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Los sueldos suben, los precios también: ¿el poder adquisitivo de los argentinos mejorará en 2017?
12/06/2017 - 21:11hs

En estos días, el Gobierno celebró que gran parte de los acuerdos paritarios cerraron en torno al 20% que propuso como meta a modo de herramienta para frenar el alza de precios.

Es que la inflación recién mostró en mayo sus primeros signos de alineamiento con las aspiraciones oficiales al situarse en 1,3%.

"La economía de a poco se va pareciendo a la que soñamos", dijo en las últimas horas el jefe de Gabinete, Marcos Peña, entusiasmándose con las cifras del INDEC.

En sintonía, el propio ministro de Economía, Nicolás Dujovne, pronosticó que en el cuarto trimestre el alza de precios se ubicará en el 1%, lo que haría que el número final de 2017 quede cerca del plan de Federico Sturzenegger.

Pero para los asalariados, el panorama parece ser diferente.

Según el último Informe Semanal Económico de la consultora Ecolatina, el poder adquisitivo aumentaría en promedio 2,2% durante este año.

Esto ocurre luego de que en 2016, la aceleración de los precios erosionó el salario real, que decreció 5,5%.

Si bien las paritarias se ubicaron lejos de la banda superior de la meta de inflación del Banco Central (17%), los aumentos de este año (entre 20 y 25%) fueron menores a los del año pasado, que se posicionaron en la franja 30%-35%.

Los retos De acuerdo con los datos de la Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (RIPTE), hubo un aumento de 6% en términos nominales en el promedio de los primeros tres meses del 2017 (+31,4% interanual).

Pero al analizarlo junto con la evolución del IPC Ecolatina, que mide los precios en todo el país, los salarios de ese período se mantuvieron estables con respecto al cuarto trimestre de 2016, y cayó 1,4% en la comparación interanual.

En base a los acuerdos salariales y el aumento de la inflación, desde Ecolatina sostienen que entre abril y julio el salario formal habría registrado un incremento de 0,7% en relación a los tres meses previos,

Además, la recuperación interanual del 2,1%, una leve mejora que se mantuvo por debajo de los incrementos obtenidos en los años electorales.

Pero todavía hay esperanza para la recomposición del poder adquisitivo y habrá que esperar a los meses previos a las elecciones legislativas.

De acuerdo con Ecolatina, el pico de la mejora de salario real estará entre julio y septiembre, cuando registre un crecimiento de +4,3% en relación al trimestre anterior.

De esta forma, el Gobierno se verá favorecido en términos electorales, gracias a la desaceleración del alza de los precios y el pico de incremento de los salarios, que subirían 10% nominal entre julio y septiembre debido a las subas paritarias en tramos.

El cuarto trimestre, no obstante, volverá a mostrar pérdidas a fin de año.

Durante el último trimestre, el salario real caerá 3% con respecto a los tres trimestres precios, pero se mantendría 1,4% en la comparación interanual.

Y en el último mes de este año la ganancia real sería mínima, ubicándose muy por debajo de diciembre de 2015. De hecho, en diciembre del año pasado el salario real decreció 4,7%.

No obstante, Ecolatina asegura que al considerar sus proyecciones sobre evolución del salario formal y su proyección de inflación (27%), los ingresos de los trabajadores crecerían 1,5%, menos de la mitad de la medida durante 2015, cuando se realizaron las elecciones presidenciales.

Lo que viene De acuerdo con la consultora, si bien este año el salario real podrá crecer levemente, las cifras mejorarán en los próximos dos años.

Es que, en caso de que se mantenga la tendencia, el salario real se incrementará de manera lenta, pero la reducción de la inflación sería más rápida.

Esto ayudaría a los sectores de menores ingresos, que son los más afectados por el alza de precios y también los que mueven más rápidamente la aguja del consumo, otra de las materias pendientes del Gobierno.

Sin embargo, Ecolatina recomienda desactivar el riesgo de las cláusulas gatillo, ya que si la inflación se dispara habrá reapertura de paritarias o indexación automática que podría neutralizar las políticas antiinflacionarias.