Aseguran que nuestro país no aprovecha la expansión china
Si bien la Argentina aún mantiene superávit comercial con China por la fuerte demanda que el gigante asiático tiene de productos primarios (principalmente soja), especialistas advierten que si nuestro país "no hace algo" aquel superávit pasará a ser déficit.
Todo indica que este año China volverá a romper la barrera del 11% en su tasa de crecimiento y aquel "algo" significa aprovechar ese desarrollo récord de su "socio comercial".
Un informe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), que avalan economistas locales, asegura que la Argentina no está "exprimiendo" el contexto favorable, debido a la excesiva especialización y la falta de infraestructura e innovación. China ya se convirtió en el segundo destino de las exportaciones argentinas, después de Brasil. Y el comercio bilateral chino-argentino viene aumentando por la fuerte demanda del país asiático de soja y de otras materias primas, y por las grandes importaciones de productos manufacturados chinos que realiza nuestro país. "Hay una fuerte desigualdad entre las importaciones y las exportaciones. El comercio bilateral se aceleró este año y creció un 50%. Sin embargo, nuestras exportaciones crecieron básicamente por el factor precio y además se encuentran muy concentradas en el sector oleaginoso", afirmó Mauricio Claveri, economista del departamento de Comercio Exterior de Abeceb.comEl peso de la tecnología "made in china" se siente cada vez más en el saldo de la balanza comercial. El comercio con China muestra superávit desde el 2001, pero cada año se ve reducido por la suba de las importaciones.
Mientras que en el 2003 la diferencia a favor del país era de u$s1.833 M, en el 2004 pasó a u$s1.300 M, y este año cerraría con sólo u$s220 M, aproximadamente. Los especialistas consultados por infobaeprofesional.com, en línea con aquel informe de la OCDE, puntualizaron que la causa fundamental del deterioro es la falta de infraestructura e innovación, la "excesiva especialización" en la soja y la consecuente falta de dinamismo en las exportaciones.
Las posibilidades que da el giganteLa OCDE hace hincapié en la gran oportunidad que el mercado asiático representa para 34 países de América latina, incluyendo a la Argentina.Según el estudio, la Argentina tiene industrias agropecuarias establecidas "con un claro potencial de desarrollo". Sin embargo, consigna, "explotar estas oportunidades involucra hacer las inversiones necesarias en infraestructura e innovación y evitar la excesiva especialización en los sectores de las commodities".El INDEC informó que en los primeros nueves meses del año el comercio entre los países aumentó por los siguientes factores:
- La exportación de productos primarios por parte de China, como porotos de soja, y manufacturas de origen agropecuario, en especial aceite de soja.
- Las importaciones de la Argentina: en su mayoría de productos electrónicos, agroquímicos, bienes de consumo (como videojuegos) y bienes de capital (motores de corriente alterna, compactadoras y aplanadoras, entre otros).
"No estamos aprovechando la oportunidad que el crecimiento chino brinda porque estamos muy concentrados en la venta de un solo cultivo, como es la soja y sus derivados que representan el 75% de las exportaciones", afirmó Claveri.
La diferencia entre la calidad de las exportaciones de los dos países se evidencia cuando se comparan las canastas:
- Cada kilo que la Argentina importa desde China tiene un valor de 3,47 dólares.
- Como contrapartida, cada kilo que nuestro país envía a aquel país asiático vale exactamente diez veces menos.
El estudio del organismo internacional marca que, teniendo en cuenta el periodo que va desde el 2000 al 2005, las ventajas comparativas de los commodities que América Latina exporta se vieron incrementadas. Sin embargo, el informe da cuenta que "los sectores manufactureros se vieron debilitados mientras que la concentración de las exportaciones dirigidas a China aumentó substancialmente".Para la organización, "a pesar de que las exportaciones de materias primas tienen un desempeño notable, las oportunidades comerciales con China e India no sólo se limitan a la venta de commodities"."Ya hay 100 millones de chinos -que en pocos años serán 200- que tiene un nivel de consumo del mundo desarrollado y ya demandan carne de calidad y hasta alimentos orgánicos", explica Rosendo Fraga, director del Centro de Estudios Unión para la Nueva Mayoría a infobaeprofesional.com"Este es el gran mercado del futuro para la Argentina, para el cual el país no parece estar preparándose", aclara el analista. Especialización con cuidadoLa OCDE advierte que "la especialización puede tener efectos negativos en otros sectores de la economía, a menos que sea manejada por políticas macroeconómicas responsables y con instituciones que funcionen adecuadamente". El problema económico es conocido mundialmente como "dutch disease" y trata de establecer la conexión entre la explotación de los recursos naturales y el declive en la producción manufacturera. El término, acuñado por The Economist en 1960, fue usado para describir la baja en el sector de productos manufacturados en Holanda tras el descubrimiento de gas natural.Para la directora del Estudio Bein y Asociados Marina Dal Poggeto, "el crecimiento de la Argentina está muy sustentado en el crecimiento asiático y si baja el precio de los commodities el país podría experimentar serias consecuencias". "La Argentina no está tomando resguardos para hacerle frente a un cambio en el patrón de precios internacionales", agrega. El estudio, que da cuenta de las perspectivas económicas de América latina para el 2008, pone énfasis en las posibilidades exportadoras que el gigante representa y le quita importancia al factor competitivo de la potencia asiática. "Las economías latinoamericanas están mucho menos expuestas a la competencia china que otras economías emergentes", señala el informe.La OCDE diferencia a los países que sólo exportan recursos naturales, como Paraguay, Chile y Venezuela, de los que ofrecen productos similares a los chinos e indios, como México. En un punto intermedio sitúa a la Argentina, Brasil y Colombia.Hay campo de acciónEl informe señala que China tiene "amplios mercados domésticos que no están siendo del todo explotados". Pero también releva un déficit de infraestructura e innovación para aprovechar el viento de cola que trae el crecimiento de China. Para el analista de Abeceb.com, "para que el país aproveche el crecimiento de China hay que ampliar la base exportadora y dinamizar las exportaciones para lograr incrementar la inserción en un país que está creciendo a dos dígitos". El experto especifica que habría que poner énfasis en los mercados en los que la Argentina puede desarrollarse, y nombra a "la carne, los vinos y las frutas" como los posibles sectores.Los especialistas coinciden en señalar que el país debería dejar de vender los productos a granel y darles un poco más de sofisticación, como hace Chile con sus vinos. "Pese a ser muy competitivos, hay mucho por hacer, muchos productos más sofisticados que podemos vender", destacan.La OCDE en su informe precisa que "la innovación es el la clave para lograr crecimiento diversificado a largo plazo y que América latina debe estar al frente en el proceso". En este sentido, destaca a Brasil y especialmente a Chile. El informe señala que la fuerte demanda de commodities "está claramente llevando la relación entre el gigante asiático y Latinoamérica, pero que se necesitan de manera urgente estrategias para lidiar con lo que queda después del boom"."La gran potencia asiática representa una gran oportunidad para nuestro país, con ventajas y desventajas. Se trata de potenciar las primeras y neutralizar las segundas", concluye Fraga.
Mariana Shaalomshaalo@infobae.com © infobaeprofesional.com