Suba de retenciones agrava la crisis comercial con Uruguay
La decisión del Gobierno argentino de aumentar las alícuotas de las retenciones podría provocar un recrudecimiento de la guerra comercial "silenciosa" que se está desarrollando de manera paulatina entre la Argentina y Uruguay.
La razón es que, con el argumento de que las retenciones generan distorsiones y promueven la competencia desleal de los productos argentinos en detrimento de los uruguayos, el gobierno de Tabaré Vázquez viene penalizando desde hace dos meses a parte de las exportaciones argentinas.
De este modo, con las nuevas medidas tomadas por la administración de Néstor Kirchner, parte de los exportadores que venden a ese mercado podrían sufrir nuevas trabas.
En el caso de la soja las retenciones se incrementaron del 27,5 al 35%, en trigo la alícuota pasó del 20 al 28% y para el maíz se incrementó de 20 al 25%. La medida busca evitar que "la suba de precios internacionales tengan impacto en el mercado interno", dijo el ministro de Economía, Miguel Peirano. (Ver nota: "El Gobierno aumentó retenciones al campo: soja, hasta un 35%")
Según Raúl Ochoa, ex subsecretario de Comercio Internacional, "a partir de estas novedades, se puede esperar, dependiendo la escala de los derechos diferenciales, que Uruguay insista con la aplicación de aranceles".
Por su parte, Mauricio Claverí, economista de la consultora Abeceb.com, explicó a infobaeprofesional.com que "esto se basa en el reclamo histórico de las asimetrías porque, para los socios menores, el Mercosur ha sido muy injusto. Ellos quieren una solución pero aún no la pueden encontrar en el seno del bloque. Por eso, Uruguay toma medidas en este sentido: cuando ve un daño a su economía inmediatamente trata de ponerle un freno a la situación".
De cara al futuro, el analista aseguró que "hasta tanto no se logre un acuerde más global en el Mercosur, Uruguay va a seguir tomando medidas como estas".
"Hasta el momento, la aplicación de aranceles son toleradas por la Argentina porque se sabe que está motivada por un reclamo histórico. Uruguay tiene bastante legitimidad en este sentido", sostuvo.
Sin embargo, aseguró que "el tema de las pasteras también ha tenido un efecto considerable y terminó volcándose y derramándose en todo tipo de ámbitos bilaterales, como éste".
Medidas concretas
Hasta el momento, esta es la cronología de los hechos:
- A mediados de septiembre, el Poder Ejecutivo de ese país fijó una tasa global del 10% para el ingreso de huevo pasteurizado y huevo seco desde la Argentina.
- Promediando mitad de octubre, se aplicó un gravamen del 6% a las importaciones de expeler de soja.
- En estos momentos, el Ministerio de Economía y Finanzas se dispone a aprobar un decreto que impone una tasa arancelaria para la importación de harina desde Argentina. La iniciativa ya cuenta con el visto bueno de los ministerios de Industria y Ganadería.
- Además de estos productos, está en estudio aplicar aranceles a todos los productos argentinos que tengan como materia prima a la harina de trigo, además de otros bienes industriales.
En todos los casos, se trata de medidas basadas en el decreto del 27 de noviembre de 2006, a través del cual se facultó al gobierno para imponer tasas a una canasta conformada por 63 productos, en base a tres criterios principales:
- Por un lado, a aquellos bienes provenientes o que sean producidos por grupos económicos con plantas instaladas en alguna de las provincias beneficiadas por el régimen de promoción industrial, como San Luis, La Rioja, San Juan y Catamarca.
- En segundo lugar, la aplicación se extiende a los productos que tengan retenciones iguales o superiores al 10%, o incluso que sus insumos principales estén sujetos a retenciones de este nivel.
- Por último, otro de los justificativos es que el producto supere el 30 por ciento de market share en el mercado uruguayo.
Según un estudio de impacto realizado por la consultora Abeceb.com, el decreto podría afectar a las exportaciones argentinas por valor de al menos 52 millones de dólares.
Retenciones negativas
Desde el punto de vista de Uruguay, las retenciones son perjudiciales porque, por ejemplo, el poroto de soja tributa más la harina o los pellets.
De esta manera, se estaría incentivando a la industria del crushing argentina a exportar productos con más valor agregado y menos commodities básicos.
A esto se suma que el titular de la Cartera de Hacienda, confirmó que el Gobierno nacional va a seguir con el sistema de compensaciones para productores agropecuarios.
Para el sector público y privado uruguayo esto implica que productores de la cadena de la carne aviar, por ejemplo, accedan a materia prima fundamental a un costo más bajo que si no existiera este esquema impositivo.
"Mientras nosotros tenemos que padecer de una apreciación de nuestra moneda, la Argentina da ventajas a sus exportadores que pueden perjudicarnos", aseguró recientemente a infobaeprofesional.com Roberto Villamil, gerente de la Cámara de Industrias del Uruguay (CIU).
"Se nos está encareciendo la producción nacional mientras que aumenta el nivel de competitividad de los productos argentinos. Esto, sumado al acuerdo que tenemos en el Mercosur, es un indicador de que las importaciones desde ese país pueden crecer muy rápidamente", se quejó Villamil desde sus oficinas en Montevideo.
Juan Diego Wasilevsky
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