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Hoy existen distintas herramientas que permiten medir si el "user engagement" está mejorando, y analizar la reacción de un usuario a una aplicación
06/02/2017 - 15:54hs

No importa en el uso que le queramos dar, si es con motivos laborales o de ocio, pero al momento de buscar y descargar una aplicación en la tienda online de nuestro celular, siempre priorizamos aquellas valoradas con 5 estrellas.

A pesar de la enorme complejidad en la creación de aplicaciones y soluciones tecnológicas de hoy en día, siempre buscamos la mejor experiencia posible, y, cada vez más, los problemas que surgen dejan de presentar sólo cuestiones de TI, a ser factores para la fidelización de los consumidores.

Incluso, de acuerdo a un estudio global realizado por CA Technologies en 2015, los usuarios están dispuestos a abandonar una aplicación en tan solo 6 segundos si esta no cumple con sus expectativas.  

En la actualidad, la creciente competencia e innovación tecnológica, de la mano de los cambios económicos, generan que las empresas deban volverse cada vez más ágiles y precisen reaccionar y adaptarse automáticamente a la dinámica cambiante del mercado.

La economía de las aplicaciones ha cambiado el rol de la tecnología en los negocios: para competir hoy, cada empresa tiene que ser una empresa de software, y promover la innovación que ofrece resultados reales de negocio y equilibrar las nuevas ideas con las demandas de los consumidores. 

En este sentido, el diseño de la experiencia del usuario se convierte en la principal premisa al momento de desarrollar aplicaciones y soluciones, teniendo en cuenta conceptos como las expectativas del consumidor y el uso que éste le va a dar, la simplicidad, practicidad y funcionalidad, entre otras cosas.  

Esto es fundamental, ya que será la buena experiencia la que hará que el usuario elija la aplicación o dispositivo sobre otros y lo identifique con la compañía.

Si por el contrario la experiencia de usuario no es positiva, se reducirán la productividad y la eficiencia de las aplicaciones, pueden surgir riesgos de seguridad para las organizaciones y se compromete la satisfacción de los consumidores.

Por este motivo, un concepto interesante para tener en cuenta es el de “User Journey”, y cómo la adopción de indicadores de la experiencia de usuario y las tecnologías de la información pueden brindar métricas para que las organizaciones tomen mejores decisiones de negocio, aceleren la velocidad de salida al mercado de las soluciones y aprovechen nuevas oportunidades de mercado. 

Hoy existen distintas herramientas y soluciones que permiten medir si el user engagement está mejorando o no, la reacción de un usuario a una app, cómo interactúan (cuánto tiempo se queda en cada página, si hace clic en un botón o no, etc.), generando datos e insights que hacen posible que las empresas conozcan más de cerca el comportamiento de los usuarios y así mejorar la experiencia digital.

Por otro lado, también generan datos que anticipan problemas, permitiendo a las compañías solucionarlos antes de comprometer la performance de una aplicación y gestionar de forma proactiva la experiencia del usuario y sus aplicaciones, haciendo que cada una de esas interacciones se conviertan en una oportunidad de fidelización de clientes, fundamental para la supervivencia de las empresas dentro de la Economía de las Aplicaciones, la tendencia mundial de negocios.

En conclusión, la era de la transformación digital ya está entre nosotros, e irá tomando cada vez más relevancia.

Con la preparación adecuada, estamos seguros que todas las organizaciones podrán sacar el mejor provecho de todo lo que tecnología tiene para aportar, poniendo siempre al usuario en el centro de la escena: en definitiva, son ellos los que adoptan la tecnología.