La balanza comercial registró en mayo un déficit de u$s642 millones, contra un superávit de u$s485 millones que se había logrado en el mismo período del año pasado, según informó el INDEC este jueves.

Las exportaciones subieron 0,8% a $5.415 millones, mientras que las importaciones se dispararon 24% a $4.886 millones.

En el balance de cinco meses, el saldo comercial muestra un rojo de u$s1.863 millones, que contrasta contra un superávit de u$s515 millones del mismo período del año pasado.

Con exportaciones estancadas, la suba del 24% en las importaciones explica el déficit de mayo. La leve variación de 0,8% en las exportaciones resulta consecuencia de una suba de 5,3% en los precios, mientras que las cantidades bajaron 4,2%.

Las manufacturas de origen industrial (MOI) aumentaron 23,2%, y las de combustibles y energía mejoraron 11,3%, mientras que las facturas de origen agropecuario (MOA) disminuyeron 8,5%.

En el caso de las importaciones, la suba del 24% es producto de un aumento del 8,2% en los precios y de 14,5% en las cantidades.

Los incrementos se observaron en todos los rubros, pero con menor intensidad en aquellos vinculados a los bienes de consumo.  

El incremento más importante se observó en combustibles y lubricantes, cuyas compras aumentaron 67% a u$s705 millones.

Desde el INDEC puntualizaron que aumentaron las compras de gas oil (en u$s112 millones), gas natural licuado (en u$s64 millones) y aceite crudo de petróleo (en u$s47 millones).

Las importaciones de bienes de capital subieron 22,6%, mientras que los accesorios y bienes de capital mejoraron 22,9%.Las adquisiciones de bienes intermedios avanzaron 8,8%.

En tanto, las importaciones de bienes de consumo subieron 13,9% y llegaron a u$s686 millones de dólares.

De acuerdo al informe del INDEC, en mayo "los principales socios comerciales (exportaciones + importaciones) fueron Brasil, China y Estados Unidos, en ese orden”.

Las exportaciones a Brasil alcanzaron u$s788 millones y las importaciones desde ese país u$s1.652 millones. El saldo comercial fue deficitario en u$s864 millones. 

Por su parte, las exportaciones a China alcanzaron u$s760 millones y las importaciones u$s1.033 millones. El déficit comercial en este caso fue de u$s273 millones.

Finalmente, las exportaciones a Estados Unidos sumaron u$s450 millones y las importaciones desde ese país u$s720 millones. El déficit con EE.UU. en mayo fue de u$s269 millones.

"Estos tres países sumados absorbieron 36,9% de las exportaciones de Argentina y abastecieron 56,2% de sus importaciones", indicó el instituto.

Participación de los MOI Las manufacturas de origen industrial fueron las grandes protagonistas de mayo, con aumento de 23,2% en las exportaciones.

Según la consultora ABECEB, la razón hay que buscarla en las variaciones positivas tanto de los precios de estos productos (+8,4%) como de las cantidades exportadas (+13,6%).

Los crecimientos más relevantes son los de material de transporte terrestre (+30,3%), piedras, metales preciosos y sus manufacturas (92,9%) y productos químicos (11,7%).

La buena noticia la dio Brasil, a pesar de la convulsionada realidad que vive el país vecino donde el presidente Michel Temer enfrenta graves acusaciones de corrupción.

En efecto, las exportaciones hacía Brasil volvieron a crecer luego de una caída interanual en abril: avanzaron 17%, pasando de u$s671 millones en 2016 a u$s788 millones en 2017.

Como se mencionó más arriba, el sector automotor fue portador de novedades positivas, especialmente el material de transporte terrestre que creció 44,7%. Los vehículos para transporte de hasta seis personas y vehículos de carga fueron los más relevantes dentro del rubro.

¿Y el campo? Gran parte de la caída de las exportaciones agroindustriales tiene su explicación en la demora de la comercialización de la cosecha de soja de la campaña 2016/17.

Es que hacia fin del mes pasado los productores habían vendido apenas 12,1 millones de toneladas de este grano, 6 millones menos que las 11 campañas anteriores, en gran medida por las inclemencias climáticas registradas en algunas zonas productivas.

Según el reporte del Instituto de Estudios para la Realidad Argetnina y Latinoamericana (IERAL), dependiente de la Fundación Mediterránea, esto supone el 21% de la producción del ciclo, 39% menos comparado con las cifras de una década atrás.

Este "faltante" de entre 6 y 10 millones de toneladas –según IERAL– alteró las ventas de toda la cadena: desde las industrias de transformación, hasta los transportistas y comerciantes.

Por otro lado, el premio de entre u$s10 y u$s20 por tonelada ofrecida por los mercados de futuro (MATBA) por la mercadería que se comercialice a fin de año, sumado al nuevo contexto financiero de créditos blandos, permite que los productores racionalicen la venta de granos.