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El oficialismo superó los 172 votos necesarios para archivar la denuncia por supuesto cobro de coimas y evitar que el presidente fuera suspendido del cargo
03/08/2017 - 15:13hs

El presidente de Brasil, Michel Temer, consiguió los votos suficientes en la Cámara baja del Congreso para bloquear acusaciones de corrupción en su contra por supuestos sobornos, que lo habría llevado a afrontar un juicio ante el Supremo Tribunal Federal, en una sesión con ribetes de escándalo y acusaciones cruzadas de coimas.

El oficialismo superó los 172 votos necesarios para archivar la denuncia por corrupción, la primera realizada por un fiscal general contra un presidente en ejercicio.

Es la segunda vez en menos de dos meses que Temer logra mantenerse en el cargo, luego de que el Tribunal Superior Electoral lo absolviera de delitos en la campaña de 2014, en la que fue reelecto como vicepresidente acompañando a Dilma Rousseff, destituida el año pasado en un juicio político.

Para que la denuncia fuera aceptada y Temer suspendido durante seis meses hasta un veredicto del Supremo Tribunal Federal (STF, corte suprema), eran necesarios dos tercios de los votos de los 513 diputados.

Ahora, el Supremo Tribunal Federal deberá decidir el camino de la denuncia, que debe mantenerse hasta que el presidente Temer abandone el cargo y pierda los fueros.

La sesión iniciada poco antes de las 10 de la mañana estuvo marcada por tumultos, empujones, insultos y manifestaciones de protestas dentro del recinto de la Cámara Baja.

"Existe quórum para iniciar la votación del tema", informó el presidente de la cámara baja, Rodrigo Maia (del oficialista PMDB), cuando había en el plenario 386 diputados.

En plena sesión, el Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), integrante de la coalición oficialista, se fracturó cuando parte del bloque de la agrupación anunció que votaría a favor de suspender al mandatario.

El jefe del bloque del oficialista PSDB, Ricardo Trípoli, dijo que "blindar la denuncia le resta credibilidad al parlamento", tras lo cual los fieles al presidente le gritaron: "Entreguen los cuatro ministerios, traidores".

El PSDB, clave en el sostén de Temer desde el impeachment que destituyó a Dilma Rousseff el año pasado, tiene cuatro ministerios, entre ellos el de Relaciones Exteriores, donde el canciller Aloysio Nunes garantizó fidelidad al jefe del Estado.

Además, el oficialismo acusó a la oposición de querer llevar la votación hacia el horario prime time para que los parlamentarios favorables a Temer queden expuestos ante la opinión pública.

La nota aún más escandalosa la dio el ya célebre Wladimir Costa, del oficialista Solidaridad. "Prepárense para llorar los opositores. Van a perder la elección. El presidente Michel Temer es un hombre ético", dijo el parlamentario que salió a la fama por haberse tatuado en el hombro el apellido del jefe del Estado. La izquierda gritaba "Fuera Temer", mientras desde distintos lados se escuchaba un permanente grito de "¡Corruptos, corruptos!".

Es vox populi los millones de reales destinados por el gobierno central para respaldar iniciativas de diputados que garantizaban su rechazo al enjuiciamiento del presidente.

"El pueblo está como anestesiado, esperando por reconstruir el país", dijo por su parte Julio Lopes, de la base de apoyo de Temer, el Partido Progresista, principal fuerza involucrada en la Operación Lava Jato.

La denuncia por corrupción de Temer debe ser bloqueada por 172 diputados para ser archivada, caso contrario, se necesitarán 342 votos para suspenderlo por seis meses y elevar el caso a la corte suprema.

A Temer lo grabó clandestinamente el 7 de marzo pasado el empresario Joesley Batista, dueño del frigorífico JBS, durante una conversación sobre supuestos sobornos, en la residencia oficial.

El fiscal Rodrigo Janot envió la denuncia sosteniendo que JBS pagó coimas a Temer vía su ex asesor Rodrigo Rocha Loures, una operación que fue filmada por la policía federal.

El principal índice de acciones de Brasil subió un 1,04% luego que la Cámara de Diputados aprobó cerrar la fase de discusiones sobre si otorgar la autorización al Supremo Tribunal Federal para juzgar una denuncia contra el presidente Michel Temer.

La decisión hacía pensar que la Cámara baja aprobaría la recomendación del diputado Paulo Abi-Ackel de rechazar que se autorice al STF a juzgar la acusación contra el mandatario.

El índice superó la barrera de las 67.000 unidades por primera vez desde mayo, cuando se divulgaron las revelaciones de ejecutivos de JBS, que implicaron a Temer en un caso de corrupción.