Dyson, empresa británica dedicada a los secadores y aspiradoras, anunció que entrará de lleno en la industria automotriz con la fabricación de tres modelos eléctricos Premium.

Si bien hace un tiempo había dado a conocer su interés por este nicho, ahora confirmó que serán tres los proyectos y que ya están prácticamente en marcha.

Lo cierto es que el auge del auto eléctrico está atrayendo a muchas empresas a este mercado, muchas de ellas vinculadas con otros sectores de actividad ajenos al mundo de la automoción.

En este caso James Dyson, fundador de la empresa y uno de los hombres más ricos del mundo, fue quien reveló la información.

Los planes son fabricar tres vehículos eléctricos propulsados por sistemas de baterías en estado sólido en lugar de las habituales baterías de iones de litio, logrando más potencia, menores tiempos de recarga y mayor seguridad, según Financial Times.

Sin embargo, por ahora, el primer vehículo de Dyson estará limitado a 1.000 unidades y se utilizará para introducir la marca en el mercado automovilístico, dándose a conocer y consiguiendo una base de clientes.

Después de este primer lanzamiento, fabricará otros dos modelos para competir en el segmento premium, a los que si dará un volumen más alto de producción y a los que equipará estas baterías en estado sólido, aunque siempre en función de los resultados conseguidos con el primer modelo.

El CEO de Dyson expresó en varias ocasiones su preocupación por el medio ambiente y por las emisiones provocadas por los vehículos de combustión interna.

De hecho, en 1990, los ingenieros de la empresa comenzaron un proyecto para la fabricación de un filtro ciclónico que podría ser colocado en el tubo de escape de un vehículo para filtrar las partículas. Aunque este filtro llegó a fase de producción, ninguna marca se interesó.

Por último, un dato clave, es que Dyson cuenta con un apoyo muy importante por parte del Gobierno de Reino Unido, que ya prometió financiar a la compañía el desarrollo de una nueva batería eléctrica.

Por el momento, realizará una inversión de 1.120 millones de euros para el desarrollo de baterías y otros 1.120 millones para la producción de automóviles.

Dyson comenzó su carrera empresaria en Japón vendiendo su novedosa aspiradora "G-Force" en ese mercado a fines de los '80.

Con las regalías obtenidas gracias a ese producto decidió fundar la empresa que lleva su apellido.

En 2017, el diseñador industrial fue incluido en la lista de las familias británicas más adineradas con una fortuna de 10.460 millones de dólares.