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Gilbert Ott explicó sus trucos para senatrse en la zona más cómoda del avión a un precio que, a veces, llega a ser más barato que la tarifa común
24/07/2017 - 16:11hs

El bloguero Gilbert Ott suele darse el lujo de viajar en los mejores asientos a un precio mucho más barato y, para la felicidad de todos los viajeros, contó cómo lo hace.

El primer punto es que acumular millas. Hay formas menos convencionales de sumarlas aparte de hacer vuelos en determinadas empresas o consumir con tarjetas de crédito asociadas. "Cada tantos meses, las aerolíneas venden las millas a precios de oferta, que uno puede usar para reservas pasajes o pedir un aumento de categoría por mucho menos dinero", indicó.

Y recordó que, por ejemplo, aprovechó estas promociones en empresas menos conocidas que lanzan buenas tarifas y están asociadas a grandes firmas con vuelos internacionales.

Ott indicó que hay ofertas de 40.000 millas a un poco más de 1.000 dólares.

Sitting at the airport working, it appears no one wants an upgrade on tonight's @british_airways flight. Shame, because I have 10 to give out...

Una publicación compartida de God Save the Points (Gib) (@godsavethepoints) el 22 de Jul de 2017 a la(s) 1:20 PDT

Si bien el precio suena excesivo, se las puede usar para un pasaje de Hong Kong a Sidney en primera clase, que suele costar u$s6.000.

Otro truco le permitió viajar a los Estados Unidos desde Australia en la zona más lujosa del avión por u$s1.500, cuando habitualmente ese pasaje se vende por más de 10.000 dólares. Para lograrlo, el gurú de los pasajes compró millas de la empresa Alaska en oferta, una compañía aliada a Qantas. Así, reservó el ticket en la página de la aerolínea más chica y con muchas menos millas compró un pasaje de la aerolínea famosa.

Otro consejo del experto en viajes fue tener en el celular las apps de las aerolíneas, porque pueden llegar a ofrecer lugares disponibles en los sectores más caros a través de estos sistemas.

Además, el bloguero contó que a veces conviene reservar lugar en vuelos sobrevendidos.

Según dijo, suele pasar que la zona colapsada es la económica mientras que sí hay lugar en las primeras filas. Esto obliga a las aerolíneas a ceder esos asientos y uno podría ser el afortunado.

Para los que no tienen apuro en volar ni problema en quedarse una noche más en la ciudad, Ott resaltó que los beneficios de compensación que ofrecen las aerolíneas por aceptar un cambio de vuelo pueden llegar a cubrir los gastos de un nuevo pasaje.

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