Uruguay sube la apuesta y traba más productos argentinos

El Gobierno de Tabaré Vázquez comenzó a aplicar aranceles, de manera selectiva, a productos provenientes de la Argentina con el argumento de que las importaciones estaban dañando a las empresas uruguayas.


A mediados de septiembre, el Poder Ejecutivo de ese paí­s fijó una tasa global del 10% para el ingreso de huevo pasteurizado y huevo seco desde la Argentina. A esto se sumó, hace dos semanas, un gravamen del 6% a las importaciones de expeler de soja.

Ahora, el Ministerio de Economí­a y Finanzas se dispone aprobar un decreto que impone una tasa arancelaria para la importación de harina desde Argentina. La iniciativa ya cuenta con el visto bueno de los ministerios de Industria y Ganaderí­a, Agricultura y Pesca, dijeron ayer a El Paí­s fuentes de gobierno.

Los funcionarios consultados por ese medio dijeron que se está viendo un aumento en las importaciones de productos argentinos, especialmente en el sector de alimentos.

A la vez, agregaron, persisten las trabas de la administración Kirchner a entrada de productos uruguayos. Esto se hace evidente en el caso de vestimenta. Según la visión de la prensa uruguaya, con el pretexto de proteger el mercado interno de las importaciones chinas, Argentina también traba las importaciones desde Uruguay.

En 2007, el gobierno argentino colocó estas importaciones en el llamado canal rojo de la Aduana. De esta manera impone una traba no arancelaria al exigir mayores trámites y controles para ingresar al paí­s, según El Paí­s.

La medida conflictiva
La aplicación de la tasa global arancelaria a productos argentinos subsidiados está amparada por un decreto de noviembre de 2006.

Esta norma permite aplicar una tasa de hasta 10% a los productos elaborados en zonas de promoción económica en Argentina o que las exportaciones de esos bienes y sus principales insumos tengan retenciones equivalentes al menos al 20%.

Para los técnicos oficiales el déficit comercial con Argentina se ha ido acentuando en forma sostenida. "No son grandes números pero es como un goteo", expresó un jerarca, quien aseguró que los productos alimenticios argentinos están ganando presencia en el mercado local.

El sábado El Observador informó que la Cámara Industrial de Alimentos solicitará a Economí­a que eleve "al menos 25%" el arancel de importación para los bienes argentinos que tengan harina como insumo.

Descartan connotaciones polí­ticas
Tal como informara recientemente infobaeprofesional.com, si bien en su momento la noticia causó impacto a raí­z de la complicada coyuntura que atravesaban –y atraviesan- ambos paí­ses con el tema de las pasteras, según el análisis de la consultora Abeceb.com, "esta medida está en lí­nea con el pedido que tanto Uruguay como Paraguay vienen realizando al interior del bloque, en relación a la necesidad de profundizar el Mercosur y de realizar un tratamiento profundo en la cuestión de las asimetrí­as".

Desde el punto de vista de Uruguay, las retenciones son perjudiciales porque el poroto de soja o los cereales enteros tributan más que sus derivados. De esta manera, se estarí­a incentivando a la industria del crushing argentina a exportar productos con más valor agregado y, como contrapartida, la materia prima se exporta a un mayor precio, lo que va en contra de los intereses de las industrias uruguayas.

Fuentes reservadas de Cancillerí­a argentina ya aseguraron que "la medida no es aceptada por la Argentina, porque creemos que va en contra del espí­ritu del Mercosur".

Sin embargo, por el momento no hay ninguna acción pública ya que están a la espera de que se compruebe que las medidas dificultan de manera concreta a los exportadores argentinos.