Cristina Kirchner será candidata en las elecciones legislativas de este año. "Esta confirmado", dijo el martes el intendente de Avellaneda y hombre cercano a la expresidenta, Jorge Ferraresi, tras una reunión que mantuvo con Máximo Kirchner en el Instituto Patria.

Y la reacción del oficialismo no tardó en llegar. Casi festejándolo, el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta,  sentenció: "Es la que más representa la vuelta al pasado".

Luego minimizó el impacto. "La mayoría de la gente, sea quien sea el candidato de ellos, va a votar por continuar con el cambio, no quiere volver para atrás", expresó.

"Aquellos que vayan para esa opción están volviendo para atrás", insistió este miércoles en Radio La Red.

La estrategia de Cambiemos para ganar llas legislativas es clara: polarizar con el kirchnerismo y esperar que el peronismo vaya dividido.

Así es que la candidatura de CFK resulta totalmente funcional a la estrategia del oficialismo.

Es que la figura de Cristina es tan dominante que termina opacando los demás intentos dentro del peronismo por instalar una oposición capaz de sacarse de encima el lastre de la "pesada herencia" del modelo K.

El plan de Sergio Massa, ex jefe de Gabinete de CFK, es desligarse de su pasado aliándose con la líder del GEN, Margarita Stolbizer. 

"Cristina a nosotros no nos modifica nuestra estrategia electoral de ninguna manera", aseguró la diputada. "Sí creo que modifica el clima electoral, el proceso electoral, porque va a meter tensión, crispación, violencia en medio de la elección", señaló y remarcó: "Por supuesto eso favorece a Macri".

"Me parece que hay que trabajar para no volver al pasado", dijo Stolbizer en Infobae sumándose a las declaraciones de Larreta.

Lo cierto es que hoy la interna en el peronismo está al rojo vivo. Fuentes cercanas a Florencio Randazzo, avisaron que el exministro de Transporte peleará en las primaras contra cualquier candidato, sea quien sea.

Pero en el kirchnerismo ya analizan alternativas para cerrarle el camino y obligarlo a presentarse por fuera del PJ o acompañando a Cristina pero como primero en la lista de diputados.

El jefe de campaña de Randazzo, Alberto Fernández ratificó una vez más la voluntad del exfuncionario kirchnerista de competir en primarias del peronismo bonaerense y pidió "oír lo que dice el votante".

"No somos un grupo de necios. Tenemos que oír lo que dice el votante", señaló y le recordó a los K puros: "Con Cristina (Kirchner) decidiendo van dos elecciones perdidas ¿Qué les hace pensar que haciendo lo mismo se obtendrán diferentes resultados?".

En declaraciones a Radio Cultura, Fernández sostuvo que "unidad existe; lo que no hay es lista única".

"No importa con qué sello vamos, si se llamará Frente para la Victoria o Frente Ciudadano. Esa no es la discusión. La discusión es el cómo" se despliega la estrategia electoral, señaló.

También sostuvo que "a Randazzo no le preocupan los cargos" y agregó: "Si fuera por el cargo, sería gobernador de Buenos Aires; no es eso lo que estamos discutiendo".

"No podemos pedir el voto a la ciudadanía sin haber revisado qué se hizo mal" en el justicialismo, consideró Fernández, quien consideró que "algo malo debe haber pasado para que Macri sea Presidente".