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Argentina será el país con mayor recesión mundial en el 2020, según la OCDE

La OCDE proyecta una caída del PBI de 12,9%, la de mayor magnitud en el mundo. Expresó, además, el peso del confinamiento para la recuperación económica
01/12/2020 - 18:12hs
Argentina será el país con mayor recesión mundial en el 2020, según la OCDE

Argentina será uno de los países con mayor recesión en 2020, con una caída de 12,9%, según se informó en las Perspectivas de la Economía Mundial de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).

Para poder encontrar una recuperación más sólida e inclusiva se exigirá un refuerzo de las medidas de política encaminadas a promover la creación de empleo formal y reducir la dualidad del mercado de trabajo, evaluó el organismo. Además, recomendó "aumentar la confianza en las instituciones públicas. Entre ellas un Banco Central y un Poder Judicial independiente ayudaría también a reconstruir la tan necesaria confianza".

Asimismo, "está previsto que el PBI crezca un 3,7% en el 2021", según informó.

Caída del PBI de Argentina respecto al mundo
Caída del PBI de Argentina respecto al mundo, según la OCDE.

La cuarentena limita el ritmo de la recuperación

"La acentuación de los desequilibrios macroeconómicos y las prolongadas medidas de confinamiento cargan con la demanda interna y limitan el ritmo de recuperación, pese a una acertada reestructuración de la deuda pública con acreedores privados", detalló el informe de la OCDE.

A su vez, el empleo registró un fuerte descenso. Y por otra parte, el financiamiento monetario del elevado déficit fiscal aumenta la presión sobre la inflación y la brecha entre la tasa de cambio oficial y la paralela, continúa la OCDE.

Por lo tanto, se estima que el levantamiento gradual de las medidas de confinamiento permitirá un leve repunte del consumo privado, pero la inversión se mantendrá débil hasta que se resuelvan los desequilibrios.

Según reconoció la OCDE, se adoptaron medidas fuertes y oportunas para contener la pandemia y facilitar ayudas a hogares y empresas, pero estas actuaciones han venido a incrementar el déficit fiscal, ya de por sí elevado. Por esto, se necesitarán para reducir los desequilibrios macroeconómicos, de acuerdo a lo expresado en el informe, políticas fiscales prudentes y cambios en las políticas monetaria y cambiaria.

Para la OCDE, una vía posible sería mejorar la eficiencia del gasto público y de la recaudación, mediante una revisión de los regímenes especiales, las exenciones fiscales y las escapatorias del sistema tributario, ya que ofrece amplias posibilidades de mejorar la posición fiscal. "Es fundamental aumentar las transferencias monetarias condicionadas para reducir la pobreza y mantener los ingresos, inclusive los de los trabajadores del mercado informal", consignó.

Según el organismo, las prologadas medidas del confinamiento dejaron secuelas: "El largo confinamiento ha afectado al turismo, el ocio, la salud, los servicios sociales y personales, todos ellos sectores intensivos en mano de obra. El empleo ha caído bruscamente, en particular entre los trabajadores del mercado informal y con menor cualificación".

Todo eso pesa sobre los ingresos de los hogares y sobre el consumo privado, a pesar de algunas mejoras recientes, inclusive con respecto a bienes durables.

Variables de la economía argentina. Fuente: OCDE.
Variables de la economía argentina. Fuente: OCDE.

¿Qué pasa con la deuda, la inflación y las reservas?

Como bien dijo la OCDE, el pasado mes de septiembre, Argentina reestructuró acertadamente su deuda pública bajo legislación extranjera y local, e inició conversaciones con los acreedores multilaterales, aunque la confianza de los inversores y el acceso a los mercados de capitales siguen limitados debido a los importantes desequilibrios macroeconómicos.

Por su parte, la inflación comenzó a subir en agosto, "pese a la escasa demanda interna, y el diferencial entre la tasa de cambio oficial y la paralela sobrepasó el 100% a mediados de octubre".

