iProfesional

Ley corta: Telecom pegó el faltazo, Telecentro fue contra todos y la discusión quedó para la próxima semana

Hay cinco propuestas para consensuar. Se sumarán, además, aportes de Diputados para acordar desde ahora y que el dictamen avance más fácil en esa cámara
24/05/2018 - 07:10hs
Ley corta: Telecom pegó el faltazo, Telecentro fue contra todos y la discusión quedó para la próxima semana

El dictamen de la llamada "ley corta", orientada a acelerar las inversiones en telecomunicaciones deberá esperar. Después de haberse efectuado la última ronda de consultas con Telefónica, Telecentro y los sindicatos este miércoles, en la comisión de Medios, Sistemas y Libertad de Expresión del Senado se pasó a un cuarto intermedio hasta la semana que viene. En estos se verá si es posible consensuar un único texto que integre las distintas propuestas elevadas en estos días.

Sucede que al texto original enviado por el Ejecutivo a principios de abril, cuando ingresó la iniciativa en este espacio, se le sumaron, a esta altura, unas cinco propuestas más, a las que se agregarán, además, los comentarios que también en estos días llegarán desde la comisión de medios de Diputados, a cargo de Juan Brugge. La cuestión de la compartición de infraestructura y el espectro serán los dos aspectos principales sobre los que se encontrar acuerdos dadas la disparidad de visiones.

El dictamen que se pretendía alcanzar este miércoles no logró acordarse, en definitiva, pese a que, al igual que en oportunidades anteriores, hubo quórum para avanzar en la discusión. Pero las posturas diversas presentadas por los distintos actores obligaron a que el deseo del oficialismo debiera postergarse.

En el Ministerio de Modernización parece haber ceños fruncidos por lo sucedido en el ámbito legislativo. Aunque fuentes consultadas señalaron que no hay ningún motivo técnico para que la ley no salga, y que es la política la que tiene que resolver la salida de esta norma.

En el último encuentro Telefónica y Telecentro fueron los que se pronunciaron en términos absolutamente dispares respecto de la ley corta. Telecom había sido invitado pero nadie de esa compañía asistió. Mientras desde la filial argentina de la española consideraron que la norma propuesta es positiva aunque no resuelve todos los problemas que plantea la convergencia, desde la empresa local dijeron, directamente, que no quieren ninguna "ley corta", porque eso significará la muerte del mercado de la televisión paga.

Telecentro es el jugador que más renuente se muestra al avance de esta iniciativa. En la exposición dejó en claro que descree de cualquier proyecto que tienda a acelerar inversiones y a incrementar la competencia porque, además de ser "insensible" significará la "desaparición de 700 empresas pyme y cooperativas" de telecomunicaciones.

"Bajo ningún punto de vista se las habilite para que puedan iluminar todo el país a través d el satélite para dar tv de pago porque esto no significa inversiones como se está diciendo, para nada. Esto es borrar lo que este propio gobierno ratificó y profundizó hace poco más de dos años. En ese aspecto esta norma es absolutamente insensible al futuro de más de 700 empresas, operadoras de televisión de pago y otros servicios", aseveró Juan Zúccoli, director de asuntos legales de Telecentro.

El directivo subrayó que lo impulsado sólo incrementará el poder oligopólico que tienen las tres grandes jugadoras y que, más allá de lo que se declame en favor de otorgarles espectro radioeléctrico o los pequeños actores del sector, eso nunca sucederá porque ellos pidieron en varias oportunidades frecuencias y siempre se les negó.

"Nos preocupa mucho esta ley. Esta ley no ve el problema de fondo, está hecha para favorecer directamente a las empresas prestadoras de servicios de comunicaciones móviles", agregó.

En ese sentido, sostuvo que la compañía ha atravesado "penurias" en su intención por ser Operador Móvil Virtual (OMV) "Hemos pasado por penurias. Me ha tocado participar directamente de las negociaciones, que ninguna de la tres empresas oligopólicas de comunciaciones móviles se dignó a aceptar nuestras ofertas para poder convertirnos en OMV hace ya casi 3 años".

