La Agencia de Recaudación de la provincia de Buenos Aires (ARBA) denunció a 73 empresas que actuaban como agentes de recaudación del fisco bonaerense y retenían fondos de contribuyentes como pago a cuenta del Impuesto sobre los Ingresos Brutos, pero luego no los presentaban.

"Se apropiaron indebidamente de impuestos por un monto que, en conjunto, supera los $102 millones", señaló Gastón Fossati, director de ARBA, que radicó las denuncias en los departamentos judiciales bonaerenses respectivos al domicilio donde desarrolla su negocio cada una de las firmas sospechadas.

Este delito está tipificado en el régimen penal tributario que establece condenas de prisión de entre dos y seis años. Para combatirlo, el ente recaudador de la provincia de Buenos Aires había firmado un convenio de colaboración con la Procuración General de la Suprema Corte de Justicia bonaerense.

El objetivo fue promover programas de capacitación para agentes públicos de ambos organismos, la modernización de procesos, la coordinación de acciones y el desarrollo de proyectos de investigación conjuntos. Por otra parte, ARBA creó una dependencia específica dentro del área de Asuntos Jurídicos y redefinió sus procedimientos para dinamizar las denuncias.

"Estos cambios nos posibilitaron quintuplicar durante el último año los montos reclamados en el marco de delitos tributarios, y agilizar de esa forma la restitución de recursos que pertenecen a todos los vecinos de la Provincia", explicó Fossati.