El interés de quienes coordinan las acciones de la feria "La Salada" –ubicada en el partido bonaerense de Lomas de Zamora– de replicar el modelo en diversos puntos del interior ya enciende la más cruda de las resistencias en ciudades de provincias como Buenos Aires, Santa Fe, Salta, Jujuy, Catamarca, y distintos puntos del Noreste argentino.

A partir de una estructura en forma de red –que los empresarios del sector definen como "Saladitas"– esta polémica propuesta comercial cuenta en la actualidad con "sucursales" en Juní­n, Mar del Plata, el área del Gran Rosario, y en diversas localidades de los territorios del centro y norte del paí­s antes mencionados. En breve, se prevé que sumará presencia en Olavarrí­a, Alberti y 25 de Mayo.

En paralelo a la expansión fí­sica de los puestos de venta, los comerciantes que operan en el paseo de compras (bautizado oficialmente como "Punta Mogote") también promueven la comercialización de productos a través de portales de Internet. Las páginas www.FeriaSalada.com.ar y www.MercadoLaSalada.com son muestras de cómo la potencia económica del emprendimiento supera todas las fronteras.

La intención de quienes avalan la propuesta es la de llegar a más distritos en el transcurso de este mes, pero se encontraron con la resistencia de los comerciantes de ciudades como Dolores, Trenque Lauquen, Bragado, Carlos Casares, 9 de Julio, y Pehuajó, entre otras.

Envueltos en una estrategia direccionada al reclamo permanente de ordenanzas que limiten la instalación de "Saladitas", los pequeños y medianos empresarios de estas localidades sostienen una resistencia que no ocultan, y confí­an en que la misma haga que estos emplazamientos tengan las horas contadas.Ejercicio ilegal del comercio, evasión de impuestos, mala calidad de los productos, y nula tendencia a la creación de nuevos puestos de trabajo son algunos de los argumentos que enarbolan los comerciantes al momento de rechazar a la feria.

A la par de todo esto, alegan que estas radicaciones "terminarán por exterminar el comercio local, y además sentarán las bases para la proliferación de flagelos como la delincuencia y la inseguridad", como aseguró a iProfesional.com un empresario de Olavarrí­a.

Este temor también gana en tamaño, semana a semana, a partir de las caracterí­sticas y los números que mueve la sede central de "La Salada". Considerada por la Unión Europea (UE) como la feria de mercaderí­a falsificada más grande del planeta, esta conjunción de 15.000 puestos de venta de ropa, discos, pelí­culas y calzado distribuidos en una superficie de 20 hectáreas, moviliza unos u$s9 millones por semana, según los propios cálculos de la UE.

"La Salada", en su base de Lomas de Zamora, opera bajo un régimen de horarios y jornadas de apertura que siempre son rotativos. Normalmente, la feria –que inició sus actividades en 1992– abre sus puertas dos dí­as a la semana pasadas las 4 de la mañana.

"Estamos muy preocupados por este tema. A este modelo de gestión, al que al principio no se le dio importancia por ser un mercado mayorista marginal, ahora ya tiene efectos macroeconómicos. ‘La Salada’ moviliza más de 500 colectivos cada vez que abre, y desde ahí­ se están proveyendo de productos ilegales a todo el paí­s", explicó a iProfesional.com Vicente Lourenzo, secretario de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).

"Ahora lo que se está haciendo es alquilar terrenos en el interior y se instalan los puestos. La mercaderí­a es ilegal, aunque algunos la disimulan bajo la forma del monotributo. Pero nadie sabe nada de la procedencia de los productos y de sus materias primas", añadió.

¿A qué responde el poder comercial de estos emprendimientos? "En principio, a que no pagan ningún impuesto", aseguró el ejecutivo. Y amplió: "No abonan IVA, como así­ tampoco Ingresos Brutos o cargas laborales por empleados en blanco. A partir de ahí­ pueden hacer descuentos de hasta el 50% en los precios. Hoy en las ‘Saladitas’ se puede conseguir un jean por menos de $40, por ejemplo".


