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El presidente de Arcor, principal empresa de alimentos de la Argentina, afirma que se debe avanzar con una reforma impositiva y con mejoras logísticas
02/07/2017 - 11:12hs

Luis Pagani es el presidente de Arcor, la empresa más grande de alimentos del país.

Cerró el ejercicio 2016 con ventas por unos u$s2800 millones, exportaciones por u$s250 millones y cuenta con unas 40 plantas en la región de las cuales, 30 están en la Argentina.

Planea invertir unos u$s90 millones este año, en un contexto, en el que "la economía empieza a caminar -pero, aclara- tal vez no a la velocidad que uno quisiese".

"El crecimiento no es parejo en todos los sectores, porque tenés rubros que en 2016 ya empezaron a revertirse y otros que empezaron en este primer trimestre. Y después hay sectores industriales que están ligados a la suerte de Brasil y vienen con cierta postergación", agrega. 

"De acá para adelante, soy optimista. Si vos, mirando para adelante, ves cómo se reposiciona la Argentina en el mundo -cosa que no es fácil, porque hemos estado afuera 14 años de los mercados- no es una cuestión de un año para el otro. La confianza necesita ganar tiempo. Por eso veo positivo que el Presidente, en todos estos viajes, integre a la Argentina al mundo nuevamente y la reposicione", apunta. 

Consultado sobre por qué se demoraron tanto las inversiones, Pagani afirma que los proyectos "llevan tiempo, años y estudios. Los primeros dólares que vienen son los financieros, luego las inversiones locales y en tercer lugar las inversiones externas".

"Me da la sensación de que estaríamos en la fase dos, donde muchos argentinos están viendo oportunidades de negocios. No lo enfoco sólo en grandes empresas, sino también en proyectos interesantes de la pequeña y mediana empresa, que empiezan a tener interés y con una mirada en el largo plazo. Deberíamos alinearnos el sector privado con el Estado", agrega. 

Sin embargo, afirma que es clave corregir rápidamente el tema de la carga tributaria: "Nadie piensa que podés sacar impuestos de un día para el otro, pero si vos das una proyección gradual y una adecuación de la carga tributaria, lo más importante es poner adentro del sistema a los que están afuera, o sea el 30 o 35% que está dentro de la economía informal". 

"La dificultad más grande en la actualidad es la infraestructura. Muchos de los negocios los estoy perdiendo por una cuestión de logística. Nuestras fábricas están ubicadas a más de 500 kilómetros del puerto de Buenos Aires, y recorrer esas distancias realmente te quitan el negocio. En la Argentina, exportar un container cuesta u$s2400, y en Chile sale u$s900. No es el tipo de cambio el que nos va a solucionar todo", señala Luis Pagani a La Nación.

Así las cosas, el directivo afirma que "se necesita una reforma tributaria y obras de infraestructura que solucionen el tema logístico. Hacer un puerto o una autopista requiere entre tres o cuatro años de obra. Si me quiero poner a la altura de Chile, los camiones allá son bienes de capital, por tanto descargan el IVA; el combustible, en dólares, es la mitad de lo que sale acá. ¿Cómo hacemos para que en estos tres o cuatro años haya una combinación clara para no perder negocios? La Argentina no puede estar perdiendo exportaciones en productos de valor agregado en la alimentación". 

Consultado sobre el nivel de endeudamiento, Pagani sostiene que "nuestro pasado financiero nos condena. Me preocupa que esa deuda venga a financiar el gasto corriente. Creo que hoy hay mucho apetito financiero, tanto sea para las empresas argentinas como para el país, pero tenemos que ver bien dónde se aplica ese ingreso de dólares". 

Respecto de la inflación, considera que "es el gran desafío que tiene la conducción del Banco Central, y creo que todos -incluido también el sector privado- debemos mirar cómo hacemos para bajar la tasa a un dígito".

"No importa si es un punto más o un punto menos pero el objetivo se puede llegar a cumplir", completa. 

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