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Empresarios españoles temen expropiaciones chavistas

Las inversiones superan los u$s2.400 M desde que Chávez llegó al poder en 1999. Entre las empresas se destacan Repsol YPF, Telefónica, Santander y BBVA
16/11/2007 - 13:30hs
Empresarios españoles temen expropiaciones chavistas

El senador del PSOE, Cándido Rodrí­guez Losada, admite la inquietud de las compañí­as españolas en Venezuela por las posibles consecuencias de la reforma constitucional y del "incidente" entre Chávez y el Rey en la Cumbre Iberoamericana.

Los empresarios españoles con intereses en Venezuela están "preocupados". Primero, por las consecuencias que puede tener el enfrentamiento entre el Rey y el presidente venezolano, Hugo Chávez, en la Cumbre Iberoamericana. Y segundo, por lo que puede ocurrir tras el referéndum que se celebrará en el paí­s el 2 de diciembre, en el que Chávez pretende aprobar una reforma constitucional que refuerce su autoridad y le permita perpetuarse en el poder.

El texto también abre la ví­a a la expropiación de la propiedad privada, lo que inquieta a los empresarios, que tiene "esperanza" de que esto no sea así­, según informa Expansión.com de Madrid.

Así­ lo asegura Cándido Rodrí­guez Losada, presidente de la Asociación de Empresarios Gallegos en Venezuela –que agrupa a 300 compañí­as– y miembro de la junta directiva de la Cámara de Comercio e Industria española en Caracas, además de senador socialista por Ourense.

Pese a que admite la "preocupación" de los empresarios españoles afincados en Venezuela por el incidente diplomático y la posterior amenaza de Hugo Chávez a las compañí­as españolas, Rodrí­guez Losada asegura que están "tranquilos porque es un problema más polí­tico que económico y las empresas españolas en Venezuela pueden ser sometidas a una revisión (el término que empleó el mandatario venezolano) sin ningún problema".

No obstante, reconoce que es el primer tema que abordan en las reuniones que las compañí­as mantienen estos dí­as. Lí­nea oficial

El senador socialista por Ourense intenta quitarle hierro a lo sucedido y mantener un tono suave, en la lí­nea de lo que están haciendo el Gobierno y el Ministerio de Asuntos Exteriores. No obstante, confí­a en que "las relaciones entre España y Venezuela se normalicen" para evitar que la "crispación" afecte a las compañí­as españolas. "Evidentemente esto tiene incidencia. No se puede negar que afecta al ánimo de las personas y nos preocupa", añade en declaraciones a ese medio español.

Este gallego, con un marcado acento venezolano fruto de los 43 años que lleva en el paí­s, asegura que los empresarios españoles a los que representa allí­ "no temen por sus inversiones" y se sienten "respaldados por el Gobierno y el cuerpo diplomático".

"La polí­tica exterior del Gobierno de Zapatero es impecable y acertadí­sima", afirma con rotundidad el senador socialista. Y, precisamente, la diplomática es la ví­a que él considera que debe emplearse para resolver el "incidente". Sostiene que endurecer la postura y "llamar a consultas al embajador en Caracas no serí­a positivo" para los 300.000 españoles que viven en Venezuela.

Aunque en todo momento trata de evitar la polémica y contemporiza la defensa de los intereses españoles con una suave crí­tica al Gobierno de Chávez, sí­ que niega con energí­a que los empresarios de nuestro paí­s estuvieran detrás del golpe de Estado de 2002, como insinuó el mandatario venezolano. "No tuvimos nada que ver", declara.

También asegura que no tiene constancia de que haya empresarios pensando en abandonar el paí­s por la amenaza de expropiación que se cierne sobre ellos. A esta situación contrapone la buena marcha de las compañí­as.La inversión española en Venezuela, uno de los últimos paí­ses de Latinoamérica a los que se dirigió, se incrementó notablemente después de 1996. En concreto, las firmas hispanas han invertido 1.704,1 millones de euros desde que Hugo Chávez llegó al poder, en 1999, según el Consejo Superior de Cámaras de Comercio. Santander, BBVA, Repsol, Telefónica y Mapfre han liderado los flujos de capital bruto español.

La mayor intensidad inversora se produjo en 2001, cuando se disparó hasta 1.150 millones de euros, un 942% más que el año anterior. Esta tendencia se truncó a comienzos de este año, en el primer semestre, apenas totalizaron 6,6 millones de euros. En los últimos años, la inversión se ha dirigido, además del sector bancario, seguro y energético, a la hostelerí­a, la gestión del agua, sector eléctrico y editorial. A continuación, algunas de las empresas españolas con mayor presencia en Venezuela.Fuerte presencia

  • Repsol YPF, la petrolera hispano-argentina sufrió los efectos de la renacionalización parcial del sector energético introducida por Hugo Chávez. A diferencia de hace unos años, en los que era propietario de sus actividades de exploración y producción en Venezuela, ahora las tiene que compartir al 50% con el grupo estatal del paí­s. Repsol ha sido una de las pocas petroleras que se ha adaptado a esta situación aun a costa de que le afecte a sus niveles de producción.
  • Telefónica, la compañí­a que preside César Alierta es el primer operador de móviles en Venezuela, mercado en el que compite con Cantv, recientemente renacionalizada por Chávez. Venezuela es el segundo mercado para Telefónica en Latinoamércia, por detrás de Brasil. Le supone el 4% de los ingresos (1.704 millones de euros hasta septiembre) y el 4% del Ebitda.
  • Santander controla el tercer banco de Venezuela por activos, el Banco Santander Venezuela. Obtuvo en el paí­s un beneficio neto de 118 millones de euros, lo que representa apenas un 2,3% de sus ganancias totales.
  •  BBVA posee el cuarto banco de Venezuela por activos, el Banco Provincial. Le aportó 64 millones, un 1,9% de su beneficio recurrente –excluidas las plusvalí­as–.

Entre Madrid y Caracas

Cándido Rodrí­guez Losada es conocido como el senador de la emigración. El motivo: vive en Caracas, pero ocupa un escaño en la Cámara Alta española tras ser elegido senador por Ourense en 2004. Un hecho que lo obliga a coger un avión dos veces al mes para asistir a los Plenos. Pero no sólo eso, Rodrí­guez Losada –Celanova (Ourense), 1946– tuvo que dejar la presidencia del Banco Occidental de Descuento, el cuarto banco de Venezuela, para acceder a la petición de Touriño de que fuera senador.

Economista y auditor ejerce ahora la profesión en una firma de servicios que ostenta en Caracas, junto a varios socios. Además, preside la Asociación de Empresarios Gallegos en Venezuela y está en la directiva de la Cámara de Comercio e Industria española en Caracas.