El Estado nacional podría recaudar unos u$s200 millones por la asignación a demanda del espectro de 2,5 Ghz que está actualmente en oferta y cuyas propuestas se conocerán a mitad de la próxima semana. La cifra surge del precio del megahertz que el Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom) fijó cuando aprobó la reatribución de espectro para Cablevisión.

Cuando el regulador dio luz verde a la compañía surgida del Grupo Clarín para ingresar a la telefonía 4G debió dar una serie de pasos previos. En primer lugar, dar lugar a la posibilidad de reatribuir bandas de espectro asignada a otros servicios, distintos, a los que se brindan en la actualidad, para todo el mercado. Es lo que se conoce como refarming.

Luego, avanzó con la reasignación de las frecuencias que obtuvo Cablevisión a través de la compra de cinco empresas. Y determinó que las de 2,5 Ghz (cuya atribución era para servicios de internet fijos) servirían para dar servicios móviles.

De ese modo, habilitó a la compañía a ingresar en ese negocio puesto que la compra de Nextel no había sido suficiente para poder avanzar en 4G ya que la empresa desaparecida no había logrado -por descalificación primero, y por desinterés después- alcanzar ese objetivo.

Todo ese proceso obligó al Enacom a establecer valores de referencia del precio del megahertz en 2,5 Ghz y en 900 mhz (las dos bandas a las que accedió Cablevisión cuando compró Skyonline, Netizen, Infotel, Callbi y Trixco).

De acuerdo a lo establecido en la resolución 1299/2017 de refarming a favor de Nextel/Cablevisión, el valor del mhz en 2,5 Ghz se fijó en u$s0,0423 por megahertz por habitante.

A raíz de ese proceso, el regulador le impuso a Cablevisión la obligación de devolver parte del espectro adquirido en el mercado secundario, es decir, el obtenido a partir de la adquisición de las cinco empresas mencionadas.

La empresa del multimedios -que ya opera como compañía independiente- se quedará con 60 mhz de 2,5 Ghz en su poder y en un plazo de 30 días deberá devolver al Estado 80 mhz. Estos son los que, desde hace dos semanas están disponibles para que Claro, Movistar y Personal, hagan sus solicitudes de espectro bajo la figura de asignación a demanda. Tienen tiempo hasta el martes 30 para hacerlas llegar al regulador.

El Ministerio de Comunicaciones decidió, a través del regulador, que el espectro que esté en su poder se pondrá a disposición del mercado para que mejoren sus servicios. Como ninguna de las tres operadoras móviles tiene banda en 2,5 Ghz, tomó la solicitud de refarming de Clarín y, como parte de las negociaciones, estableció la devolución.

En ese mismo marco, se prevé que las operadoras móviles habilitadas para este proceso recibirán unos 26 mhz cada una. En base a esa cantidad de frecuencia disponible, a que la asignación será a nivel nacional y al precio establecido por mhz cuando se aprobó el refarming de Clarín surge el monto que podría percibir el Estado por el proceso.

El cálculo, sin embargo, no es lineal. Hay aspectos puramente técnicos que hacen que algunas partes de la banda de 2,5 Ghz cuesten más que otras, sea porque se utilicen para dar servicios fijos o móviles, más allá de que esta frecuencia finalmente se utilice para dar 4G.

Por eso, lo que en un primer lugar podría dar como cifra una recaudación de unos u$s150 millones sube en algo más de 30% por estas cuestiones técnicas.

Para algunos expertos del mercado consultados por iProfesional que pidieron mantener sus nombres en reserva, el valor del mhz en 2,5 Ghz es muy barato. Y señalan que ese precio se estableció en el marco de la negociación que se llevó adelante con Cablevisión.

Desde el lado de Cablevisión la postura es absolutamente diferente. El cálculo que se hace en la compañía sobre el valor del mhz en la frecuencia de 2,5 Ghz es mucho más alto que los u$s0,0423 establecidos en la resolución 1299, y lo fijan en u$s0,25 el mhz. Para llegar a ese valor, en la compañía de TV paga e internet también estiman el costo que les significa devolver al Estado 80 mhz en esa frecuencia.

Si se tomara como punto de referencia la cifra calculada por la empresa los valores a proponer por las compañías móviles para acceder a esa frecuencia serían muy distintos. Hasta ahora no pareciera que las propuestas vayan a ir en esa dirección.

Al ser consultadas sobre su eventual participación en la asignación a demanda, las tres compañías coincidieron en no hacer comentarios. Si bien se descuenta que lo harán porque el espectro es básico para la prestación de servicios, no se arriesgan a aventurar ningún tipo de escenario.

Antecedes de precios

Los valores pagados por la banda de 2,5 Ghz en otros países varía según se trate de mercados más o menos desarrollados. Por ejemplo, en Colombia, en 2019 se pagaron u$s0,019 por mhz, y el resultado total alcanzó los u$s145 millones por 100 mhz.

En tanto, en Venezuela se abonaron u$s240 millones por 80 mhz puestos en el mercado, según datos de la GSMA. En Brasil se pagaron u$s1.396 millones por 120 mhz en 2,5 Ghz. La diferencia entre uno y otro mercado se debe, en principio, por la cantidad de habitantes que hay en uno y otro país. Y en toda fórmula de cálculo de valor de este insumo entra en juego la población. De eso depende lo atractivo del negocio, y la necesidad de contar con el insumo básico para dar un buen servicio.