Volkswagen y el I.D. R Pikes Peak han hecho historia en la mí­tica competencia Pikes Peak International Hill Climb.

Se trata de una competencia de con un recorrido de 19,99 kilómetros, donde hay 156 curvas. El mismo se lleva a cabo desde 1916 y se han realizado un total de 96 encuentros.

En el caso de Volkswagen, debutó con el I.D. R Pikes Peak, el precursor deportivo de la familia I.D.. 

Al volante del eléctrico de 680 CV se encontraba el piloto Romain Dumas, quien logró derrotar a los rivales, entre los que habí­a vehí­culos con tecnologí­a de propulsión convencional y otros eléctricos.

Al hacerlo, no solo rompió el anterior récord de vehí­culos con nuevas tecnologí­as, sino que también mejoró el récord global obtenido por Sébastien Loeb en 2013 - con un total de 16 segundos menos.

El nuevo récord de Dumas, con 7m 57,148s minutos, le sitúa ahora en cabeza de la lista de campeones de Pikes Peak, que incluye pilotos tan aclamados como Loeb, Walter Rí¶hr, Michèle Mouton, Stig Blomqvist o Nobuhiro Tajima , así­ como Rod Millen y su hijo Rhys.

Con el I.D. R Pikes Peak, Volkswagen ha creado un coche de carreras extraordinario, especí­ficamente ajustado a las exigencias de la carrera de montaña más famosa: una combinación de peso mí­nimo, la mayor carga aerodinámica posible y máxima potencia pensada para lograr el mejor rendimiento posible.

Incluyendo sus baterí­as, el I.D. R Pikes Peak pesa menos de 1.100 kilogramos.

Durante la evaluación de su rendimiento, Volkswagen utilizó software de simulación para calcular cómo lograr una demanda de energí­a y un rendimiento óptimos para el intento de batir el récord en Pikes Peak.

A nivel de aerodinámica, la clave fue compensar la pérdida de carga aerodinámica causada por el aire enrarecido de Pikes Peak. El resultado de este esfuerzo pudo verse desde lejos: un chasis plano y aerodinámico y un enorme alerón trasero que le permitieron, junto a la habilidad del piloto, resaltar en la competencia.