La compañía química Carboclor despidió a unos 150 trabajadores de la planta ubicada en la localidad de Campana (Provincia de Buenos Aires)

Según el telegrama enviado a los empleados, la empresa de capitales uruguayos justificó la medida con el argumento de que la "crítica situación económica" que atraviesa el país afectó a la firma.

Los obreros se enteraron de la medida cuando intentaron ingresar a la planta para iniciar la jornada laboral, pero les fue impedido el acceso por el personal de seguridad.

En el telegrama, la empresa adujo que debía tomar la medida "atento a la grave crisis económica que atraviesa el país y que inexorablemente ha afectado a esta compañía".

Explicó que pasó de perder $28,3 millones en 2013 a $265,7 millones en 2016 y $27,3 millones entre enero y marzo pasados.

También se quejó por la suba del 25% en los precios de la materia prima; el elevado costo laboral cercano al 70% y "los cambios en la política legislativa dispuesta por el Ministerio de Energía que afectaron la viabilidad de los productos de la compañía".

Carboclor había presentado un Procedimiento Preventivo de Crisis ante el Ministerio de Trabajo y la Comisión de Valores, donde advirtió sobre la crítica situación financiera y con la posibilidad de desvincular a su personal dedicado a la producción para dedicarse sólo a la logística y distribución.

Pero Néstor Carrizo, tesorero del Sindicato del Personal de Industrias Químicas y Petroquímicas de Zárate, denunció que la compañía "incumplió" con el Procedimiento Preventivo de Crisis.

"La empresa no respetó los plazos y envió los telegramas de despido sin esperar que se finalice el procedimiento", afirmó Carrizo en declaraciones a Noticias Argentinas.

Y dijo que la intención de la empresa es pagar sólo el 50% por las correspondientes indemnizaciones.