el exterior iban a emitir bonos por u$s10.000 millones. Con esta colocación, lo que resta de acá a fin de año son tan sólo u$s3.000 millones. 

Fue de gran ayuda el préstamo con los bancos colocadores de la transacción antes de salir a emitir. El Gobierno se aseguró u$s6.000 millones en forma directa horas antes de tener que pedirle plata al mercado. Con mayor holgura financiera, la pulseada con los inversores resultó un poco más sencilla de lo que podría haber sido. 

En sintonía con las expectativas

Las horas previas a la emisión trajeron buenas noticas al equipo de Caputo. No sólo se llevaron buenas perspectivas de su roadshow por Londres y varias ciudades de Estados Unidos, sino que hubo un foro de inversores donde la Argentina volvió a estar en el eje de discusión.

Fue en el Hotel Intercontinental de Miami donde se llevó a cabo una reunión para debatir sobre las perspectivas de los mercados emergentes.

La entidad anfitriona fue la prestigiosa Emerging Markets Trade Association (EMTA), una asociación que nuclea a la "creme de la creme" del sistema financiero global. 

Allí los banqueros presentes destacaron que "Argentina puede emitir todo lo que quiera" porque hay mucho apetito por sus activos. Pero igualmente aconsejaron a Caputo no tomar más de u$s7.000 millones en este momento.

Ayer también hubo un conference call por la mañana entre Caputo y muchos inversores del exterior. Según relataron a iProfesional participantes de ese charla, curiosamente no se habló de la emisión de los bonos sino de la economía argentina.

Aquellos inversores que van a comprar un bono de la Argentina le importa no sólo a qué precio quiere vender el Gobierno esos papeles, sino cómo está la situación económica del emisor.

En la charla con los potenciales compradores de los títulos Caputo pasó revista por los datos macro más relevantes (todos ellos conocidos públicamente) y si bien no hubo repreguntas por parte de los oyentes del call, quedaron flotando algunas definiciones:

-Reafirmó la meta de déficit fiscal ante los inversores del 4,6% para este año como algo "cumplible".

-Resaltó que le van a dar variadas opciones de inversion a los u$s7.000 millons que se depositaron en la primera etapa del blanqueo local.

-Señaló que este año, tanto el Gobierno como las provincias y quizás las empresas van a emitir menos en los mercados globales que el año pasado.

-Destacó que los u$s14.000 millones de financiamiento que buscarán en 2017 en el mercado local es una suma más fácil de conseguir que los u$s17.000 millones obtenidos el año pasado en el mercado global para pagarle a los holdouts.