El Gobierno dará a conocer esta semana una serie de datos que confirmarán la recuperación de la economía a semanas de las elecciones, aunque los números de la balanza comercial encienden una luz amarilla respecto a la sostenibilidad del nuevo modelo económico.

El Instituo Nacional de Estadística y Censos (INDEC) publicará entre martes y miércoles los indicadores relacionados al nivel de actividad y el índice de salarios de julio, la construcción, la industria y la balanza comercial de agosto, en tanto también se difundirá la evolución de la distribución del ingreso y la balanza de pagos correspondientes al segundo trimestre.

Asimismo, el organismo de estadística informará sobre el nivel de pobreza e indigencia del primer semestre.

Tanto las cifras oficiales como las privadas dan cuenta de que la recesión del año pasado ha quedado atrás y ahora el desafío es superar el nivel de actividad que tenía la economía en 2015 sin que el deterioro de la balanza comercial ponga en jaque el proceso de endeudamiento masivo.

En ese sentido, la consultora FIEL estimó una suba del 4,9% en la industria para agosto, mientras que para el grupo Construya el sector de la construcción avanzó 24,3%. Por su parte, el Centro de Estudios Económicos de Orlando Ferreres calculó un alza del producto del 5,4% para julio.

Estos números preliminares permiten vaticinar que el INDEC mostrará que los "brotes verdes" siguen creciendo.

El economista de la UBA Ariel Coremberg explicó a BAE Negocios que "está confirmado que ya salimos de la recesión, el tema es ver si crecemos porque eso se va a dar recién cuando recuperemos el nivel de 2015".

Para Coremberg, si los datos del INDEC dan en sintonía con los números que arrojaron los privados, el tercer trimestre podría finalizar con un alza interanual del 4%. Un ritmo que de continuar el año próximo permitiría volver a los niveles de producción que se vieron entre 2011 y 2013.

A su vez, la industria se verá favorecida por la reactivación y un mayor consumo de bienes durables como electrodomésticos y autos. También el despegue de Brasil ayudará a que continúe el impulso del rubro fabril.

De todas formas, en donde no habrá números para festejar será en la balanza comercial, que viene acumulando un rojo importante a lo largo de todo el año y podría finalizar en un nivel récord.

"No vamos a crecer por el lado de las exportaciones porque hay ruido afuera, y en la medida en que se reactiva la economía, necesitamos más importaciones", advirtió Coremberg.

En julio, el déficit del país con el resto del mundo fue de u$s798 millones y de esta manera sumó desde enero un desequilibrio de u$s3.428 millones.