Los hombres se implican más en las tareas domésticas cuando su mujer tiene un empleo y un nivel de ingresos alto y las familias tienen menos hijos y cada vez más tarde, son algunas conclusiones del informe de la Fundación de las Cajas de Ahorros Panorama Social 10 realizado en España.

El reparto de las tareas en el hogar es más igualitario en las familias cuyas mujeres trabajadoras tiene un nivel de ingresos alto, aunque también es más frecuente que tengan una persona contratada para esas tareas, según las profesoras Marí­a José González y Teresa Jurado.

Ambas consideran que la incorporación de los hombres a esas tareas depende sobre todo de las caracterí­sticas de sus mujeres, consigna la agencia Efe.

La socióloga Teresa Jurado explica que la implicación es mayor cuando los hombres tienen jornadas más cortas, empleos públicos, niveles educativos altos y pocos hijos y conviven con mujeres que trabajan y tienen niveles educativos y sueldos elevados.

Además, destaca el cambio experimentado por las mujeres en la última década respecto a su incorporación en el mercado laboral y recuerda que, en 2008, el 72% de las mujeres de entre 20 y 49 años que viven en hogares con hijos están ocupadas a tiempo completo.

En tanto, la mayorí­a de los hombres de entre 25 y 50 años siguen dedicando mucho menos tiempo a las tareas domésticas que sus parejas.