Uno de los sectores más golpeados por la crisis es el tecnológico. Pero dentro de ese rubro, la electrónica es que el que recibió el mayor impacto producto de la devaluación y la apertura importadora.

Así lo destacó Ricardo Ruival, vicepresidente de la Cámara de Industrias Informáticas, Electrónica y Comunicaciones del Centro de la Argentina (Ciiecca).

La actividad está entre un 40% y un 50% por debajo de 2017, lo que refleja a las claras el golpe que implicó la actual situación económica.

“Las empresas desarrolladoras de software tienen una gran capacidad exportadora y son transversales a todos los sectores de la economía. Pero la electrónica está muy complicada. A la caída del consumo se suma una gran competencia de productos chinos, con los cuales es difícil competir. Porque la relación de precios es cinco a uno”, comparó Ruival.

En este marco, la Ciiecca impulsa la búsqueda de oportunidades en el exterior entre las empresas socias que tienen capacidad exportadora.

La apuesta es que las firmas se orienten hacia “internet de las cosas” (IOT, según su sigla en inglés), que es el desarrollo de dispositivos conectados a la web.

“Las empresas que logran transformar su propuesta de negocios hacia IOT tienen una gran salida a nivel global. También hay grandes corporaciones nacionales que compran tecnología, aprovechando la baja actividad para reordenarse”, advierte Ruival.