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Claros sí­ntomas de atraso cambiario en el mercado automotor: vuelven con gloria los SUV de lujo importados
03/03/2017 - 17:07hs

La cotización del dólar se ha transformado en un asunto que divide las aguas. 

Los industriales y exportadores, que vienen sufriendo una importante suba de sus costos, se quejan del continuo deterioro de la competitividad cambiaria

Millones de argentinos, en tanto, encontraron en el billete verde barato una razón más que suficiente para veranear en el exterior o hacerse una escapada de pocos días a Chile para traerse ropa y tecnología

Para el Gobierno, en tanto, no existe ese problema llamado "atraso cambiario". De hecho, ante este reclamo que llega desde el sector empresario, el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, afirma que la economía puede funcionar sin problemas con un dólar incluso por debajo de los $16.  

En medio de este cruce de intereses, hay una realidad: actualmente la divisa estadounidense cuesta menos que a comienzos de marzo de 2016. En el medio, tuvo lugar una inflación de dos dígitos que barrió con gran parte del colchón de competitividad que se había logrado tras la devaluación de fines de 2015. 

Pero también, es una de las variables que posibilita que hoy el mercado automotor esté experimentando un boom de ventas en los segmentos de alta gama. 

Según datos de la Asociación de Concesionarios (ACARA), durante el primer bimestre, las marcas premium registraron un salto en sus niveles de patentamientos: tal es el caso de empresas como Volvo (780%), BMW (625%), Porsche (550%), Hyundai (463%), Mini (365%) y Audi (111%), por citar algunas. 

En este contexto, si hay una categoría que hoy está atravesando un importante resurgimiento, es la de los Sport Utility Vehicle (SUV) de alta gama.

Estos vehículos -popularmente llamados 4x4 a partir de la década del `90, más allá de si tenían o no tracción en las cuatro ruedas- venían de un largo período de ostracismo

Afectados por el impuesto interno que introdujo el kirchnerismo en 2014 para desalentar la venta de los vehículos de lujo, los SUV medianos y grandes fueron los primeros en sufrir la crisis.

Con precios que de un día para el otro aumentaron hasta 100%, y con cupos cada vez más limitados para importar, las diferentes marcas optaron por dejarlos "fuera de juego", a fin de aprovechar los cuotas de mercado para traer un mayor volumen de vehículos económicos. 

Mientras que los SUV pequeños "zafaron" de ese gravamen, tales como Ford Ecosport, Chevrolet Tracker o Renault Duster, las versiones más grandes y equipadas sintieron de tal forma el impacto que prácticamente estuvieron discontinuadas en el mercado lo largo de dos años. 

En esos momentos, modelos como Renault Koleos, Volkswagen Touareg y Tiguan o el entonces recién lanzado Citröen Aircross desaparecieron de los salones de venta. Algunos de ellos sólo se importaban a pedido del cliente. Pero pocos estaban dispuestos a pagar semejantes sobreprecios. 

Sin embargo, la realidad cambió completamente: en el mercado coinciden que el segmento de los SUV de alta gama está de regreso. Y es un regreso con gloria. 

De la mano de la liberación de las importaciones y de los cambios introducidos al controvertido impuesto a los 0Km, estos vehículos están teniendo su ansiada revancha.

Sin embargo, para los empresarios del sector, dicha revancha no hubiese sido posible sin el "condimento extra" que sólo puede aportar un dólar que, además de estar aletargado, hoy cuesta menos que hace un año. 

Las evolución en las ventas es una prueba del nuevo escenario: en 2016, los SUV grandes fueron los que lideraron la recuperación. El crecimiento en patentamientos que experimentaron estos vehículos superó el 150%. 

Y para este primer bimestre los números siguen siendo muy positivos: la categoría sube a un ritmo que casi duplica el promedio de la industria. 

Dólar quieto, el gran anzuelo

Los dueños de concesionarios y directivos de marcas importadas coinciden en su diagnóstico: el contexto de dólar planchado, tasas de interés de plazos fijos que resultan negativas en términos reales y un índice inflacionario que, con suerte, será del 20%, genera que comprar un vehículo con financiación "barata" resulte más que tentador. 

