En el grupo de renta fija de Morgan Stanley, Lauren Imparato vestí­a trajes de ejecutiva y vendí­a divisas a los fondos de cobertura de riesgo en Europa, Asia y América Latina. Ahora pasa los dí­as en pantalones ajustados marca Lululemon, impartiendo clases de yoga a sus ex colegas de Wall Street.

Tras siete años en el mundo de las finanzas, con una temporada en Londres y un ascenso reciente, Imparato abandonó su trabajo en abril para establecer una marca comercial centrada en el yoga: I.AM.YOU.

"Quiero que todo el mundo vea que uno puede tomar vino y comer comida buena y venir a las clases de yoga al dí­a siguiente sin ningún problema", dijo. Y añadió: "No hay que convertirse en vegetariano para practicar el yoga".

Según publica Bloomerg, Imparato, de 28 años, está aprovechando el atractivo creciente del yoga entre intermediarios y operadores financieros, centrados en los resultados, que quieren aliviar el estrés y hacer ejercicios al mismo tiempo. Ciertos fondos de cobertura, como Karsch Capital Management LP y Blue Ridge Capital LLC, ofrecen clases de yoga en la propia sede a sus empleados. Bill Gross, de Pimco, ha dicho que se le ocurren algunas de sus mejores ideas financieras cuando está patas arriba, destaca Bloomberg.

"Más y más profesionales de las finanzas se sienten atraí­dos por el yoga", señaló Michael Wald, cofundador de Namaste New York, firma que tiene instructores de yoga en más de 20 bancos y fondos de cobertura. "Trabajan en un ambiente muy tenso. El propósito del yoga es calmar la mente y relajar el sistema nervioso", añadió.Analistas y actoresLas dos clases semanales de Imparato han atraí­do a operadores y analistas de Merrill Lynch, Barclays Capital, Morgan Stanley y Goldman Sachs. También hay gestores y negociantes de fondos de cobertura, ejecutivos de firmas de capital riesgo, diseñadores de joyas y actores, contó la instructora.

Imparato aborda la antigua doctrina desde una perspectiva cosmopolita: imparte clases de yoga atlético con un fondo musical mixto de salsa, Notorious BIG, Frank Sinatra y Aerosmith.El estudio de yoga está en medio de su amplio apartamento tipo "loft", en un piso superior de un edificio en una calle concurrida del barrio italiano de Manhattan. Al llegar, los estudiantes se encuentran con filas de colchones negros, humo de incienso, muebles modernistas y paredes de ladrillo decoradas con obras de arte contemporáneo.

Imparato tiene cabida para hasta 25 personas, cada una de las cuales paga u$s20 por sesión, concluye Bloomerg.