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Mientras que en el año 2000 el país tenía un superávit de u$s605 millones en su balanza comercial con Brasil, para 2017 se espera un déficit de u$s7.000 M
10/07/2017 - 20:52hs

Recientemente un empresario confió a iProfesional que, aunque el mercado potencial de su producto había crecido en Brasil, su empresa cada día vendía menos.

El empresario fue más categórico: "la demanda de mi producto en Brasil se incrementó, pero quien me podría comprar, le está comprando a otro. Me parece que dejé de ser competitivo".

¿Qué es ser competitivo? Es fabricar un producto o prestar un servicio con el mismo costo que el competidor, pero con una calidad superior. O fabricar un producto o prestar un servicio con la misma calidad que la competencia, pero con un costo menor. O las dos cosas al mismo tiempo.

La cuestión es que, desde el año 2000, Argentina perdió la mitad de un mercado que aumentó cuatro veces.

La situación, en números

De todo lo que Brasil le compraba al mundo en el año 2000, el 12,25% era originario de Argentina. Brasil importó (FOB) u$s55.850 millones y le compró a Argentina (FOB) u$s6.843 millones.

En el año 2013, en pleno auge de las importaciones brasileñas, el "socio de Argentina" le compró al mundo por u$s239.747 millones, pero el país del sur sólo proveyó el 6,87% (u$s16.462 millones).

En otras palabras: "Brasil, entre el 2000 y el 2013 multiplicó 4,3 veces sus importaciones, pero argentina dividió por dos el mercado que tenía".

Haciendo el análisis al primer semestre del año 2017, las exportaciones argentinas a Brasil representan el 6,43% de todo lo que Brasil le compra al mundo. De esta forma Argentina continúa perdiendo mercado en su socio más importante.

Cuando se analiza el resultado de la balanza comercial (exportaciones menos importaciones), en el mismo año 2000, el superávit era argentino en u$s605 millones.

La previsión para el año 2017 es de un déficit para Argentina próximo de los u$s7.000.

Será el mayor déficit comercial de la serie histórica entre Brasil y Argentina, y no es por falta de demanda brasileña. Es por falta de competitividad desde la oferta Argentina.

En el primer semestre del 2017, respecto del mismo período del año anterior, Brasil aumentó sus exportaciones totales un 19,35%, pero las dirigidas hacia Argentina subieron un 27,13%.

En el mismo período, Brasil aumentó sus importaciones un 7,35% y las importaciones desde Argentina aumentaron un 8,83%.

Esto quiere decir que mejoró sus exportaciones hacia Argentina un 40% por arriba de su media mundial y crecieron sus importaciones desde Argentinaun 17% por arriba de su media mundial.

La explicación está en dos factores: primero –y fundamentalmente–, por la falta de competitividad del producto argentino; luego, por la falta de una política de Estado para aumentar las exportaciones a Brasil.

Tipos de productos que cada país exporta al otro

Cuando se analizan los productos exportados e importados por cada país a su socio, se puede observar que de todo lo que Argentina le exporta a Brasil:

- El 23,2% es producto básico.

- El 3,3% es producto semi-manufacturado.

- El 73,5% es producto manufacturado.

El único cuya exportación elevó considerablemente fue el producto básico, que creció el 22,71%.

El producto semi-manufacturado decreció sus exportaciones un 0,43% y el producto manufacturado aumentó el 5,51%.

En el análisis brasileño, la recíproca no es verdadera: Brasil exporta apenas el 4,5% de productos básicos, el 3,3% de productos semi-manufacturados y el 92,2% de productos manufacturados.

Es absolutamente entendible que para compensar la exportación de productos con valor agregado de Brasil, Argentina precisaría aumentar muchísimo la exportación de productos básicos (o comenzar a mejorar la competitividad del producto con valor agregado).

Al analizar los primeros 100 productos que cada país le exporta al otro, se hace evidente que éstos representan para Brasil el 73,46% sobre el total exportado a Argentina.

Los 100 productos que Argentina le exporta a Brasil, representan el 88,71% del total de lo que llega a ese país.

Claramente, la oferta exportable brasileña es más amplia en cantidad de productos que la Argentina.

Sobre el análisis de los primeros 15 productos exportados por cada país al socio, Brasil tiene 12 de los 15 con valor agregado.

Argentina tiene apenas 6 de los 15 con valor agregado.

Sólo en los 15 productos, el déficit comercial argentino es de u$s711 millones; o sea, prácticamente el 20% del déficit comercial total.

¿Por qué no se puede revertir el déficit comercial?Si se consideran los cinco componentes de formación de costo y precio de venta, Argentina no es competitiva en ninguno de ellos.

1. Tributos: una de las cargas tributarias más altas del mundo.

2. Tipo de cambio: no está acompañando la inflación y aumenta bastante menos que los precios internos. 

3. Infraestructura: costos altísimos para aproximar producción del interior a los puertos, aeropuertos y aduanas fronterizas.

4. Mano de obra: muy cara al compararla con mano de obra productiva en otros países.

5. Insumos: con inflación sin ajuste del tipo de cambio se encarecen en dólares. 

Este análisis simple muestra que la carga para obtención de competitividad claramente debe caer en el proceso productivo de cada empresa. Es un peso enorme que no permite contraponer la falta de competitividad de los otros cinco factores.

En definitiva, el panorama de la balanza comercial con Brasil muestra una clara degradación de la posición Argentina. El elevado déficit podría revertirse si se tienen en cuenta sus causas y se implementan políticas de Estado que acompañen no sólo la generación de un mayor volumen de negocios, sino también la exportación de productos con mayor valor agregado.

En un próximo artículo de la sección Ahora Brasil en iProfesional, se señalarán propuestas que podrán ayudar a dar forma concreta a las políticas que Argentina está necesitando para mejorar su comercio exterior.

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