La City sigue alterada y eso se refleja en el precio del dólar, que sigue al alza. Las numerosas medidas tomadas por el Gobierno por intentar controlar el precio del tipo de cambio parecen no ser suficientes, y el billete minorista tocó un nuevo valor máximo histórico para un cierre.

Esto ocurre un día después de que el Ejecutivo anunció que el país empezó a negociar una línea de financiamiento con el Fondo Monetario Internacional (FMI), que podría superar los u$s30.000 millones.

Además, se suman la falta de efectividad de las medidas recientes del Banco Central, como la intervención durante las últimas dos ruedas en los mercados a futuro, la suba de las tasas hasta el 40% del viernes pasado y la venta de divisas en la plaza por u$s7.800 millones acumulada en los últimos dos meses, que no lograron aplacar la alta volatilidad de los mercados.

En resumen, el billete estadounidense mayorista avanzó 32 centavos respecto a la jornada previa para cerrar a $22,72, en una plaza en la que el volumen total negociado fue de u$s790,5 millones, un incremento de 12% respecto a la previa. 

Igualmente, cabe recordar que durante la rueda del martes valor máximo histórico intradiario al que llegó fue de $23,40 para la venta.

Según operadores, el Banco Central volvió a apelar a la estrategia que comenzó en la jornada previa de intervenir en los mercados de futuros para mantener controlada la cotización de la divisa estadounidense.

El incremento de la jornada en el valor de la divisa se debió, por un lado, a la escasa oferta tanto de exportadores como de bancos. En este último caso "bajaron sus posiciones en la divisa, de acuerdo a lo exigido por el BCRA el 4 de mayo pasado", indicó Fernando Izzo de ABC Cambios."La demanda por cobertura impulsó la tercera suba de la semana, aunque todavía sin poder alcanzar nuevamente los $23 por unidad", resumió el operador Gustavo Quintana de PR Cambios.

Y agregó: "El derrape de monedas regionales contribuyó para acentuar la presión sobre el mercado cambiario local en otra rueda condimentada por incertidumbre local e internacional".

Por su parte, en el segmento minorista el precio de la divisa estadounidense subió 23 centavos hasta los $23,13 en promedio para la punta vendedora, según el relevamiento realizado por el BCRA en la City.

En el Banco Nación la cotización al público trepó unos 30 centavos hasta los $22,30 para la compra y $23,10 para la venta.

El precio máximo convalidado en el cierre por las entidades fue de $23,30 en el ICBC, seguido por los $23,20 del Galicia y los $23,19 del BBVA Francés.

Desde la plaza informal, el blue se negoció con un aumento de 45 centavos a $23,15, su referencia máxima histórica, por lo que se ubicó apenas dos centavos por encima del promedio oficial minorista.

Cabe recordar que el martes el Banco Central retornó al mercado de futuros, repartiendo su postura entre las dos plazas que operan aquí esos instrumentos (Rofex y MAE), las que se concentraron básicamente sobre los contratos a vencer a fin de mes y a fin de junio, con operaciones realizadas por la entidad monetaria por el equivalente a unos u$s400 millones, poco menos del 40% del total negociado en el día.

Estas operatorias sirven para proteger a los bancos, empresas e importadores que requieren adquirir divisas en fechas determinadas para cumplir con compromisos de pagos, por lo que pueden "comprar" contratos por billetes verdes a determinado plazo asegurándose un precio, que en caso de variar en la fecha que los precisen deberán abonar o recibir la diferencia en pesos del convenio realizado originalmente.

Con esas incursiones logró un efecto analgésico sobre la plaza. "Logró su cometido de dosificar el alza de la divisa, utilizando esta vez únicamente pesos y en poca cantidad, porque al comprar contratos de dólar a futuro solo debe pagar el 10% de la posición, y luego va liquidando la diferencia para compensar", explicaron a iProfesional en la corredora ABC Cambios.

Así, en el mercado de futuros del Rofex se negoció un total de u$s1.106 millones, de los cuales más del 75% se operó para fin de mayo, que cotizó a $23,10, con una tasa de 28,1%. Y para fines de junio el valor resultante fue a $23,85, y el más extenso fue julio a $24,50.

En general, los precios pactados en los diferentes plazos subieron más de 20 centavos, acompañando la suba del spot, aunque no en su totalidad (escaló 32 centavos).

Para los operadores, la utilización de este instrumento tiene ciertos justificativos.

"Bienvenida la recuperación de una herramienta de política cambiaria que usan casi todos los bancos centrales del mundo. Son muy pocos los que intervienen con efectivo. La participación del BCRA puede ayudar a realinear las tasas de los futuros con las tasas de interés en pesos, lo que sería muy positivo", evaluó Agustín Álvarez, de GL Capital.

"Esto lo libera de la restricción que podían imponerle las reservas líquidas. Además, vendiendo a tasas por debajo de aquellas a las que se operan las Lebac puede lograr que el mercado no solo deje de demandar dólares, sino que salga a vender algunos dólares para comprar Lebac y cubrirse con futuros", valoró el analista Miguel Zielonka, director de la consultora EconViews.

Justamente, por el lado del mercado secundario de las Lebac, al plazo de 7 días la tasa convalidada fue de 42,50%, la de 43 días al 42% y a 133 días la renta fue de 40% anual.El volumen negociado cayó 60% respecto a la rueda del martes, ya que se registró un equivalente en pesos de u$s260 millones.

Además, este miércoles el Gobierno licitará tres tipos de Letras en dólares a los plazos de 140, 189 y 259 días, que se pueden adquirir también en pesos al tipo de cambio de referencia de la fecha del BCRA (C.3500), que fue de $22,57.