La ofensiva en el interior
El desembarco de "La Salada" en el interior de la Argentina ya tiene ejemplos concretos. El primer caso es Juní­n, aunque según la CAME existe una "sucursal" funcionando en Mar del Plata desde hace mucho más tiempo.

"En la ciudad de Mar del Plata opera en plena peatonal San Martí­n. Se trata de una galerí­a tomada que algunos identifican como ‘Bolishopping’. Bueno, en ese lugar toda la mercaderí­a que se ofrece, está constatado, pertenece a la feria de Lomas de Zamora", precisó Lourenzo.

Alberti y 25 de Mayo son dos de los puntos donde en breve funcionará una versión local de la controvertida propuesta comercial. En Olavarrí­a, en los próximos dí­as comenzará a operar una "Saladita" en avenida Del Valle. Los impulsores hasta se dieron tiempo para el humor al momento de bautizar la feria: llevará por nombre "La Azucarada".

Carlos Martinese y Lucas Torres, socios en la radicación del emprendimiento, alegaron que el slogan responde al objetivo de "endulzar a todos los olavarrienses" con la ropa y los productos que se comercializarán en ese lugar.

"En Santa Fe se está expandiendo en las zonas marginales del Gran Rosario. Y cobra más dimensión en las áreas limí­trofes del Noreste del paí­s. Sobre todo, porque la instalación en esos espacios permite venderle al cliente extranjero", comentó el secretario de la CAME.

Salta, Jujuy y Catamarca son otros de los territorios que desde hace un tiempo cuentan con una representación local de la feria. "Ahí­ también juega la cercaní­a con la frontera. Lo que se hace es invalidar la competencia. Los que más sufren las consecuencias son los fabricantes de calzado deportivo y ropa deportiva para mujer y varón", sostuvo Lourenzo.


Las trincheras municipales
Atentos a lo que viene siendo una oleada de radicaciones en el interior de la Argentina, numerosos municipios encendieron la alarma y comenzaron a delinear polí­ticas tendientes a bloquear la instalación de "Saladitas".

En esa dirección, Bragado fue uno de los distritos que dictó normativas especí­ficas al conocerse la posibilidad de que una feria comenzara a operar en ese territorio antes de fin de año.

Mientras trabaja en una ordenanza orientada a regular la instalación de aglomeraciones de puestos de ventas, el gobierno municipal suspendió por 120 dí­as la entrega de permisos para la puesta en marcha de muestras comerciales en todo el partido mencionado.

La medida partió de una decisión común tomada por el Codenoba, el consorcio comercial que integra Bragado en conjunto con los distritos de Alberti, Carlos Casares, General Viamonte, Hipólito Irigoyen, 9 de Julio, Pehuajó y Trenque Lauquen.

"Se están elaborando modelos de ordenanzas, y el consorcio se comprometió a reenviar a todos los consejos deliberantes un modelo texto. No para prohibir, sino para que las radicaciones ocurran bajo el cumplimiento de normas de orden laboral, y también vinculadas con la higiene y la seguridad", comentó a iProfesional.com Mariano Cadierno, jefe de Proyectos Especiales de CODENOBA.

El ejecutivo sostuvo que la decisión de algunas ciudades de frenar los avales para la instalación de paseos comerciales responde, precisamente, a generar un margen hasta tanto este confeccionado un modelo de normativa capaz de regular a las "Saladitas".

"En muchos municipios no hay ordenanzas que regulen estos emprendimientos. Por eso hubo partidos como Bragado que ante eso suspendieron por 120 dí­as las instalaciones. Carlos Casares y Lincoln son otros de los lugares donde se conoció el interés por poner estas ferias", aseguró Cadierno.

Otros de los lugares que avanzó con el bloqueo es Dolores, que a través de su Concejo Deliberante pautó una inhabilitación de cuatro meses para las ferias comerciales que busquen comenzar a operar en la ciudad.

En paralelo, la Cámara de Comercio e Industria de Trenque Lauquen también informó que tratará de evitar la radicación de "sucursales" de "La Salada" en ese distrito. De acuerdo al matutino local La Opinión, la entidad elevó una serie de notas al intendente municipal con el fin de "proteger al comercio y a la comunidad".


Patricio Eleisegui
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