BBVA lanzó Azlo, una startup dirigida a atender las necesidades financieras de emprendedores y pequeños negocios que, por el momento, solo está operativa en Estados Unidos, según ha informado la entidad en un comunicado.

De esta manera, busca ofrecer una solución digital multiplataforma que se adapte a las necesidades financieras emprendedores y pequeños autónomos, colectivo que según el banco enfrenta dificultades para acceder a un nivel adecuado de servicios bancarios.

El proyecto, desarrollado por BBVA en su área de "Nuevos Negocios Digitales", pone a disposición de sus clientes una cuenta digital que permite acceder servicios bancarios nacionales e internacionales y a cuentas sin comisiones o con requisitos de fondos mensuales muy bajos.

Según la entidad que preside Francisco González, la startup permite realizar pagos ilimitados internacionales, el pago de facturas, depósito de cheques a través del móvil y facturación digital.

Además, ofrece herramientas digitales para la gestión del comercio electrónico, relación con proveedores de plataformas comerciales o servicios de cobro en un punto de venta.

El consejero delegado de Azlo, Brian Hamilton, explica que el objetivo de la startup es "igualar el terreno de juego" para los emprendedores que quieren formar parte de la economía global, resolviendo las dificultades que encuentran estos profesionales para cumplir con los requerimientos específicos que les permiten acceder a unos servicios financieros ajustados a las necesidades de su negocio.

Con el objetivo de promover una relación más cercana de sus clientes, la firma también ofrece una cuenta diseñada especialmente para pequeños negocios, así como acceso a talleres, eventos y a una comunidad de emprendedores.