El economista Juan Carlos de Pablo consideró que la Argentina enfrentará los últimos dos años del Gobierno de Alberto Fernández "con un poder político debilitado", que le pondrá "un techo" a la economía.

"El Gobierno no tiene ninguna chance de dar vuelta el resultado de las elecciones primarias. Entonces, vamos a tener dos años de un poder político debilitado. Y eso le da un techo a la política económica. Del techo para abajo puede pasar cualquier cosa", enfatizó.

De Pablo consideró que el Gobierno se encuentra en un "contexto de falta de credibilidad. Por ejemplo, si hoy se levantara el cepo cambiario, salimos corriendo al banco a comprar dólares, porque pensamos que esa medida no puede durar más de media hora". "Y además aparecen iniciativas -como la de un legislador oficialista de estatizar de depósitos bancarios- que de prosperar, van a complicar la operatoria de cualquier persona en 2022 y 2023", advirtió.

En declaraciones al programa "Esta mañana", que se emite por Radio Rivadavia, de Pablo consideró que "para frenar el intento de radicalización del Gobierno tras las elecciones legislativas, ahí va a estar la nueva composición de diputados y senadores a partir del 10 de diciembre".

En este marco, el economista evaluó que la Argentina "tiene superávit comercial y déficit cambiario. Y sin embargo, el Banco Central pierde reservas: eso quiere decir que hay desfasajes. En el mercado cambiario hay presiones múltiples".

De Pablo: se vienen dos años "de un poder político debilitado" que le pondrá "techo" a la economía

¿Las nuevas medidas ayudan o perjudican la imagen del Gobierno?: esto opina un experto

El consultor político Jorge Giacobbe analizó la imagen de los políticos más influyentes de la Argentina.

Giacobbe señaló que Cristina Kirchner tiene un 22% de imagen positiva frente a un 70% de negativa. Algo similar a lo que ocurre con Alberto Fernández, quien tiene una aceptación del 17.5% y un rechazo del 68.2 por ciento.

De hecho, el 47.5% responsabilizó a la vicepresidenta de la derrota oficialista en las PASO y el 35.3% apuntó contra el jefe de Estado.

Sobre el Presidente, el consultor político adelantó que solo el 6% de la población cree en lo que dice. "Después de las PASO, cayó otros 10 puntos, aún diciéndole a la gente que el cambio de Gabinete era maravilloso porque eran sus excompañeros de laburo", agregó.

Giacobbe advirtió que el 29% de la sociedad cree que son cambios positivos, pero que el nuevo jefe de Gabinete, Juan Manzur, tiene 12.3% de imagen positiva y 66.5% de imagen negativa. En tanto, Aníbal Fernández cuenta con un 17.2% a favor y un 67% en contra. "Son profesionales que no vienen a enamorar y a hacer goles, sino a romper piernas", agregó.

¿Las nuevas medidas ayudan o perjudican la imagen del Gobierno?

Giacobbe también se refirió a la valoración que hace la sociedad respecto de Máximo Kirchner, y dijo: "Mide y significa lo mismo que la madre".

"Estos datos son de hace un tiempo y son sólidos. Él todavía no se había presentado a la opinión pública, porque es un muchacho que nunca le habló a la gente, y, sin embargo, la gente ya tenía una opinión sobre él. En términos de imagen, daba lo mismo que la madre y no pescaba nada afuera. El que quiere a la madre, lo quiere a él; y el que odia a la madre, lo odia a él. Sin haber hablado y sin salir a la cancha, Cristina le transfería todo lo positivo y todo lo negativo", detalló el consultor.

"Cuando quiera empezar su carrera en serio, va a tener la herencia, es decir, los 30 puntos de la madre y 65% de la población en contra", pronosticó.

¿Las nuevas medidas ayudan o perjudican la imagen del Gobierno?

Por el lado de Juntos por el Cambio, Giacobbe señaló que Patricia Bullrich cuenta con una imagen positiva del 48.9% y una negativa del 31.6%. En tanto, Horacio Rodríguez Larreta tiene 35.7% de aprobación y 27.3% de imagen negativa.

"El corazón del Frente de Todos es el Frente para la Victoria", señaló el consultor político.

"¿Qué pasa con un equipo que se funda para la victoria cuando no tienen victoria? Se matan entre ellos. Es la victoria o el ‘bolonqui’ interno", señaló.

"La clase política está aprendiendo que los argentinos no tienen ningún problema en poner a la democracia a 220 porque la democracia resiste y ya nadie tiene miedo de que le pase nada", agregó.

"La gente está usando a la democracia, entendiendo que es un juguete que no se rompe", puntualizó.

"No tienen ningún problema en darle a un equipo el 48% y volver a ponerlo en el 30% cuando ese equipo se vuelve loco y se desconecta de la realidad", explicó Giacobbe.

"Tampoco tienen problema en darle dos elecciones a Macri y después mandarlo a la casa", concluyó.