El Gobierno define si aumenta su participación en Aerolíneas
El Gobierno nacional definirá este viernes si efectivamente compra el 15% del capital de Aerolíneas Argentinas, para llevar así a 20% su participación en la empresa.
El valor del precio de las acciones que comprará el Estado argentino presenta diferencias importantes, según quien sea el que lo fija.
Las cifras oscilan entre los 400 millones de dólares que señalan los directores por el Estado, Raul Argañaraz y Ariel Basteiro, y los 1.000 millones que dicen los propietarios españoles.
Esa capitalización permitiría a la empresa descomprimir su situación financiera, y sería el resorte para la llegada de los aviones comprometidos por los directivos de Marsans, y dueños de la compañía, para reforzar su flota.
Antecedentes
El Gobierno manifestó a principios de noviembre que estudiaba la posibilidad de ampliar su participación societaria en la empresa aérea.
"La participación del Estado nacional es de 5 por ciento y estamos viendo de acrecentar esa participación", manifestó el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, aunque aclaró que la principal "preocupación" son los trastornos en los vuelos.
Fernández, además, aclaró que "el Estado español no tiene nada que ver con Aerolíneas Argentinas. Es una empresa privada de capitales españoles, pero argentina".
La aclaración surge porque se aceleraron los contactos con funcionarios de primera línea de la Casa Rosada y directivos de Marsans -controlante de Aerolíneas Argentinas y Austral- para aumentar la cantidad de acciones en poder estatal.
Fuentes vinculadas al proceso precisaron a la agencia DyN que las negociaciones seguirán hasta poco antes del 23 de noviembre, fecha tope que tiene el gobierno para una eventual modificación accionaria.
Los voceros consignaron que una de las alternativas que se maneja es ampliar al menos 10 por ciento de acciones, que se trocarían con "pasivos y otras deudas" que Marsans tendría con el Estado.
Así, el Estado estará cerca de llegar al 20 por ciento de participación, con lo cual tendrá más peso para la toma de decisiones en la operadora de más del 80 por ciento del total de vuelos de cabotaje que se realizan en el país.
De todos modos, desde el gobierno nacional salieron a relativizar las especulaciones: "Lo que más me preocupa es el conflicto que se da con los pilotos; estamos trabajándolo porque nos preocupan mucho las demoras que se están dando en los vuelos", aseguró Fernández al hablar sobre Aerolíneas.
El jefe de Gabinete informó que el propio presidente Néstor Kirchner intervino ayer en el análisis del conflicto que desde hace más de dos semanas mantiene complicado el sector aerocomercial.
"Estuvimos hablando durante todo el día con el Presidente y el ministro de Trabajo (Carlos Tomada) para resolver este tema que nos preocupa mucho", dijo Fernández, y agregó que "Aerolíneas tiene la mayor parte de los servicios de cabotaje y es la única que vuela a todos los destinos, pero no con la frecuencia que quisiera".
El representante estatal en Aerolíneas, Ariel Basteiro, volvió a cuestionar al grupo Marsans y reclamó que en una nueva reunión de directorio que se llevará a cabo mañana para tratar "la situación de la flota no exista ningún martes 13 que complique más todo".