La Argentina está logrando en los últimos meses una mejora importante en el desempeño comercial con respecto a su socio histórico, Brasil. Sin embargo, gran parte del superávit obtenido se explica por la crisis interna, que hizo desplomar el consumo de productos importados, lo que se agravó con la devaluación post PASO.

Según datos del Ministerio de Desarrollo, Industria y Comercio Exterior de Brasil (MDIC), la balanza comercial bilateral entre Argentina y Brasil arrojó en el mes de septiembre un superávit de u$s81 millones para la Argentina.

El saldo a favor se explica por exportaciones por un valor de u$s777 millones e importaciones por u$s696 millones. Esto significa el mayor saldo a favor desde el mes de marzo de este mismo año, cuando el superávit mensual alcanzó los u$s184 millones, señala un informe de la consultora Abeceb.

En relación con el mes de septiembre del año pasado, las importaciones argentinas desde Brasil se redujeron un -24,9% (u$s696 millones vs. u$s927 millones), y un -12,2% en comparación con el pasado mes de agosto de este mismo año (u$s793 millones). La variación interanual fue considerablemente menor al -48,7% del mes pasado, sin dejar de ser un número relevante.

Luego del shock electoral ocurrido en las elecciones primarias, el salto de tipo de cambio encarece las importaciones, generando una disminución en las mismas. Si bien muchos pedidos de agosto ya estaban realizados al momento de la elección, el impacto de la devaluación comienza a hacerse presente con mayor relevancia desde este mes de agosto. A esto se suma una gran incertidumbre por parte de los mercados que no parece disminuir en los próximos meses. Los productos con mayores caídas fueron los automóviles de pasajeros, autopartes, soja en granos y minerales de hierro.

En el acumulado de los primeros 9 meses del año, Argentina lleva importado desde Brasil u$s7.441 millones, lo cual significa una caída interanual de -40,3%, siendo que el mismo período de 2018 se habían importado u$s12.465 millones.

En cuanto a las exportaciones, en el mes de septiembre Argentina exportó a Brasil u$s777 millones, un -16,7% menos que en septiembre de 2018 y un -5,8% menos que en agosto de este mismo año. En el acumulado de 2019 se exportaron u$s7.815 millones, cuando a la misma altura del año pasado se habían exportado u$s8.213 millones, una baja del -4,8%.

La caída interanual del mes de septiembre fue considerablemente menor al -30,0% registrado el mes pasado. Al igual que en las importaciones, los vehículos automotores fueron los mayores perjudicados por estas caídas, seguidos por trigo en granos, vehículos de carga y polímeros plásticos, indica Abeceb.

Con todo esto, el superávit comercial argentino con Brasil acumula u$s374 millones en los primeros tres trimestres del 2019.

Aunque, en lo que a comercio exterior respecta, no resultan montos realmente significativos, el dato toma otra relevancia si se tiene en cuenta que Argentina fue superavitaria en 7 de los 9 meses del año (todos salvo mayo y junio) y que, en el mismo período de 2018, Brasil resultaba superavitario en la relación bilateral con Argentina, con un saldo a favor que alcanzaba los u$s4.252 millones para el país del orden y progreso. Esto significa una diferencia de saldo de u$s4.626 millones en tan solo un año.

El volumen comerciado entre ambos países cayó un -26,2% en los primeros nueve meses de 2019, comparándolo con el mismo período de 2018.

Abeceb anticipa que, en lo que resta del 2019, las circunstancias de Brasil y Argentina son disímiles.

Luego de la crisis de confianza provocada por la demora de la Ley de Reforma Previsional, una aprobación que parece inminente genera una leve recuperación brasilera, que ya está pensando en la próxima reforma estructural, la tributaria. Además, el Banco Central de Brasil aprovechó el margen de maniobra otorgado por la Reserva Federal de Estados Unidos, y disminuyó su tasa de interés a mínimos históricos, lo cual ayudaría a incentivar la actividad económica.

Argentina, por su parte, continúa con una macroeconomía que debe estar bajo un constante monitoreo, al menos hasta tener mayores certezas desde el punto de vista político.

Esto podría acrecentar aún más el superávit argentino en los últimos meses del año, gracias a una mayor demanda de importaciones por recuperación de Brasil y una menor demanda de importaciones de argentina, a la vez que las exportaciones de nuestro país son aún más favorecidas por el tipo de cambio. Sin embargo, hay que tener en cuenta que el último bimestre de 2018 ya hubo una disminución considerable de las importaciones argentinas desde Brasil, por lo que, ante una base de comparación baja, no se esperan nuevos saltos abruptos en los últimos dos meses. En lo que respecta al mes de octubre, si se espera una caída importante en las compras argentinas.