Tren bala cambiará para siempre la conectividad entre dos enormes ciudades de Sudamérica
La historia ferroviaria de Sudamérica está marcada por un declive progresivo. Con el paso de las décadas, la falta de inversión estratégica, la priorización de las rutas aéreas y el auge del transporte automotor han relegado al tren, un medio que ofrece grandes ventajas en términos de volumen, sostenibilidad y eficiencia. En países como Argentina, la carencia de un servicio ferroviario moderno y extendido se sufre tanto en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) como en el resto del país, lo mismo que a nivel continental, donde la integración por rieles es prácticamente nula. Sin embargo, un proyecto monumental en Brasil promete cambiar esta narrativa, posicionando al gigante sudamericano a la vanguardia tecnológica y redefiniendo la conectividad regional.
Brasil se prepara para el proyecto ferroviario más ambicioso de su historia: el Tren de Alta Velocidad (TAV) Río-São Paulo-Campinas. Si se concreta, será el tren más rápido de Sudamérica, un símbolo de innovación y modernidad que busca descongestionar el corredor más transitado del país y acelerar la dinámica económica y social. Este tren no solo aspira a competir con el auto o el avión, sino que establecerá un nuevo estándar continental.
El TAV es un proyecto que busca saltar del actual promedio de 160 km/h de los trenes tradicionales a una velocidad máxima proyectada de 350 kilómetros por hora. Este nivel de velocidad colocaría a Brasil en la misma categoría de potencias ferroviarias mundiales como Japón, Francia y España. Más que un medio de transporte, el TAV se perfila como un símbolo de integración y un modelo de movilidad más sostenible y seguro.
TAV: Tren Bala en Brasil: los detalles del proyecto
La obra monumental de ingeniería promete conectar las dos mayores metrópolis brasileñas -Río de Janeiro y São Paulo- en un tiempo récord. Actualmente, el recorrido por ruta entre ambas ciudades lleva cerca de seis horas, mientras que el avión requiere una de vuelo más los trámites en aeropuertos: unas dos a tres horas en total.
Con la implementación del TAV, la distancia de 435 kilómetros entre Río de Janeiro y São Paulo se completará en tan solo 1 hora y 45 minutos. Este cambio de paradigma alterará radicalmente la forma en que se viaja en el sudeste brasileño, impulsando el turismo, promoviendo la reducción de la emisión de carbono y creando un corredor económico estratégico. La traza total del tren sería de 510 kilómetros e incluirá la construcción de túneles y viaductos de última generación para garantizar la estabilidad y la seguridad necesarias para operar a tan alta velocidad.
Tren Bala en Brasil: inversión, inicio de obras y fecha de operación
El proyecto, que no tiene precedentes en América del Sur, cuenta con un proceso de implementación largo. El valor de la obra es gigantesco, con una inversión estimada que varía entre u$s10.000 millones y u$s20.000 millones de dólares, provenientes de recursos públicos y privados.
Aunque el gobierno brasileño ha dado luz verde para avanzar, la construcción aún no ha comenzado. Las previsiones más recientes apuntan a un inicio de las obras para el año 2027, luego de una etapa de planificación exhaustiva. De mantenerse el cronograma, la operación comercial del Tren de Alta Velocidad (TAV) podría empezar a principios de 2032.
Si bien el recorrido inicial se limita a Brasil, conectando Río de Janeiro, São Paulo y Campinas, su éxito podría tener una dimensión continental, sirviendo de modelo e inspiración para que otros países de la región prioricen la modernización ferroviaria y la integración a alta velocidad.