La Asociación Bancaria (AB) lanzará un paro nacional de 24 horas este viernes, si el Gobierno continúa con su negativa a homologar el 24% de aumento salarial acordado en paritarias.

La fecha de la medida fue definida este mediodía por el plenario de secretarios generales de todo el país, que encabeza el titular del gremio Sergio Palazzo. Así lo confirmó el dirigente bancario a través de las redes sociales.

"Prefiero pecar de excesos en la pelea y no quedarme corto y que nos pase lo que pasó en los 90", dijo Palazzo a través de su cuenta de Twitter.

La entidad gremial insiste con que la Casa Rosada se rehúsa aprobar el convenio sectorial porque que el acuerdo "no respeta la pauta" de incremento de sueldos "establecida por el Gobierno, de 18%", al tiempo que recordó que "las paritarias son libres".

"Yo apelo a la razonabilidad del ministro (de Trabajo, Jorge Triaca) y las (otras) autoridades del Gobierno para que no lleguemos a esto. Pero, lamentablemente, no nos dejan otro camino", dijo Palazzo más temprano.

El gremialista recordó que el convenio sectorial -rubricado en noviembre último y al que no adscribieron las instituciones extranjeras agrupadas en la Asociación de Bancos de la Argentina (ABA)- contempla "una serie de beneficios para los trabajadores bancarios que, cuando empieza el 2017, no se cumple".

"Es un incremento salarial que es del 23,5%, porque tenía un 4% de componente vinculado a la inflación del año pasado, más un 19,5%", rememoró en diálogo con radio Continental.

Palazzo, luego, recordó que "firmó el sector empresario a excepción de la cámara ABA", pero sostuvo que "los bancos internacionales representan nada más que al 20% de los trabajadores y del negocio del sistema financiero".

"Nosotros recurrimos a la Justicia y nos dio la razón. Ahora, resulta que (las autoridades nacionales) se presentaron y apelaron para que no se pague. Espero que recapaciten", finalizó el líder sindical.

Los trabajadores bancarios agrupados en la AB, con el mismo reclamo, realizaron el jueves y viernes últimos más de 1.000 asambleas en todo el país, que paralizaron la atención al público desde las 12.

Durante las asambleas se suspendieron las actividades, aunque las deliberaciones "no constituyeron un paro", explicó el vocero del gremio, Eduardo Berrozpe.

"Trabajo interfirió en el cumplimiento de los acuerdos firmados el 23 de noviembre", dijo en declaraciones radiales.

Ese preacuerdo salarial implicó un adelanto a cuenta del 10% del salario de cada trabajador y una suma fija de $2.000 para enero, febrero, marzo y abril.

"Resulta inconcebible que funcionarios que redactaron y firmaron el convenio con el sindicato y los empresarios hayan borrado ahora con el codo lo que se avinieron a rubricar de forma oportuna y provoquen semejante y burdo conflicto", concluyó Berrozpe.