Un veranito argentino en Chile y Perú. Un veranito adicional, podría afirmarse. Porque la visita del Papa Francisco a ese país representará una mayor afluencia de turistas argentinos a ambas naciones. Si bien Chile es uno de los destinos elegidos habitualmente por las provincias argentinas para vacacionar, en los últimos años de inflación y costos argentinos muy caros, también para realizar compras.

La visita del Papa a Chile, que se efectuará entre el 15 y el 20 de enero, ya provocó que una de las principales aerolíneas que llegan hasta ese país, haya vendido más de 13.000 pasajes, un 18% más que lo registrado en la misma semana del año anterior.

Para esa semana, sin embargo, se espera que más de 1 millón de argentinos llegue al país trasandino. Esto significa que prácticamente la mitad del turismo que se espera para la temporada lo hará durante la visita del Papa.

Según algunos economistas, la visita del Papa también será aprovechada por quienes crucen las fronteras para realizar compras, aprovechando los precios ventajosos que suelen encontrarse en productos de electrónica, indumentaria y calzado.

En 2016, los 3 millones de argentinos que visitaron el país por distintas razones gastaron u$s816 millones en sus compras, monto que superó los u$s1.353 millones en 2017 con un 10% más de visitantes, recordó el economista Damián Di Pace, de la consultora Focus Market, en base a datos del Ministerio de Economía, Turismo y Fomento de Chile y del INDEC y que, comparado con cualquier otro rubro de la economía, es mucho más importante.

Lo que adquirieron los argentinos en Chile, por caso, es mucho más que los u$s1.000 millones que, cada año, la Argentina exporta en vino o en carne vacuna, de acuerdo a los datos que se manejan en los organismos oficiales.

Si bien las compras que los argentinos realizan en Chile se concentran en Santiago, su capital, hasta donde llegará Francisco, los otros lugares que tocará el Papa, como Temuco e Iquique también serían beneficiados por compras excepcionales. Allí se espera la visita de un 17% más de argentinos que los índices habituales.

Las perspectivas de mayores compras se fundan también en que la AFIP elevó de u$s300 a u$s500 la franquicia para los productos que se compran en el exterior, con lo que se amplía la chance en varias veces en esa moneda sin, por ejemplo, la visita a Chile se realiza en familia.

Sin embargo, lo que cambiaría en estos días, más allá de la motivación religiosa que animará a muchos argentinos a cruzar la cordillera, sería el mix de compras. La electrónica, dados los cambios impositivos que se introdujeron en la Argentina en esa categoría a lo largo de 2017, no sería la principal carnada, pero sí la ropa y el calzado.

Un par de zapatillas de running de primera marca cuesta u$s63 en Chile contra u$s127 en la Argentina, según el Indice Falabella que publica iProfesional, y esas mismas diferencias de precios que, como en este caso, es del 100%, se puede encontrar en la indumentaria deportiva y también en ropa y calzado de moda.

De modo que la expectativa es que además de asistir a la visita que Francisco hará a ese país, se prevé que los argentinos aprovechen su estadía no sólo para tomarse unos días de descanso sino también para realizar compras convenientes.