Se redefine el Mercosur tras el hallazgo de petróleo en Brasil

El Mercosur parece un bloque obstinado en perpetuar los contrastes y las asimetrí­as. La histórica división simplificadora en los socios grandes y pequeños promete convertirse en postal del pasado: Brasil, de concretarse los anuncios hechos por Petrobras el jueves pasado, pasará a convertirse en la verdadera potencia.


Y el juego de las diferencias continúa. Mientras que la Argentina sigue invirtiendo tiempo y fuerzas en enfrentamientos dialécticos sobre si hay o no crisis energética –el pos Coloquio de IDEA es una prueba de ello-, en Brasil su presidente Lula ya bromea afirmando que lo llaman "el magnate del petróleo" (ver nota: "Lula: Ahora me llaman el magnate petrolero").

El crudo hoy es garantí­a de poder hegemónico. Y Brasil lo tendrá en cantidades necesarias como para cambiar la situación geopolí­tica a nivel regional:

• Las reservas descubiertas en el campo marí­timo Tupi equivaldrí­an a entre 5.000 y 8.000 millones de barriles de petróleo y gas.
  
  
• Esto es igual al 50% de las reservas que ese paí­s encontró en los últimos 50 años. Estos valores lo convertirí­an en un exportador neto de petróleo a la altura de Venezuela.
  
  
• Así­, todos los analistas en estos momentos sintetizan a Brasil con una palabra: potencia (ver nota: "Petrobras transforma a Brasil en potencia petrolera").

Tal como señaló a infobaeprofesional.com Gustavo Calleja, ex subsecretario de Combustibles, "a Brasil no le interesa el costo de la exploración, quieren abastecerse para cubrirse si algún dí­a el mundo no les vende, no quieren depender de Venezuela. Ellos privilegian al futuro, quieren ser un imperio. Para Brasil, su centro es Brasil".

En tanto, Juan Carlos Pérez Llana, profesor de Relaciones Internacionales en las universidades San Andrés, Torcuato Di Tella y Siglo 21, sostuvo que "Brasil consolida su posición de lí­der entre los emergentes. Tiene una gran demografí­a y una industria consolidada que le permite exportar desde soja hasta aviones. De modo que claramente va a haber un beneficio sustancial cuando empiece a proveer al mundo con su petróleo", explicó.

Del mismo modo opinó Raúl Ochoa, asesor del Banco Interamericano de Desarrollo y ex subsecretario de Comercio Internacional, para quien "Brasil va a dar un salto hacia delante muy significativo y esto tendrá implicancias geopolí­ticas a nivel mundial".

La transformación del bloque
En este contexto, el Mercosur va a mutar a medida que Brasil pase de autosuficiente a superavitario en materia energética.

Y así­ como se pueden prever ganadores con este nuevo escenario, el petróleo brasileño también dejará una estela de perdedores en varios campos polí­ticos y económicos:

1-Se van a licuar los sueños de liderazgo petrogasí­feros del presidente venezolano, Hugo Chávez
Jorge Castro, titular del Instituto de Planeamiento Estratégico, aseguró que "este yacimiento va a consolidar esa condición de actor global y lo posicionará mejor como potencia en su disputa regional con Venezuela".

"Sin dudas se acaba la hegemoní­a venezolana", ratificó Pérez Llana.

La rivalidad entre el presidente brasileño Lula y Chávez a esta altura es histórica: antes de hace público el descubrimiento, el presidente brasileño realizó una gira por México y Centroamérica, con el etanol –una de las alternativas al petróleo- como caballito de batalla. Como contrapartida, Chávez realizó un periplo que lo trajo hasta la Argentina para comprar deuda y lo llevó por Bolivia y Ecuador para cerrar acuerdos.

La consigna bolivariana "Petróleo y gas para América del Sur y el Caribe" o la versión simplificada conocida como la "billetera de Chávez" hoy encuentran un nuevo jugador de peso que puede, incluso, torcer las fidelidades más férreas.

En este sentido, Lula reveló que Chávez ya le propuso aprovechar ese petróleo para fortalecer proyectos como Petroamérica, Petrocaribe y otros programas auspiciados por el gobierno venezolano.