Más si se trata de vehículos premium que cotizan en divisas y que, durante más de dos años, tuvieron una demanda insatisfecha por problemas de oferta. 

“La gente hoy entiende que adquirir un 0Km es una oportunidad por tiempo limitado”, afirmó Alberto Príncipe, presidente de la Cámara del Comercio Automotor (CCA). 

Para poner de manifiesto cómo se han ido reacomodando los precios y cómo se abarataron los SUV importados -en términos de salarios-, se puede considerar el caso del modelo Toyota RAV 4 en su versión 2.0 con tracción 4x2, que desde hace un año cotiza a u$s49.800: 

-En marzo de 2016 esto representaba unos $797.000. 

-En la actualidad, equivale a $780.000. 

La baja, en términos nominales parece leve: -2%. Sin embargo, hay que considerar que en esos doce meses las remuneraciones se ajustaron, en promedio, un 30%. 

La ecuación actual se vuelve mucho más atractiva si el comparativo se realiza contra diciembre de 2015, cuando todavía estaba vigente el impuestazo "versión K": en esos momentos, el dólar cotizaba en el orden de los $13,15, en tanto que el mismo SUV valía unos u$s72.000, lo que implicaba unos $947.000. 

Comparados con los $780.000 que cuesta hoy día, esto significa una baja nominal del 17% en pesos. Claro que hay que tener en cuenta que en estos últimos 14 meses hubo una inflación acumulada del 45%. De modo que, en términos reales, el abaratamiento fue mucho más significativo

Una oferta cada vez más amplia Hyundai fue la primera marca en reaccionar con el lanzamiento en 2016 de la estrategia SUV4ALL. Fue el regreso al mercado de toda la gama de SUV de la compañía. 

Así, en abril del año pasado, la marca presentó las renovadas Tucson, Santa Fe y Grand Santa Fe, incorporando además la nueva entrada de gama que es la Creta.

Con esta estrategia, Hyundai no solo logró posicionarse rápidamente en el segmento sino que además convirtió a la Tucson en la más vendida de su segmento, un logro que se apoya en un gran diseño y equipamiento. 

La Grand Santa Fe se vende con motor 2.2 turbodiesel con 200 cv y caja automática de seis velocidades, con tres filas de asientos con capacidad para siete pasajeros.

La Santa Fe pertenece a la tercera generación de este modelo, y está disponible con dos tipos de motorización: una naftera 2.4 litros de 176 cv y una turbodiesel de 2.2 litros y 197 cv. La naftera se puede combinar con caja manual de seis velocidades, automática de seis marchas.

La Tucson también pertenece a la tercera generación, a la venta con dos motorizaciones 2.0 naftera de 155 cv o 2.0 turbodiesel de 185 cv. Se pueden combinar con caja manual o automática.

"Todos los productos que tenemos a la venta en la Argentina se lanzaron hace menos de dos años a nivel mundial. Es decir que poseemos un abanico de opciones completamente actualizado y esto explica, en gran medida, por qué estamos creciendo tasas tan altas", sostuvo a iProfesional Santiago Rodríguez, responsable de Ventas de HyundaiFord también reaccionó y apenas volvió la confianza (traducida en más ventas) relanzó la Kuga con más versiones.

Se trata del restyling de la segunda generación, equipada con motor 2.0 Ecoboost de 240 cv. La novedad de este lanzamiento fue que a la versión 4x4 que estaba en el mercado se sumó una 4x2, con caja automática secuencial, de seis velocidades, en todas las versiones.

Los cambios de este modelo se aprecian en la nueva trompa, tanto por la parrilla como por las ópticas y el paragolpes delantero. Por dentro, suma el sistema multimedia Sync3 con pantalla táctil de ocho pulgadas y Mirror Screen.

Los precios van desde $742.600 hasta 922.100 pesos.

