Nissan es uno de los fabricantes que está dando pasos agresivos hacia la transformación del parque vehicular global hacia la propulsión eléctrica. No es de extrañar, dado que su compacto Leaf fue uno de los primeros eléctricos exitosos del planeta.

Ahora, se conoce que el próximo coche eléctrico de Nissan será un SUV/Crossover basado en el Nissan IMx Concept, un coche 100% eléctrico a baterías destinado a ser la alternativa cero emisiones de Nissan Juke y Nissan Qashqai, un rival de gran relavancia que buscará enfrentarse al Hyundai Kona eléctrico y al Kia Niro eléctrico.

Nissan se ha propuesta alcanzar los 8 millones de autos eléctricos vendidos para el año 2021, una meta muy ambiciosa que traerá al mercado nada menos que 8 nuevos modelos 100% eléctricos. Pero de entre todos ellos, el más importante será este nuevo SUV/Crossover que buscará repetir la fórmula vista en el Nissan Leaf, siendo planteado como un modelo global, basado en una plataforma específica para coches eléctricos y subiéndose al carro de los tan de moda vehículos todoterreno.

Dado el éxito comercial de los Nissan Juke y Nissan Qashaqi entre los SUV, hablamos de un movimiento sumamente lógico que auna dos de las especialidades del fabricante nipón en estos momentos, señala Diario Motor.

De hecho, la apuesta por un modelo global nos hace pensar en una planteamiento muy claro que repetirá la fórmula ya vista en el Nissan Leaf, aspirando a ser un auténtico best seller que además parece que contará con una muy escasa competencia. De hecho, sólo el Hyundai Kona en su versión eléctrica ofrece una variante de este tipo entre los segmentos B-SUV y C-SUV a día de hoy, lo que ha dado alas a Nissan para ponerse manos a la obra y asaltar el mercado con un modelo eléctrico completamente nuevo.

La presentación del Nissan IMx Concept ya dio pistas sobre el futuro primer SUV eléctrico de Nissan, además de detalles sobre la renovación del Nissan Juke que está también muy cerca de producirse.

En el Nissan IMx Concept se encuentra plataforma capaz de cobijar las baterías bajo el suelo del habitáculo, contando con capacidad suficiente para alcanzar los 600 kilómetros de autonomía por cada recarga completa.