En el debate que se realizó el jueves en el Senado, donde se sancionó la reforma en el impuesto a las ganancias y el monotributo, hubo gran tensión sobre el final de la sesión, durante el discurso de José Mayans, jefe del bloque del Frente de Todos.

En ese momento, la vicepresidenta y titular del Senado, Cristina Fernández de Kirchner tomó la palabra, pidió a Luis Naidenoff, jefe del Interbloque de Juntos por el Cambio y del bloque de la UCR, que "discipline a su bloque".

"La verdad que a ustedes los escuchamos atentamente, digan lo que digan y hagan lo que hagan. Es de gente de bien y educada hacer lo mismo respecto al prójimo", continuó la vicepresidenta. Y reclamó: "Cállense la boca y escuchen, como nosotros nos callamos cuando ustedes hablan".

Cerca de las 21.40, Mayans había interrumpido su exposición para cuestionar a su colega Alfredo de Angeli, de Juntos por el Cambio: "Respete, no sea maleducado, por favor".

Mayans centró su exposición en una dura crítica al gobierno de Mauricio Macri. "Les molesta que yo hable porque no quieren hablar del pasado. Hicieron un desastre de la economía argentina, por eso dicen que no quieren escuchar más y que quieren hablar de la nueva etapa del Gobierno".

En ese momento, la Vicepresidenta explicó a uno de los presentes que Mayans tenía 15 minutos para hablar, por lo que podía continuar con su discurso. "Es increíble lo maleducados que son", enfatizó Fernández de Kirchner. "Los que hablan de la democracia y de la libertad no quieren escuchar lo que fue su gobierno", insistió Mayans.

En el final de su discurso, Mayans apuntó contra Naidenoff y dijo que sus reclamos al Gobierno son "una cargada, totalmente". El legislador opositor se quitó el barbijo y empezó a responderle, pero una vez que el senador por el Frente de Todos en Formosa concluyó, la titular del Senado se dirigió al senador opositor: "Naidenoff, usted dice lo que quiere del peronismo y de nosotros. Me agravian a mí cuando hablan y yo los escucho... Bueno, usted no, pero sí alguna otra u otro, y la verdad es que ustedes se comportan como barrabravas, ¿por qué hacen esas cosas? Muy maleducados. Horribles".

Dimes y diretes

Naidenoff, antes de dar a conocer el sentido de su voto, respondió: "Hay cosas peores, hay que consultarle a la gente". Tras el tenso cruce, el Senado sancionó la ley que reforma el impuesto a las Ganancias y lleva el mínimo no imponible a 150 mil pesos mensuales brutos y el cambio en el régimen de monotributo, tras un extenso debate con reproches cruzados, a pesar del consenso alcanzado sobre el tema.

Con 66 votos a favor y una abstención (Esteban Bullrich, del PRO), la Cámara alta convirtió en ley ambas iniciativas, aunque el punto central del debate fue el tema Ganancias, impulsado por el Gobierno que estima que el nuevo esquema beneficiará a cerca de 1.500.000 trabajadores y alrededor de 400 mil jubilados que actualmente tributan.

La nueva norma eleva el mínimo no imponible a 150 mil pesos brutos y, en el caso de los jubilados, comenzará a pagarse a partir de los ocho haberes mínimos y ya no de los seis, al tiempo que contempla nuevas exenciones.