Sin embargo, el presidente brasileño, con cortesí­a, dejó en claro que el futuro del crudo brasileño no tendrá el mismo tinte ideológico: "Le dije que antes de que hayamos sacado un litro de petróleo él lo habí­a socializado todo en Petrocaribe y otras cosas, entonces le pedí­ que nos deje comenzar a sacar petróleo para ver qué haremos".

2- Brasil se potenciará como un polo de recepción de inversiones extranjeras
Según Calleja, "el petróleo será un bien estratégico en los próximos 100 años" y esto es sinónimo de fuertes apuestas e inversiones.

En tanto, Pérez Llana sostuvo que, a partir de este descubrimiento, "Brasil va a sacar mucha ventaja en materia de inversiones, sobre todo a la Argentina", porque "demuestra que es un paí­s que es muy seguro para las empresas".

"Con este anuncio no me cabe la menor duda de que va a aumentar fuertemente la brecha a nivel inversiones", recalcó el especialista.

• La inversión extranjera directa (IED) en la Argentina bajó el año pasado un 4%: pasó de 5.000 millones en 2005 a un ingreso neto de 4.800 millones de dólares en 2006, según un reciente Informe sobre Inversiones en 2007 elaborado por la Conferencia de Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD).
  
  
• Como contrapartida, Brasil es el paí­s del Cono Sur con mejor captación de inversión extranjera directa no especulativa, con el 25%.
  
  
• Según Pérez Llana, Brasil no sólo continuará liderando el ingreso de inversión extranjera directa (IED), sino que incluso sacará más terreno a una Argentina que "en 2008 va a quedar detrás de Colombia, Chile y seguramente de Perú".
  
  
• De este modo, "vamos a estar en el grupo de paí­ses más chicos como Paraguay o Uruguay" (ver nota: "La Argentina no resultó atractiva para los inversores en 2006").

Al respecto, Ochoa también destacó que Brasil "ha logrado, desde 2002 hasta la fecha, la integración de un mercado de capitales muy importante. El Bovespa es una de las bolsas que más ha crecido, con fuerte participación extranjera, algo que se verá consolidado de cara al futuro".

4-Un déficit comercial creciente para la Argentina
En lo que respecta a nuestro paí­s, según Ochoa, si bien la relación con Brasil es buena, la Argentina podrí­a mostrar ahora un mayor interés por su socio comercial.

De este modo, en la próxima gestión no se repetirí­a el predecible récord de 50 pactos bilaterales que durante la era K se firmaron con Venezuela, una cifra demasiado amplia en relación a los 22 suscriptos con el gobierno de Lula.

La Argentina enfrenta un duro cambio de su matriz energética: está abandonando poco a poco el club de los paí­ses exportadores, para transformarse paulatinamente, en caso de no hallar nuevos yacimientos, en importador neto.

Mezzadri aseguró recientemente que los problemas con el gas son muy viejos, al punto que desde 1993 se observa una caí­da en la productividad por pozo y con respecto al petróleo, precisó que las reservas vienen en caí­da desde 1998.

De esta manera:

• La cantidad exportada de crudo serí­a el año que viene un 29% menor a la de 2007.
  
  
• Comparando con 2006, las exportaciones en 2008 serán 50% más bajas.
  
  
• Como contrapartida, la Argentina importa cada vez más.
  
  
• Durante los primeros nueve meses del año, el paí­s se vio obligado a comprar en el exterior combustibles y lubricantes por 2.221 M de dólares, un 60% más que el mismo perí­odo del año pasado.
  

En este sentido, genera preocupación entre los analistas:

• El riesgo de la inflación importada: el último viernes el crudo superó los u$s96 y si se mantiene esta tendencia, importar este commoditie desde Brasil va a ser un factor que minará cada vez más la polí­tica de sostenimiento de precios en el mercado interno (ver nota: "La 'inflación importada' cada vez impacta más en suba de precios").
  
  
• El shock que provocará en el superávit comercial: la Cámara de Exportadores lo ubica en 2008 en el orden de los u$s6.500 M. Esto es exactamente la mitad del saldo del que gozó la Argentina el año pasado.
  
