iProfesional

La combinación del atraso cambiario, tasas altas y suba de los precios internos generó preocupación entre los dueños de las fábricas argentinas
06/12/2017 - 16:48hs

El crecimiento de los costos de producción en dólares dejó claro para los industriales la rentabilidad en rojo que atraviesan algunos sectores manufactureros argentinos, que se enfrentan además al desafío de la competitividad para hacerle frente a la apertura comercial.

La combinación del dólar estancado y en franco atraso, tasas altas y suba de los precios internos generó preocupación entre los dueños de las fábricas argentinas.

Según el Índice de Costo Argentino de la Producción (ICAP), difundido por el Instituto de Economía de la Fundación de la UADE, el costo de la producción subió 3,6% en septiembre en comparación interanual.

El dato positivo para los industriales es que dichos elementos se mantuvieron estables con relación a agosto.

El informe revela que el índice "se encuentra 6% por encima de los niveles de enero 2016", y destacó que "en la última medición se observó el impacto del alza de la tasa de interés, entre otros factores relevantes para la competitividad".

Es la política monetaria del Banco Central una de las variables de corto plazo que podría destrabar, en parte, los problemas que sufre la producción nacional.

Sucede que en la UIA, según confiaron fuentes de su mesa chica al diario BAE, se prendieron las luces de alerta por la pérdida de rentabilidad ante el crecimiento de los costos ya que "todos se miden en dólares y afectan a la competitividad con otros mercados", pero destacan que la falta de recuperación del consumo interno "puso sobre las cuerdas" a algunos sectores, como los sensibles y de consumo masivo.

"Se está vendiendo por debajo del 2015, mientras tanto sube el costo de producción. Si el consumo estuviera 5 puntos encima, esa alza no afectaría. Pero la capacidad instalada del consumo masivo en los últimos tiempos se mantiene estancada porque los costos siempre aumentan y las ventas no aumentan de manera igual", se lamentó el representante de una de las alimenticias locales.

Entre los componentes del ICAP, mostraron una tendencia descendente en términos reales durante septiembre la energía eléctrica, el costo logístico, las materias primas, el riesgo país, conflictos laborales, los costos de seguro patrimonial y costos logísticos. En tanto, con tendencia al alza se ubicaron la presión tributaria, la tasa de interés activa y el costo de la construcción.

Si bien la UADE señaló en septiembre una curva a la baja en los costos logísticos, el Índice de Costos de la Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (Fadeeac) dijo que "transportar mercadería por carretera en noviembre fue un 2.37% más caro que el mes anterior".

"Ese valor está fuertemente relacionado con la suba del costo por personal, pero no contempla los nuevos aumentos en el combustible que se registraron a principios de diciembre, lo que remarcará todavía más la tendencia al alza de lo que los empresarios deben solventar para poner sus camiones en funcionamiento", detalló.