A seis meses de la firma del acuerdo por el cual Pampa Energía vendiera a Trafigura el negocio de refinación y distribución de combustibles por un monto estimado de u$s90 millones, la petrolera comenzará el próximo 10 de mayo a distribuir sus productos Puma –la marca con la que opera en la Argentina- en la red de 250 estaciones de servicio de la ex Petrobras.

La operación estaba sujeta a la aprobación de ciertas condiciones regulatorias, publicó surtidores.com.ar.

En ese sentido y tras ser admitidas todas las instancias, el líder del mercado en la industria mundial de commodities se hará cargo finalmente además de las bocas de expendio, de la refinería Ricardo Elicabe ubicada en Bahía Blanca, una fábrica de lubricantes, y una terminal de almacenamiento y despacho de combustible en Caleta Paula, en la provincia de Santa Cruz.

Al respecto de esta novedad, Patricio Norris, codirector de petróleo y gas para América Latina de Trafigura, afirmó: “Tenemos la intención de posicionarnos como un proveedor de combustible a largo plazo”.

El ejecutivo admite que actualmente existe un déficit significativo en la capacidad de producción de combustibles premium en Argentina. En ese sentido propone “incrementar nuestra capacidad de ofrecer al mercado productos de alta calidad, de una manera confiable y a precios competitivos“.

En cuanto a las estaciones de servicio, el convenio establece el cambio de imagen a la marca Puma en un plazo de 12 a 18 meses y la migración de las tiendas de conveniencia actuales por las de Puma: “7th Street” y “Puma Store”.

Finalmente y en relación a la situación de los empleados, Trafigura  se comprometió a respetar las escalas salariales, la antigüedad y los beneficios.

“El cambio de empleador no representará ninguna alteración en los acuerdos colectivos, los cuales se mantendrán vigentes y conservarán sus respectivos plazos y condiciones”, puntualizaron desde la compañía.

La situación de OilEn otro aspecto, el juez en lo Comercial Javier Cosentino decidirá en las próximas horas si habilita el proceso de salvataje propuesto por la petrolera para hacerse de la exIndalo, una vez que Trafigura garantice el pago de la millonaria deuda que Oil Combustibles mantiene con la AFIP.