La presidenta Cristina Fernández de Kirchner puso en marcha en programa "Más y mejor trabajo", que apunta a capacitar a más de 600 mil jóvenes que actualmente se encuentran desocupados.

"Si me pidieran que definiera con una sola palabra el gobierno que se inició el 25 de mayo de 2003, elegirí­a sin dudar la palabra ’trabajo’ porque aquí­ no hablamos de ’changas’ sino del instrumento que dignifica al hombre", aseguró la presidenta al encabezar este jueves por la tarde un acto en Casa de Gobierno, junto con el ministro de Trabajo, Carlos Tomada y del que también tomó parte el titular de la Confederación General del Trabajo (CGT), Hugo Moyano.

"Si tuviera que elegir destinatarios de este modelo polí­tico, social y económico, tampoco dudarí­a: los jóvenes", remarcó Cristina, para luego asegurar que "no estamos hablando de changas como en la década del 90, sino del trabajo que dignifica al hombre y la mujer y le permite promocionarse y ascender en su calidad de vida".

Así­, la Presidenta conjugó el objetivo y los destinatarios del programa "Jóvenes con más y mejor trabajo. Capacitación y Empleo para la inserción social", el plan que busca que unos 600 mil jóvenes accedan "a actividades de orientación profesional".

Durante el acto, Tomada dijo que "la medida más urgente en materia de empleo es dar una respuesta a los jóvenes".

En base a los números que maneja la cartera laboral, los jóvenes son los más afectados por el desempleo debido a que uno de cada tres desocupados son personas menores de 24 años.

El plan abarcará a 250 municipios y a todas las provincias; 500 instituciones de formación profesional; 700 ONG; 6 mil empresas, con un presupuesto de 600 millones de pesos integrados con aportes del Tesoro nacional y un préstamo del Banco Mundial.

En tanto, el secretario de Empleo, Enrique Deibe, dijo que ahora los préstamos "del Banco Mundial se destinan a crecer y no a modelos de ajuste como en otros tiempos".

Deibe enfatizó que el plan buscará la "alfabetización digital" de los jóvenes entre 18 y 24 años, con este plan planteado a tres años para lograra "más y mejor trabajo".

Tomada consideró como "una buena señal" la presencia de empresarios en el salón Sur de Casa Rosada, en apoyo a su convocatoria para intentar moderar la situación de 220 mil jóvenes que buscan empleo y de los 380 mil que están actualmente inactivos, según datos oficiales.

El secretario de Empleo puntualizó que los pasos para los jóvenes contemplado en el plan son "convocatoria; información; orientación/formación general y profesional; prácticas calificantes e intermediación laboral".

Los jóvenes que accedan al plan recibirán un pago por mes de entre 50 y 225 pesos. Los beneficiarios realizarán cursos de acuerdo a las aptitudes personas y las necesidades de las empresas de la zona donde residan los que participan del plan.

El plan también prevé brindar un servicio de intermediación laboral, brindando apoyo en la búsqueda de un empleo o para emprendimientos que deseen llevar adelante los jóvenes beneficiarios.

El ministro Tomada conceptualizó el papel del Estado en el programa como "el puente entre las empresas que necesitan mano de obra calificada y aquellos jóvenes que pueden trabajar y quieren capacitarse". Y resaltó la importancia de "colocar al trabajo como el centro de las decisiones polí­ticas".

"Hemos puesto en marcha algo que estaba siendo demandado y planteado desde la propia sociedad que es atender el problema del empleo de los jóvenes", afirmó este viernes Tomada en declaraciones radiales.

De acuerdo con la cartera laboral, y según datos elaborados sobre la base de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) que realiza el Instituto Nacional de Estadí­stica y Censos (INDEC), los jóvenes es el segmento con la más alta tasa de desocupación y el que menos progresó desde la reactivación económica.