Algunos pensaban que el parentesco con Mauricio Macri lo iba a dejar fuera de escena. Nada más alejado de la realidad: en el arranque de este año acaba de quedarse con una de las joyas de la siempre codiciada obra pública.

Ángelo Calcaterra es consciente de que cada uno de sus movimientos despierta suspicacias. Y no es para menos, al ser primo del Presidente y titular de una las constructoras más poderosas de la Argentina.

Sin embargo, él entiende que sus lazos familiares no tienen que ser un obstáculo para su desarrollo empresarial. Tampoco, para dejar de lado su espíritu emprendedor, que le dicta que siempre hay que ir por más.

Así, además de continuar al frente de IECSA (pese a que hace casi un año había asegurado que se iba a desvincular de esta compañía), acaba de ser beneficiado con el tramo más amplio del futuro Paseo del Bajo.

Se trata de  una obra vial que conectará a las autopistas Buenos Aires-La Plata y Arturo Illia, que tendrá una extensión de 7,1 kilómetros.

El proyecto prevé el desarrollo de carriles rápidos y cruces peatonales con el fin de solucionar el problema de tránsito y de romper la barrera existente entre la Ciudad y el río.

Paseo del Bajo requerirá de una inversión cercana a los u$s650 millones, fondos que será aportados por la Nación, la Ciudad de Buenos Aires y la Corporación Andina de Fomento (CAF), esta última mediante el otorgamiento de un préstamo.

La iniciativa fue presentada oficialmente a mediados de enero y comprende tres instancias para las cuales el Ejecutivo porteño diseñó un sistema de licitaciones por separado. 

Calcaterra se quedó con el tramo C, denominado "Trinchera semi-cubierta Norte", que le implicará un desembolso del orden de los $3.200 millones. 

En la compulsa para quedarse con la ejecución, participó un centenar de compañías y la firma IECSA compitió palmo a palmo con la multinacional Isolux. 

Finalmente, la obra será desarrollada bajo la figura de una Unión Transitoria de Empresas (UTE) integrada por la desarrolladora y su par Fontana Nicastro.

"En el sector nunca se puso en duda que Calcaterra seguiría ganando espacio en la obra pública. Para su forma de hacer negocios, es la manera de recuperar terreno tras algunos reveses sufridos el año pasado", aseguró a iProfesional una fuente ligada al empresario. 

"Es muy fácil decir que obtiene beneficios por su parentesco, pero la realidad es otra: las cosas se les hicieron más difíciles en este último tiempo", completó. 

Por lo pronto, su participación en el Paseo del Bajo se suma a una serie de movimientos que este empresario concretó sobre fines de 2016 y que, por otra parte, dejaron en evidencia que está muy lejos de estar pensando en el "retiro".

Su avance no se limitó al sector de la construcción. Por citar un ejemplo, Ángelo y su hermano Fabio fueron autorizados por el Banco Central para cerrar la adquisición del Banco Interfinanzas. 

La operación se llevó a cabo en u$s15 millones y, a la par de certificar la compra, los Calcaterra indicaron a las autoridades del Banco Central que capitalizarán la entidad con el aporte de $300 millones.

Antes, en noviembre, IECSA había logrado renovar créditos que le fueron otorgados por el Banco Provincia, por hasta la suma de $100 millones.

De este modo, mantuvo el beneficio de contar con líneas a tasas subsidiadas que arrastra desde la gestión Gustavo Marangoni al frente de la entidad durante la gestión Scioli.

"No se puededecir nada de estos créditos blandos por el simple hecho de que los obtuvo del kirchnerismo. Endilgarle ahora que hay un favoritismo es simplificar las cosas y tener mala intención", expresó un directivo de la Cámara Argentina de la Construcción (CAMARCO).

"En su momento, Julio De Vido reconoció que Calcaterra fue uno de los tres más beneficiados con las licitaciones que hizo el gobierno anterior",  completó.

Venta en suspensoEn el ámbito de la construcción, hay un punto en el que las principales voces coinciden: Calcaterra está muy lejos de desprenderse de IECSA, pese a los "amagues". 

En mayo del año pasado, fuentes vinculadas con la compañía aseguraron a iProfesional que el plan era conseguir cuanto antes un comprador para así restarle dolores de cabeza a Macri y quitarle entidad a las posibles denuncias por "favoritismo".

Lo cierto es que la venta se mantuvo en stand-by. "En su momento, aparecieron una serie de empresas, alrededor de seis, con interés en quedarse con IECSA", indicó la fuente cercana a CAMARCO.

"Algunas eran de origen chino y otras europeas. Pero, en cuanto vieron cómo venía la economía argentina, empezó a decaer ese interés", completó.

