Un eventual acuerdo con la Uocra, uno de los grandes gremios que dialoga con el Gobierno y que no acompañó la marcha de Moyano el 21 de febrero pasado, puede servir de referencia en un contexto complejo por las dispares negociaciones en el marco de las paritarias docentes.

Además de los "gordos", junto a José Luis Lingeri (de Obras Sanitarias, que cerró un acuerdo hace diez días muy similar al que se apresta a firmar Martínez) y Andrés Rodríguez, de los estatales de UPCN, tiene una fluida relación con los funcionarios nacionales.

Según la Casa Rosada, la Uocra fue uno de los beneficiados por "el modelo M": tanto en lo que refiere a la obra pública como al crecimiento del sector inmobiliario en el sector privado.

"Gerardo no tiene por qué ponerse confrontativo, su gremio creció como pocos", publicó Perfil según declaraciones de un funcionario del Ministerio de Trabajo.

Por otra parte, en el Gobierno esperan un "efecto Moyano" en el interior de la CGT.

En principio, se descarta al líder de la Uocra como secretario general ya que están impulsando a algún sindicalista "más joven" y con menos pasado.

Pero creen que Martínez puede ser la columna vertebral para una reconversión y saneamiento de la central obrera en medio de las disputas con Camioneros y sus aliados, en particular Bancarios, y también los docentes de la CTA.