Si bien la venta de autos registró en 2017 el segundo mejor año de la historia con más de 900.000 patentamientos, el panorama no es tan alentador en cuanto a la producción automotriz, que se mantuvo estable.

Según el reporte de la Asociación de Fabricantes de Automotores (ADEFA), la producción de autos cayó 0,1% el año pasado con respecto a 2016.

De esta forma, durante todo 2017 se ensamblaron 472.158 vehículos, 618 unidades menos que las 472.776 que salieron de las plantas en 2016.

En este contexto, llama la atención el dato que dio a conocer AFAC, cámara que nuclea a empresas autopartistas. 

Según el reporte de la entidad, las importaciones crecieron el 14% en 2017 con relación a 2016 alcanzando los u$s8.351 millones. 

El dato que preocupa es que las partes y piezas provenientes del exterior le ganaron market share a las de origen nacional, un dato que va en contra del impulso que le pretende dar el Gobierno al sector autopartista local. 

Como contrapartida, las exportaciones de autopartes en 2017 alcanzaron los u$s1.641 millones, lo que implicó un aumento del 8,6% respecto al año anterior, "lo que refleja la adecuación parcial de los reintegros a las exportaciones y cierta suba de la demanda brasileña", de acuerdo con la entidad. 

Sin embargo, esta mejora no ayudó a compensar el rojo del sector autopartista, que se disparó hasta los u$s6.710 millones en 2017, casi 15,5% más que en 2016. 

Esta cifra, de acuerdo con AFAC, "representa casi el 80% del déficit comercial de la Argentina". 

"AFAC ya ha señalado en diversas oportunidades la fuerte asociación entre las importaciones de autopartes y la producción de vehículos, siendo un fenómeno de índole estructural que en los últimos años no mostró modificaciones", alertaron. 

De acuerdo con el informe, el mayor déficit en comercio de autopartes fue con Brasil, que sumó u$s1.667 millones. 

Los productos de ese origen que más se importaron el año pasado fueron transmisiones, ruedas, neumáticos y sistemas eléctricos.