La expresidenta de Aerolíneas Argentinas, Isela Costantini indicó que su experiencia al frente de la empresa estatal descubrió que para estar en política "hay que tener el estómago, la cabeza y las emociones preparadas, porque es mucho más complejo que en el sector privado".

También opinó que "hay que sumar a los empleados como un todo", y agregó en este sentido: "Hay una necesidad de sumar a los gremios como responsables, tanto de las cosas buenas como de las cosa malas" en la gestión de una firma pública.

"Se está perdiendo un oportunidad muy importante en la forma de manejar las empresas. Las compañías pueden ser rentables, y la mejor rentabilidad viene de forma sustentable cuando los empleados se sienten comprometidos y parte de un plan que lleve al crecimiento de la empresa", explicó.

Constantini se tomó un año para hacer autocrítica, introspección y completar los pendientes que tenía, entre ellas, escribir un libro –recientemente publicado– "Un líder en vos". Y destacó que tanto la presidencia de Aerolíneas, como su gerencia en General Motors la ayudaron a delinear su perfil de gestión.

"Nunca estuve en política, estuve en Aerolíneas con la visión de que iba a arreglar los problemas de la empresa, más allá de que el primer día me di cuenta que esto no era solo una empresa. Yo sé manejar empresas y resolver problemas empresariales", señaló.

También subrayó que "los procesos de transformación son muy similares en el sector privado y en el público", pero "la política tiene una complejidad superior porque sus efectos son mucho más generalizados".

Por último, Constantini aseguró que su salida de Aerolíneas fue en buenos términos, que  que no guarda rencores y que volvió a hablar con el presidente Mauricio Macri.

"Yo soy una persona muy autocrítica, por lo que trato de aprender de las cosas que hago y lo tomo como parte de mi crecimiento personal", concluyó.