La única fábrica de llantas para automóviles del país, radicada en la ciudad de Rosario, quedó al borde del cierre luego de que su gerenciador anunciara el retiro del negocio ante la imposibilidad de transferirla a un grupo brasileño.

El administrador de la planta de Mefro Wheels informó en el juzgado en el que tramita el concurso de la compañía su voluntad de abandonar la explotación, precisó a Télam Pablo Cerra, abogado de la seccional local de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM).

Las partes debían encontrarse en una reunión convocada por el Ministerio de Trabajo de Santa Fe, a la que sólo asistió la representación gremial.

"La situación está muy complicada, desde el lunes vamos a comenzar una campaña para buscar un nuevo inversor", dijo Cerra.

Además, recordó que la fábrica "está tecnificada y el personal está calificado".

La fábrica de llantas para automóviles Mefro Wheels entró en crisis el año pasado cuando el grupo alemán que la explotaba decidió retirarse del negocio.

Un conflicto de meses

Luego de varios meses de conflicto, en mayo el empresario Ricardo Cicarelli -titular de la fábrica de autopartes santafesina Cirubón- se hizo cargo de la explotación mediante un contrato de alquiler con opción a compra.

Cicarelli informó al juzgado comercial que tiene el concurso de acreedores de Mefro Wheels que dejaba la explotación al argumentar que se le había caído la negociación que mantenía con la brasilera Maxion Wheels, a la que buscaba transferirle su derecho a compra de la planta rosarina.

En la fábrica, fundada hace 80 años por empresarios metalúrgicos rosarinos, trabajan actualmente 20 empleados que realizan tareas de mantenimiento, mientras otros 70 aguardan ser reincorporados cuando la producción se ponga en marcha.

"Planteamos la situación como un problema más profundo que el de perder trabajo, que es el de perder una actividad industrial, y eso no se recupera nunca más", dijo Cerra.

Fuentes de la UOM explicaron que desde mayo del año pasado el gerenciador no logró acordar contratos con las terminales automotrices que operan en el país, con el fin de reactivar la fábrica.

"En 2017 ingresaron al país 860.000 llantas importadas", explicó Cerra, y agregó que "con 350.000 la planta de Mefro Wheels hubiese trabajado a pleno".

Ante ese panorama, desde la seccional Rosario de la UOM resolvieron comenzar la próxima semana una campaña pública "con todos los sectores" en procura de un nuevo inversor para la fábrica.