Otra de las que regresó fue la Honda CRV. Es la cuarta generación, equipada con el motor naftero 2.4 i-Vtec con 175 cv.

Una novedad es que la caja automática de cinco velocidades fue reemplazada por una nueva CVT. Además, volvió la tracción 4x4 que se había discontinuado, dejando como única opción en el mercado la 4x2.

De esta manera, no solo que sumó una alternativa en cuanto a tracción sino que también incorporó más equipamiento. Los precios van desde $670.000 a 970.000 pesos.

En paralelo, Nissan Murano fue la incorporación más reciente al mercado. Se lanzó en la última semana de febrero, después de ser exhibida en Cariló durante el verano.

Para la marca, el regreso de Murano es un puntapié muy importante para un año clave en la marca, ya que afianza cada vez más su proyecto de fabricación en el país, en la planta de Córdoba, donde se producirá la NP300 Frontier.

Hasta que llegue ese momento, la marca volverá a introducir al país modelos icónicos, como fue el SUV, y sumará un nuevo producto también para la misma categoría pero de los más chicos, como es el nuevo Kicks, que se presentará en el Salón del Automóvil de Buenos Aires.

En cuanto a Murano, se ofrece en una sola versión tope de gama llamada Exclusive. Es la tercera generación, equipada con un motor naftero V6 3.5, con 260 cv, con caja automática CVT y tracción a las cuatro ruedas con sistema de acople automático.

El modelo es el más equipado, con llantas de 20 pulgadas, tapizado en cuero, techo panorámico, terminaciones en aluminio y portón trasero de apertura automática. El precio de este modelo es de 1.480.000 pesos.

Las que vienen

A la oferta que se sumó hasta ahora se unirán en los próximos meses la nueva Volkswagen Tiguan, que volverá al país con un nuevo diseño "agrandado", ya que vendrá de serie para siete personas.

Será uno de los lanzamientos más esperados de la marca porque se trata de un modelo totalmente nuevo.

Otra de las que volverá es la Renault Koleos. Discontinuada durante los años en los que le impuesto interno golpeó duramente al segmento, su regreso será con un producto totalmente renovado.

La marca tiene, además, otras novedades importantes para la categoría, ya que hace poco sumó el nuevo Captur y en poco tiempo más lo hará con el nuevo Kwid para el segmento chico.

Otra que volverá con más fuerza será Peugeot, con el renovado 3008. Este modelo que se vende en la Argentina dentro del segmento monovolumen, llegará a fin de año en su nueva generación, donde se dio un cambio radical a la imagen.

Desde ahora, el objetivo de la marca es meterse de lleno en la categoría todo terreno y lo hará con el modelo renovado.

También se sumará uno producto muy esperado: el Jeep Compass de nueva generación que ya fue presentado en Brasil.

Con la marca como garantía de su desarrollo, ya que es una de las pioneras en vehículos todoterreno, su nuevo diseño y el menor impacto del impuesto interno, promete ganar terreno en la Argentina (además el Renegade que se lanzó el año pasado amplió más la gama de consumidores Jeep).

Dentro el segmento premium también habrá novedades importantes, como el regreso de los renovados Discovery 5, Evoque Convertible y Range Rover.

ProyeccionesLa llegada de estos modelos se da en un contexto de mejora en las expectativas de las automotrices, que esperan incrementar las ventas entre 5 y 7% en 2017.

Además, tras los resultados en ventas del primer bimestre, ya hay especialistas que pronostican que se superarán las 800.000 unidades.

Junto con las pick ups, los SUV son los grandes aspiracionales que tiene hoy el mercado, segmentos que están ganando clientes y despiertan la posibilidad de sumar subsegmentos.

Además de los medianos y grandes, los chicos son otros de los protagonistas de la recuperación, a los cuales este año se sumarán los renovados Chevrolet Tracker, Ford Ecosport y los nuevos Nissan Kicks y Renault Kwid, entre otros.

De esta manera, la ampliación de la oferta y un dólar que por ahora luce estable, están pavimentando el camino para que los SUV de alta gama concreten su regreso con gloria. 

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