Además, destacó el ejecutivo de una importante compañía que "cualquier firma que adquiera IECSA -por más que lo haga con toda la pulcritud del caso- correrá con el alto riesgo de ser vista como una pantalla". 

"Es decir que, de manera fundada o infundada, queden señaladas ante los medios como empresas pantalla de un Calcaterra operando entre las sombras", añadió. 

Por lo pronto, dos grandes interesadas en adquirir IECSA han sido:

1. China Communications Construction Company, socia de Calcaterra para desarrollos en Córdoba.

2. Sinohydro, otra firma del gigante asiático que -asociada con este empresario- se presentó para la construcción de las represas Néstor Kirchner y Jorge Cepernic en Santa Cruz.

"IECSA les parecía interesante para ejecutar las represas, dada la envergadura de estos proyectos. Pero, al ver que no hubo avances y no se pasó de la etapa del anuncio, los chinos congelaron su plan", completó la fuente que, dada la sensibilidad del tema, pidió no ser mencionada. 

La compañía factura $400 millones anuales y está bajo control de Grupo ODS, propiedad de Calcaterra. 

Hasta 2007, operaba bajo el ala del Grupo SOCMA, comandado por Franco Macri. Luego quedó en manos del primo del Presidente.

En ese entonces, el traspaso se habría llevado a cabo para no complicarle la carrera política a Mauricio, quien recién hacía pie en el Ejecutivo porteño.

Además de IECSA, Franco Macri le vendió la constructora Creaurban y otros activos, operaciones que se terminaron de cancelar recién el año pasado.

Por lo pronto, Calcaterra es dueño de:

• Fidus SGR.

• Compañía Americana de Transmisión Eléctrica. 

• Cincovial. 

• La minera Geometales.

Ángelo tiene en Fabio, su hermano, a su mano derecha. Ambos son hijos de María Pía, la hermana menor de Franco Macri. 

También encabezan una empresa que lleva su apellido y que opera de modo similar a IECSA.

Según indicó Gabriela Cerruti, dirigente de Nuevo Encuentro, "Calcaterra SA fue la encargada de realizar la restauración, pintura e iluminación de la fachada de la Casa Rosada". 

"También recibió las obras de ampliación de la ruta nacional N°14" y, junto con la española Isolux, se adjudicó dos centrales térmicas de generación eléctrica, una en Ensenada y otra en la localidad santafesina de Sauce Viejo", añadió.

La sociedad entre IECSA e Isolux dejó en evidencia el vínculo que Calcaterra mantuvo con el gobierno anterior. Incluso, ambas empresas fueron mencionadas para llevar a cabo la construcción del tren bala, proyecto que murió antes de nacer.

Revés y complicacionesNo todas fueron rosas para el primo del Presidente, pese a su permanente protagonismo en la obra pública. A lo largo del año pasado, perdió varias batallas.

Por citar un caso, en diciembre Enarsa decidió quitarle un proyecto de recuperación de dos centrales eléctricas, medida que también afectó a Isolux. 

Fue el mismo Juan José Aranguren, ministro de Energía, quien alentó el fin del vínculo comercial.

Según trascendió, a principios de 2016 Calcaterra reclamó una "redeterminación de costos" a raíz de la mayor inflación y de los cambios en la cotización del dólar. 

Exigió alrededor de $9.000 millones para continuar con las obras. Como respuesta, el Gobierno rompió el acuerdo y abonó $520 millones a modo de indemnización. Producto de estos diferendos, el modo en que se culminarán estas centrales todavía está por definirse.

Por otro lado, nunca se dio inicio concreto al soterramiento del tren Sarmiento, más allá de los anuncios concretados por Mauricio Macri. 

El Gobierno quedó en aportar $45.000 millones para un desarrollo que también correrá por cuenta de IECSA pero, hasta el momento, no ha redundado en el movimiento de una sola bolsa de cemento.

El comienzo de 2017 también vino complicado: el empresario fue denunciado ante la Justicia por su presunto vínculo con las coimas que la constructora brasileña Odebrecht habría percibido en la Argentina. 

La presentación fue concretada ante la Procuraduría de Investigaciones Administrativas y todo hace prever un largo cruce de recursos judiciales y versiones contrapuestas. 

Pese a estas complicaciones, queda claro que el primo del Presidente lejos está de desaparecer de la actividad y de tomarse un par de años sabáticos.

El desembarco en el proyecto del Paseo del Bajo lo muestra entero y competitivo para, tal como ocurrió durante la "década ganada", marcar el ritmo de buena parte de la obra pública en la Argentina.