En cuanto a las reservas de divisas netas del Banco Central, estas "han experimentado un rápido descenso. Las fuertes restricciones cambiarias han lastrado las importaciones, mientras que la sólida demanda de materias primas de China ha impulsado las exportaciones", expresó el informe.

Detalle de la evolución de la economía argentina, según la OCDE.
Detalle de la evolución de la economía argentina, según la OCDE.

Las políticas que protegieron a los hogares y a las empresas

La política fiscal ha brindado ayudas a hogares pobres y vulnerables mediante bonificaciones puntuales, pagos en especie y un refuerzo de las prestaciones por desempleo (1,5% del PBI).

"Las subvenciones salariales y la reducción de los impuestos sobre las remuneraciones han ayudado a algunas empresas y han compensado parcialmente los costos que comporta la prohibición general de despedir trabajadores durante 240 días", reconoció la OCDE.

Aseguró además, que esta respuesta a la crisis agravó el elevado déficit fiscal, que se financió a través de transferencias del Banco Central. Dando lugar a un aumento considerable de la oferta monetaria.

Según el informe, los anuncios recientes del gobierno "sugieren mayores esfuerzos de obtener financiamiento en el mercado doméstico y una menor dependencia del financiamiento monetario de aquí en adelante". A su vez, "se redujeron los encajes obligatorios y las pautas mínimas de provisionamiento, y se limitaron las inversiones por parte de la banca en valores del Banco Central, al tiempo que se reforzaron los incentivos al crédito".

La OCDE cree que los crecientes desequilibrios macroeconómicos ponen límites a la recuperación. Es decir, "no es probable que la inversión y la confianza de los consumidores se recuperen hasta que se resuelvan las incertidumbre macroeconómicas y remita la pandemia", se explicó.

La reciente relajación de las medidas de contención permitirá una recuperación en algunos sectores de servicios, pero el distanciamiento físico y los rebrotes locales esporádicos empañarán las perspectivas de una recuperación rápida.

La caída del mercado laboral

"El cierre de empresas y la destrucción de empleo aumentarán cuando venza el plazo de aplicación de los subsidios salariales para trabajadores del sector formal y las estrictas prohibiciones legales en vigor en materia de despidos".

Esta situación empeorará el ya elevado nivel de desempleo y la débil demanda interna. Las presiones inflacionarias se intensificarán a medida que se relajen los estrictos controles de precios y que la demanda doméstica se recupere.

El futuro del PBI

Según las proyecciones que se expresan en el informe, el PIB caerá ligeramente por debajo de un 13% en 2020, antes de comenzar a recuperarse lentamente un 3,7% y un 4,6% en 2021 y 2022 respectivamente.

"Los riesgos para estas perspectivas son, entre otros, un repunte de la inflación, puesto que la demanda de dinero podría no absorber los recientes incrementos de la oferta o podrían surgir futuras necesidades de financiamiento público".

Por otra parte, las bajas reservas internacionales comportan riesgos de una devaluación desordenada que incrementarían las presiones inflacionarias.

¿Qué nos puede aportar Brasil?

"Del lado positivo, una recuperación más rápida del vecino Brasil, un aumento de la demanda de materias primas y una tasa de cambio más competitiva podrían favorecer las exportaciones", dijo la OCDE.

El levantamiento gradual de las medidas de confinamiento debería ir acompañado de una estrategia nacional de rastreo, pruebas y aislamiento, para evitar retrocesos en la lucha contra el COVID-19.

"Una estrategia fiscal creíble a mediano plazo, centrada en mejorar la eficiencia del gasto público, al tiempo que se reducen las exenciones tributarias regresivas y los regímenes especiales, podría sentar las bases para reducir los desequilibrios macroeconómicos.

Una recuperación también exigirá un refuerzo de las medidas encaminadas a promover la creación de empleo formal y reducir la dualidad del mercado de trabajo. Se podría fortalecer el sistema de protección social, expandiendo programas existentes de transferencias monetarias, al tiempo que se reduce simultáneamente el costo de creación de puestos de trabajo formales. Este conjunto de medidas respaldaría además el ajuste estructural necesario tras la crisis", completó el informe de la OCDE.