Por su parte, Alejandro Lastra, director de Relaciones Institucionales de Telefónica, además de destacar que ven positiva la iniciativa para avanzar en compartición de infraestructura y, así, impulsar el desarrollo de redes, que es necesario acelerar la distribución de espectro.

En ese sentido, enfatizó la necesidad de que el Estado avance en la definición de un plan nacional de espectro, que permita conocer a los operadores qué bandas estarán disponibles hacia adelante y en qué plazos, con el objetivo de planificar inversiones futuras. El Plan de Espectro es una de las deudas del Gobierno. De hecho, en el decreto 1340/2016 estableció que ese cronograma estaría definido a los seis meses de emitido ese texto, pero aún no ha cumplido con su propia promesa.

Por otra parte, y en relación a los contenidos, propuso diferenciar entre la producción de contenidos y la distribución. Consideró que es necesario avanzar sobre las obligaciones del must carry (para emisión de contenidos) aunque también se deben considerar los must offer, es decir, quiénes son los que ofrecen esos productos.

"Hay que distinguir la producción de la distribución de contenidos. Hay que pensar cómo incentivamos la producción local de contenidos, independientemente de la cadena de distribución", apuntó Lastra. El ejecutivo debió responder varias de las preguntas de los senadores, incluyendo algunas que hubiese correspondido hacerles a los responsables de los organismos reguladores más que a las compañías, hecho que a veces deja en evidencia la falta de conocimiento que, sobre el funcionamiento del sector, tienen los responsables de tomar decisiones en el ámbito legislativo.

Uno de los puntos sobre los que más tendrán que trabajar los senadores es el relacionado con la compartición de infraestructura porque hay diversas posturas relacionadas con los precios a los que se arrendarán esos activos, sean postes, ductos u otros recursos.

Sucede que, al proyecto inicial del Ejecutivo, se sumaron un nuevo texto de parte del presidente de la comisión de medios, Alfredo Luenzo, del senador Daniel Lovera, de su par Norma Durango, de Federico Pinedo, además de un nuevo borrador que habría acercado el oficialismo y de una propuesta que acercará la senadora Ana Almirón.

"Hay varias cosas por pulir", señalaron fuentes relacionadas con la comisión de medios. Mientras en el proyecto original del Gobierno se expresa que la compartición de infraestructura será obligatoria, el texto de Luenzo fija la posibilidad de avanzar en esa compartición a título oneroso o gratuito.

Para algunos referentes el problema es si, en caso de avanzar con el cobro de un canon, cuál será el valor de referencia porque, interpretan, si queda librado a la libre negociación entre las partes podrían generarse nuevas distorsiones en el mercado.

Este aspecto ya está siendo analizado, inclusive, por la comisión de Comunicaciones e Informática de Diputados, que tomó cartas en el asunto a partir de su presidente, Juan Brugge, para hacer en esta instancia otras propuestas que sean tomadas en cuenta por la comisión del Senado y, así, tener prácticamente listo el proyecto de ley.

"Por un lado, veremos que el uso de los servicios provinciales y municipales tengan un límite de uso a fin de que las compañías que los empleen creen su propia infraestructura", dijo a iProfesional el propio Brugge.

El diputado sostuvo que el objetivo es que en el texto que salga de la comisión del senado haya suficientes precisiones como para no dejar todo librado ni al azar ni a la reglamentación. "Es una ley sensible y lo que pretendemos es que cuando salga de la comisión del Senado venga lo suficientemente trabajada como para avanzar", apuntó. El diputado dejó claro que hay voluntad de aprobar la iniciativa en el marco del incentivo al despliegue de infraestructura.

Pero aclaró que habrá que prestar atención a las consideraciones que se tengan tanto respecto de los operadores que están ofreciendo servicios en los distintos mercados, muchos de ellos con inversiones propias sostenidas durante muchos años, como de los que entren, que también necesitan de nuevas condiciones para poder generar competencia.

Una definición de que, si bien se busca impulsar inversiones, las cuestiones que entran en juego generan conflictos que buscarán dirimirse en los próximos días.