iProfesionaliProfesional

Alicia Kirchner, nuevamente atrincherada en Santa Cruz: una protesta de maestros y padres bloqueó el ingreso a la Casa de Gobierno

Alicia Kirchner, otra vez atrincherada en Santa Cruz: una protesta bloqueó el ingreso a la Casa de Gobierno
08/05/2017 - 21:14hs
 Alicia Kirchner, nuevamente atrincherada en Santa Cruz: una protesta de maestros y padres bloqueó el ingreso a la Casa de Gobierno

La crisis económica de Santa Cruz sigue dando coletazos políticos. Un grupo de maestros, padres y jubilados bloqueaba este lunes los accesos a la Gobernación de Santa Cruz, en reclamo del pago de salarios y el inicio de clases en la provincia. Así, la mandataria volvió a quedar atrincherada.

En el interior de la sede gubernamental estaban la gobernadora Alicia Kirchner y el vicegobernador Pablo González junto al diputado nacional Mauricio Gómez Bull y las senadoras nacionales Virginia García y María Ester Labado del Frente para la Victoria.

Los manifestantes se ubicaron en los accesos por las calles Alcorta y Comodoro Rivadavia y frente al ingreso a la Jefatura de Policía de Santa Cruz. 

En el interior se encontraban cuatro madres integrantes de Padres Unidos que exigen una resolución al conflicto docente por el que este lunes se cumplen 37 días de paro.

Allí esperaban ser recibidas por la gobernadora Kirchner, quien se reunió con legisladores nacionales del oficialismo y la oposición para analizar la crítica situación financiera de la provincia.

Los gremios de docentes ADOSAC y AMET iniciaron este lunes una nueva huelga de 120 horas, mientras los estatales de ATE hicieron lo mismo pero por 72 horas, en tanto los profesionales de la salud nucleados en APROSA paraban por tiempo indeterminado.

Las medidas de fuerza, con distintos matices, se llevan a cabo en reclamo del pago en tiempo y forma de los salarios y la reapertura de la paritaria salarial. 

La provincia va a alcanzar, así, los 41 días de huelga desde el inicio del ciclo lectivo.

Los maestros reclaman el pago del 27% de los salarios de marzo que aún no abonó el gobierno de Alicia Kichner. Y esta semana se sumará el pedido de pago en tiempo y forma de los haberes de abril.

Déjà vu

La gobernadora ya se vio obligada semanas atrás a permanecer dentro de la Casa de Gobierno hasta la madrugada por otra manifestación de estatales y poco después, cuando estaba acompañada por la ex presidenta Cristina Fernández, fue atacada la residencia oficial en la que ambas se encontraban.

Aquel crítico episodio  –que culminó con la policía reprimiendo a los manifestantes que atacaron la residencia oficial-, ocurrió a mediados de abril cuando una protesta de trabajadores frente a la sede de la Gobernación le impidió la salida a la mandataria, que se encontraba reunida con la ex presidente.

Tanto el kirchnerismo como el Gobierno se mostraron alarmados por la escalada de violencia que llegó a poner en riesgo la integridad de la exmandataria y la gobernadora, tres empleadas de la gobernación y la pequeña nieta de CFK.

Sorpresivamente, también hay consenso respecto de cómo se llegó a esta situación: el colapso financiero provocado por la superpoblada plantilla de dependientes estatales, que llega a niveles récord.

Concretamente, casi 90.000 empleados en una provincia que apenas supera los 300.000 habitantes. Para colmo, Santa Cruz tiene una dependencia excesiva de la industria petrolera, ahora en declive por la caída de los precios internacionales.

Este consenso, no obstante, no evitó los roces públicos entre la mandataria provincial con funcionarios de la Casa Rosada. Ocurre que Kirchner adjudica parte de la crisis al gobierno nacional al que acusa de “asfixiarla económicamente”.

Acaso, la ironía mayor sea la reaparición del concepto "pesada herencia". La propia Cristina -que rechaza este término cuando es utilizado por los macristas para referirse a la situación en la que encontraron la economía nacional-, ahora lo enarboló para describir el escenario provincial K que debió atender su cuñada.

Puntualmente, los cruces de Alicia Kirchner fueron con el ministro del Interior y Obras Públicas, Rogelio Frigerio, y con el jefe de Gabinete, Marcos Peña.

"Nos preocupa Santa Cruz y por eso expresamos nuestra solidaridad con los ciudadanos. Hay un gobierno quebrado que ha gobernado los últimos 25 años y que no se hace cargo de la situación. Por el contrario, echan culpas y se victimizan", planteó el jefe de ministros.

Por su parte, Frigerio afirmó: “Así como dijimos que nos encontramos un Estado desmantelado, quebrado a nivel nacional, también ocurrió lo mismo en Santa Cruz".

El funcionario agregó que "es una provincia que ha sido gobernada prácticamente desde el retorno de la democracia por los mismos, hasta por la misma familia diría yo", y dijo que le llama la atención que ahora "tienen problemas muy serios los santacruceños".

Frigerio señaló que el dinero que viene enviando la Nación a la gobernación "es para los santacruceños, para que puedan cobrar el sueldo, el aguinaldo" y rechazó las acusaciones de la gobernadora.

También aseguró que "los gobernantes de Santa Cruz tienen que hacer lo que corresponde".

Remarcó que "lo que hay que hacer en Santa Cruz es ir ordenando gradualmente el desequilibrio fiscal que tienen y también trabajar en el fortalecimiento de sus instituciones, como corresponde, como exige la ciudadanía a nosotros y a ellos también".

Fue entonces que sostuvo que "el Estado nacional va a estar presente dándoles ayuda como lo venimos haciendo desde el primer día de nuestra gestión, pero ellos se tienen que dejar ayudar también".