Desde hace siglos el reemplazar mano de obra humana con tecnología es una estrategia de las empresas, primero para tener una ventaja competitiva en el mercado, y en segundo lugar, para reducir sus costos laborales. De la mano de esa tendencia muchos oficios y trabajos desaparecieron o fueron reemplazados por otros.

En esta etapa sin embargo, el avance de la robótica, la inteligencia artificial y la tecnología cognitiva parecen pronosticar un cambio demasiado acelerado y masivo, transversal a todas las industrias, que podría derivar en un alto índice de desempleo.

Pero este movimiento es imparable. Compañías de primera línea ya están reemplazando empleados por robots.

El último caso en darse a conocer fue el de la marca alemana de indumentaria deportiva, Adidas, que incorporó un robot llamado Sewbot con el cual planea cambiar la industria textil para siempre.

El robot es una creación de SoftWear Automation, una empresa con sede en Atlanta que se adjudicó un contrato con DARPA por u$s1,25 millones para desarrollar tecnología robótica aplicada a los textiles.

Utiliza cámaras y brazos robóticos que cosen y cortan la tela de una forma rápida y precisa, realizando un trabajo que muchos pensaron que sería exclusivo para los humanos por la atención a los detalles que se necesita.

Pero según sus creadores, Sewbot es capaz de crear una prenda a un nivel de precisión que supera el del ojo humano, por ello la compañía china Tianyuan Garments se ha asociado con SoftWear para instalar 21 líneas de producción en su nueva planta en Little Rock, Arkansas.

Con Sewbot, desde el corte y costura de la tela hasta el producto terminado, se tarda aproximadamente cuatro minutos.