  
• El efecto en las relaciones comerciales con Brasil: en este caso particular se parte de 53 meses de déficit comercial. Y, si se tiene en cuenta que durante los primeros nueve meses del año las importaciones argentinas de combustibles y lubricantes desde Brasil crecieron la astronómica cifra de 482% hasta totalizar u$s256 M, es de esperar que este descubrimiento por parte de Petrobras haga al déficit irreversible.
  

5-Más holgura fiscal, más gasto público y más poder
Según Natalio Kuschnir, especialista en Energí­a del Grupo Moreno, "Brasil tendrá un salto comercial enorme porque podrá subsidiar sus industrias con los excedentes que exporte, y a esto se sumará que ya es potencia militar, aeronáutica y automotriz".

De este modo:

• No tendrán dependencia del petróleo importado, tendrán precios internos competitivos de la energí­a y eso volverá más competitiva su industria en general.
  
  
• En este sentido, Pérez Llana destacó que habrá un notable aumento de los gastos destinados a adquirir armamento. "Brasil no se prepara para una guerra ni mucho menos, pero hoy por hoy el poder económico por sí­ solo no basta, hay que tener poder militar, poder de disuasión", sostuvo.
  

En este sentido:

• Brasil planea aumentar en un 50% sus gastos militares en 2008.
  
  
• Ya se embarcó en el proyecto de renovar submarinos, fabricar misiles, comprar aviones e incluso reactivar un programa nuclear.
  
  
• "Para volver a construir nuestras fábricas de material bélico tenemos que comprar", es la filosofí­a de Lula.

6-El surgimiento de nuevas alianzas estratégicas
Si con el biocombustible Brasil fue una tentación para Estados Unidos, ahora con el petróleo esperando en el fondo del mar los especialistas dan como un hecho un mayor acercamiento de la administración Bush y de las siguientes, sobre todo teniendo en cuenta los constantes roces ideológicos con el presidente Chávez.

Según datos de Nueva Mayorí­a, México se erige como el segundo proveedor de petróleo de Estados Unidos con 1,6 millones de barriles, paí­s que importa un 60% (12 millones de barriles diarios) de sus necesidades totales. En tanto que Venezuela desde el año 2006 se sitúa en el tercer lugar.

"A futuro, Brasil generará nuevas alianzas económicas y polí­ticas. El acercamiento con EEUU va a ser un tema muy importante", aseguró Ochoa.

Por otra parte, como otra muestra de liderazgo, también se suma la posibilidad de que Brasil se convierta en el tercer paí­s en pertenecer a la Organización de Paí­ses Exportadores de Petróleo (OPEP).

"Obviamente, tenemos la intención de participar en un foro en el que se pueden decidir polí­ticas para el mundo entero", declaró Lula a periodistas antes de regresar a Brasil desde Santiago de Chile, donde asistió a la XVII Cumbre Iberoamericana.

Aunque admitió que aún "falta mucho" y que eso no ocurrirá durante su gobierno, afirmó que Brasil ingresará a la OPEP con la intención de ayudar a reducir los precios del petróleo.

"Brasil va a entrar en la OPEP y obviamente peleará para que el precio del petróleo baje, porque esa es una de las contribuciones que los paí­ses ricos en petróleo pueden dar", sostuvo.

A estos acuerdos, también se sumará una mayor sinergia interempresaria y un mayor protagonismo a nivel mundial por parte de Petrobras. De hecho, Petrobras aprobó el viernes pasado la compra de una refinerí­a de crudo en Okinawa, Japón (ver nota: "Multimillonaria inversión de Petrobras en Japón").

Este establecimiento procesa 100.000 barriles de crudo por dí­a y es controlada por Exxon Mobil, con el 87,5% del paquete accionario.

La sinergia entre Petrobras y Exxon es una réplica del acercamiento que se da a nivel empresarial entre los dos paí­ses, mediante una comisión bilateral de CEO que, desde hace meses, avanzan en busca de una mayor profundización de los lazos comerciales.

Juan Diego Wasilevsky
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Ariel Bazán
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